🫦Capítulo 3🫦

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ÁNGELA

Fuimos hasta la pista de bailar, el extraño colocó su mano en mi cintura y me acercó hasta su cuerpo. La música era lenta, pero me alejé de él.

—"Un poco alejado es mejor".—dije. Tenía que estar alejada, cerca podía inyectarme algo o hacerme otra cosa.

—"Con lo que te sienta cómoda".— Responde.

Sus ojos se encontraron con los míos, todavía llevaba su antifaz puesto, pero esta era de color negro combinado con su traje.

—"Puedo saber tu nombre".

—"Me llamo Emily".— dije el primer hombre que pasó por mi mente, no iba a hacer estupida y revelarle mi identidad a un extraño.

Él me sonrió. —"Mucho gusto, Emily, soy Ian".

—"Gracias, igual".

El extraño volvió a acercarme a él, esta vez tan cerca que pude oler su perfume. Olía a peligro en todo lo sentido, pero su fragancia era exquisita.

Respiré su aroma y sentí cómo su mano en mi cintura se apretó más, me separé de él y vi que sus ojos bajaron a mis labios.

Sus miradas eran de deseo, tenía que haberle dicho algo, pero cuando sus ojos subieron nuevamente para encontrarse con los míos, las palabras se quedaron atoradas en mi garganta.

«¿Quién demonio es este hombre y por qué me tiene nerviosa?» No me gustaba la reacción que estaba teniendo con él.

Mis instintos me advirtieron de que tenía que alejarme, me detuve y él enseguida lo hizo. —"Disculpa, pero dejaremos el baile hasta aquí". Intente salí de su agarre, pero él no me sorteaba, al contrario, me pego de su pecho.

Se inclinó hacia mi odio. —"Porque hice algo para incomodarla".— Su voz ronca hizo que mi cuerpo reaccionara.

—"N-no".— Cuando escuché mi voz, tuve que tragar saliva para recuperarme. —"No hiciste nada".

—"Entonces".— Sentí su aliento en mi cuello.

—"Estoy un poco cansada".

Él se alejó de mí, cuando pensé que me iba a soltar un disparo se escuchó en el salo. Miré en busca del sonido y mis sentidos reaccionaron.

Agarré la mano del hombre para quitarla de mí, pero su agarre solo se apretó más. Lo miré, tenía la misma sonrisa malvada, otro disparo volvió a sonar y las personas empezaron a correr.

En una fracción de segundo una lluvia de bala empezó a caer. Miré a todas partes en busca de mi padre pero no lo vi, miré al extraño nuevamente y él estaba demasiado tranquilo.

Muy tranquilo para mi gusto, eso me hizo pensar que él estaba en esto. Se inclinó hasta mi oído.

—"Por cierto, soy Connor Tynes".—Y fue todo lo que escuché porque luego sentí un pinchazo en mi cuello y todo a mi alrededor se oscureció.

Un Romance Mafioso © {1}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora