Radioapple ~Salvarse a uno mismo de la destrucción~

3. Reencuentro

Después de una larga y cansada caminata, Azrael, Alastor y Lucifer llegaron al Hazbin Hotel. 

-- ¿Por qué teniamos que venir andando? -- Preguntó Alastor. 

-- Tenía que hacer mis pasos diarios -- Se burló Azrael antes de tocar la puerta --. A partir de aquí, es vuestra lucha, yo me tengo que ir. 

-- Adios hermano -- Se despidió Lucifer antes de que Azrael se hiciera polvo. 

Lucifer volvió a tocar la puerta y escuchó como unas silenciosas pisadas se dirigian a la puerta. Al abrirles, la cara de Emily fue lo que se encontraron. 

-- El Hazbin Hotel esta... 

Se cortó de golpe al ver mejor al dúo. Grandes lágrimas empezaron a surgir de sus mejillas y abrazó a Lucifer, aferrandose a su figura como si fuese lo último que le quedara. 

-- ¿Qué pasa Emily? -- Preguntó Ángel con un extraño tono apagado. 

Emily dejó pasar al dúo. Dejando que la cara de la mayoría se llenasen de lágrimas. 

Ángel se acercó corriendo y abrazó a Lucifer, consciente de lo poco que le gustaba el contacto físico a Alastor. 

-- Hola Ángel -- Dijo casi en un susurro el rey. Solo un día en el cielo ya lo había desanimado, y recordar aquel ambiente donde se sentía tan querido lo rejuvenecía. 

-- ¡Alastor! -- Corrió Niffty a abrazar a su amigo. Este recibió con una pequeña sonrisa el intento de su amiga de trepar su cuerpo. 

-- Oye, él único que puede hacer eso soy yo -- Se burló Lucifer, sacando a Alastor de sus casillas. 

-- ¿Lo habeis arreglado? -- Preguntó Cherry, quien intentaba disimular su entusiasmo. 

Alastor miró a Lucifer, después de todo, de él dependía la respuesta. El rey se acercó a Alastor y le tomó la mano, dándole un beso estilo princesa. 

-- ¡De puta madre! -- Exclamó Ángel. 

De repente, el contrato de Husk salió del bolsillo de Alastor y un pequeño humo rosa claro lo rodeo, al igual que al propio Husk. Cuando este calló, Ángel corrio hasta él. 

-- ¿Qué ha sido eso? -- Preguntó Husk mientras se levantaba. 

-- ¡Espera Husky! -- Ordenó Ángel mientras le observaba la cara. Justo como había pensado, una esclerótica volvía a ser blanca y ya no negra. En los ojos de Ángel empezaron a brotar más lágrimas --. Lo logré. 

-- ¿El qué? -- Preguntó aún confundido Husk. 

-- Tu alma es oficialmente medio libre Husker. Dale las gracias a Ángel -- Declaró Alastor. 

Husk se giró hacia Ángel y le dio un abrazo calmado, mientras susurraba tantos agradecimientos como sabía. 

Las lágrimas quedaron tranquilas durante varias horas en las que todos pusieron en común lo que había pasado después del exterminio. 

-- ¿Dónde está Charlie? -- Volvió a preguntar como por séptima vez Lucifer.

-- Debe estar al caer, lleva días en el castillo junto a los pecados -- Informó Emily. 

-- ¿Los pecados? -- Repitió Lucifer -- ¿Qué pecados? 

-- Los que habían estado en tu cumpleaños más otro -- Comentó Ángel. 

-- ¿Satán? -- Dedujo con rápidez el rey -- Hace años que no lo veo... 

En ese momento, Charlie apareció con Vaggie por la puerta, ambas acompañadas por Adam. Quien miraba al suelo sin ninguna expresión.