Un Romance Mafioso © {1}

🫦Capítulo 59🫦

WALTER

Anoche cuando Ángela salió de la casa, mandé a uno de mi hombre a seguirla para cuidarla. Esta mañana me desperté esperando encontrarla en la casa.  

Pero cuando no la vi, busqué al chico que había mandado, cuando él me mostró una foto de Ángela besando al enemigo.

Estaba en una montaña besando a Connor Tynes luego de que él casi me matase ayer. Mi hija a la que hice una copia exacta de mí era una puta traidora.  

Tanta idea que imaginé cuando vi esa foto. Quizá ella se puso de acuerdo con los enemigos para atacarnos ayer para que ellos dos controlen Rusia después de mi muerte.  

Quería creer que mi hija no sería capaz de venderme con los enemigos; pero a este tiempo no sabía quién era mi hija. Es la hija que eduqué para que acabara con los enemigos; hoy en día se estaba acostando con ellos.  

La miré; la había golpeado tres veces. — "Vete a la puta habitación".  

—"No me iré sin que me escuches, jamás te traicionaría".  

Agarré el teléfono y lo mostré en su cara donde la foto de ella y el bastardo salían besándose.  

—"Entonces, ¿qué demonio le llamas a eso?".  

ÁNGELA

Miro el teléfono de mi padre, quien tiene una foto mía y de Connor besándonos anoche en la montaña.  

—"Porque demonio, te acóstate con él".  

—"Por favor, padre".  

Su mano voló de nuevo a mi mejilla. — "Cállate, desaparece de mi vista ahora, antes de que me arrepienta de lo que haré".  

Caminé hacia la puerta; sabía que no iba a escuchar mientras estaba enojado. Tendría que conversarlo cuando el enojo se le halla pasado.  

Aunque no tenía idea que decirle si era verdad, era una traidora. Eso no se podía negar, aunque quisiera.  

Llegué a mi habitación y Axel empezó a cerrar la puerta. —No lo haga, no seré una puta prisionera".  

—"Lo siento, Srta. Crane, es orden de su padre y usted más que nadie debe saber que tengo que cumplirla".—Y diciendo sus últimas palabras, cierra la puerta, dejándome completamente sola.  

«Por qué me pasa esto a mí; si nunca te hubiera conocido Connor Tynes, mi vida no estaría así»

Como si fuera una señal, mi teléfono sonó con un número desconocido. Lo tomé para responder: no tenía ni puta idea de quién era.  

—"Hola".  

—"Preciosa".— La voz de Connor del otro lado del teléfono se escuchaba agitada.   

—"Lo sabe todo, mi padre, lo nuestro". —Mis ojos se llenaron de lágrimas.  

—"Tranquila preciosa, no permitiré que ese hijo de puta te ponga otro dedo encima". — Supe ahí que había escuchado todo.  

—"Son problemas de mi padre y mío, sabía que esto pasaría al meterme contigo".  

—"Me vale mierda lo que piense, no salga de esa habitación". Lo escuché respirar profundo. —"Iré por ti y no me importará la consecuencia; nadie se atreve a tocarte, mucho menos el hijo de puta de tu padre".