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Estamos a unos metros de la casa de Harry, Los Durleys estan por ser trasladados... cuando me llegó una carta, con sobre rojo y me lo dio un elfo. Me alegre al recibir su carta, pero me preocupó por su seguridad
Mi amada Athenea
Antes de que me regañes, tengo noticias importantes... Él sabe los detalles del traslado... es una trampa
Va por tí
Necesito que te cuides
Con amor DM
Toma muchos riesgos por avisarnos, pero tengo un debate mental entre lo que debería hacer... no quiero ponerlo en peligro, pero el se arriesgó creyendo que no sé y eso me da cargo de conciencia, sabiendo que podemos morir y es mi culpa. Le entregó la carta a Ojoloco
- Alguien nos traicionó, Voldemort sabe
- Es imposible
- Solo nosotros sabemos
- No es imposible, y la carta lo explica
- Cómo sabemos que no mienten atacó Kingsley
- No tienes idea de lo que hablas... sabes el peligro en el que está si el traidor le dice a Voldemort que nos advirtieron.
- Qué hacemos? - preguntó Thonks
- Seguiremos con el plan. -dio por terminado el tema Ojoloco
- Haré que Voldemort vaya por mi, así que Nick irás conmigo
- No, el irá primero por mí, cómo ya sabíamos. No se preocupen, yo me encargo
ya no podemos cambiar el plan
- es un plan suicida
- Es lo que querías hacer tú Athenea
- Alastor...
- Tranquila Athenea, Yo ya viví... y tú estarás bien... confío en que podrás guiarlos y no los abandonarás si algo me pasa...
- Gracias...
- Confío en tí
- No podemos dejar que Harry se entere. Es muy noble y no nos va a dejar - comentó Her
- No sabrá hasta no llegar al lugar seguro
Una vez que los Durley fueron trasladados, entramos. En medio de un griterío de calurosos saludos, Hermione lo abrazó y Ron le dio palmadas en la espalda. Pero Harry me abrazó, lo que me tomó por sorpresa.
- De verdad lamento todo lo que pasó y me alegra que estés aquí-
-¿Todo bien, Harry? -preguntó Hagrid-. ¿Listo para pirarte?
