🫦Capítulo 81🫦

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ÁNGELA

Me desperté y nadie me había dado respuesta sobre qué había pasado con mi hijo.

Miré a la enfermera. —"Dígame qué pasó con mi hijo".

—"No se preocupe, usted estará bien".

—"No me importa si estaré bien, quiero saber qué pasó con mi hijo".

Pero ella solo bajó la cabeza y evitó mi mirada. Me quité el suero y todo lo que estaba pegado a mi cuerpo y salí de la cama.

—"Srta. Crane, debe estar en la cama".

Ella intentó agarrarme, pero me alejé de ella.

—"No te atrevas a ponerme una mano encima o juró que te mataré con mis propias manos".

Salí afuera con una bata y la enfermera cayéndome atrás.

Cuando llegué a la sala de espera, mi padre y Connor estaban sentados, era la primera vez que lo veía juntos. Ellos me miraron y rápidamente caminaron hacia mí.

—"Ángela, cariño, debes estar en la cama".

Miré a mi padre. —"Tú sí me dirás la verdad". —Me acerqué a él. —"¿Qué le pasó a mi hijo?".

Por primera vez, mi padre no me miró a los ojos. Miré a Connor y él estaba evitando mi mirada. Entonces sentí una mano detrás de mí.

—"Srta. Crane debe estar en la cama".

Miro al doctor. —"Es tu deber decirme qué pasó con mi hijo".

Él miró a mi padre y a Connor, luego se miró a sí mismo.

—"Lo siento mucho, hicimos todo lo que estuvo en nuestras manos, pero lamentablemente no pudimos salvarlo".

Fue todo lo que escuché porque, por primera vez, mis ojos se llenaron de lágrimas; por primera vez estaba llorando a la vista de todo.

Mi padre y Connor intentaron acercarse a mí, pero me alejé de ellos.

—"No se me acerquen, no me toque nadie".

—"Ángela, cariño".

Lo ignoré y comencé a caminar hacia la puerta, pero Connor se cruzó en mi camino colocándose frente a mí.

—"Quítate de mi camino".

—"¿Qué piensas hacer?".

—"Voy a matar a Donato".

Él me agarró y me chocó contra su pecho.

—"Suéltame".

—"Tranquila, por favor, amor".

—"Mato a nuestro bebé, él no tenía nada de culpa".

Él me apretó más contra su pecho; luego bajó su cabeza a mi cuello.

—"Juró que lo vamos a matar, pero primero tienes que estar bien".

—"Estoy bien, pero estaré mejor cuando mate a Donato".

Sentí un pinchazo en mi cuello y lo último que escuché fueron las palabras de Connor.

—"Perdóname, mi amor, pero es por tu bien".

Un Romance Mafioso © {1}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora