No siempre fue así
Athenea:
— Mi pequeña, todos los invitados nos están esperando — dijo mi madre al entrar en la habitación. Me miró con orgullo, sus ojos brillaban de emoción. — Mi bella princesita ya está grande — añadió, tomando mis mejillas entre sus manos, besando mi frente y abrazándome. — Luces magnífica.
— Gracias, mamá.
— ¿Listas, mis princesas? — preguntó mi padre, ingresando y uniéndose al abrazo familiar. — Una luce más hermosa que la otra. Los chicos ya llegaron, tu hermano ya está con Izzie y Cissy te está buscando, mi amor.
— Será mejor apresurarnos — respondió mi madre con una gran sonrisa.
— Él ya llegaron todos... incluye al hijo de Cissy?
— ¿Qué pregunta es esa, mi niña? Por supuesto — respondió mi madre, con una ligera preocupación en su voz. Hice un gesto de desdén, y ambos me miraron con ternura.
— Mi niña... — dijo mi madre suavemente — no pueden seguir enojados por una cosa de niños.
— Hoy estás cumpliendo 14, ya eres una princesita grande. ¿No crees que alguien debe ceder? — añadió mi padre, tratando de razonar conmigo.
— Yo no hice nada malo. Intenté hablar con él, pero fue él quien fue indiferente desde el principio. Soy una Black, no tengo que hacer nada más.
— Mi vida, se te olvida que él es un Malfoy, tan terco como tu tío — dijo mi madre con una sonrisa.
— Pero ya estoy haciendo algo, mami. Sigo el consejo del abuelo: repito paciencia tres veces antes de cometer un asesinato. Debería estar agradecido — respondí, tratando de ocultar una sonrisa traviesa.
— Eres digna nieta de Grindelwald — comentó mi padre, negando con la cabeza mientras sonreía.
— Gracias, papi — respondí, sintiendo un orgullo cálido.
Mi padre ofreció su brazo a mi madre, y se besaron antes de salir. Ellos son mi estándar. Por ellos creo en el amor. Quiero un amor tan fuerte que sea capaz de darlo todo por mí, un amor tan apasionado que no haya un día en el que sus ojos no brillen al verse. Mi padre sería capaz de dar su vida por mi madre, y ella haría lo mismo. No puede existir un mundo donde no estén juntos, porque sería un verdadero tormento. Quiero ese amor tan fuerte, tan apasionado. Un amor puro, sano y bonito. Llevan más de 14 años casados y no hay un solo día en el que mi padre no intente enamorar a mi madre aún más, como si eso fuera posible. Cada detalle, cada cita, cada ramo de flores mágicas que le regala. Me encanta cómo mantienen esa tradición de los Black, las flores son eternas, y mi madre tiene ramos por toda la casa. Es maravilloso ver cómo han crecido juntos, cómo cada uno se ha convertido en la mejor versión de sí mismo sin opacar el brillo del otro.
ESTÁS LEYENDO
The Last Grindelwald
FanfictionDe belleza sobrenatural Talento extraordinario Elegante Astuta Inteligente Estratega ...