Un Romance Mafioso © {1}

🫦Capítulo 69🫦

CONNOR

Miré el mensaje que me había mandado Ángela; no iba a responderle, mucho menos cuando me llamó. Le rechacé la llamada.

Estaba planeando todo lo que iba a hacer y para eso tenía que pensar que no había escuchado nada.

Tomé mi teléfono y llamé a Max.

—"Sr. Tynes".

—"¿Ya me tienes la información de los Castillo?".

—"Acabo de enviársela por correo".

Cerré la llamada y entré a mi correo. Me enteré de que era hijo único y que se la había pasado viajando por el mundo hasta hace unos meses, que su padre lo obligó a pertenecer a la mafia.

Estaba luchando con las ganas de ir a matarlo o ir con un ejército a la mansión de los Crane y matar a todos para secuestrar a Ángela de nuevo.

Pero obvio que no lo iba a hacer; tenía un plan mejor. Iba a esperar a que se casara con Saúl, porque en la noche de boda iba a ir a matarlo y llevarme a Ángela.

Solo tenía que luchar con esas ganas de acabar con todo a mi manera; no era un hombre que dejaba que el tiempo pasara. Era un hombre de hacer las cosas en el momento.

Una semana pasará rápido y yo estaré aquí en Moscú mientras espero cada hora hasta que llegue el día.

ÁNGELA

Una semana después.

Estaba parada en el espejo viéndome vestida de blanco; hoy era el día. Mi padre quiso hacer la boda en la casa.

Apenas lo vi, cumplió su promesa de no verme hasta que estuviera casada con Saúl. Entró a mi habitación con una sonrisa.

—"Vamos, ya están esperando a la novia".

Tomé su brazo. Cuando bajamos la escalera, él me llevó hasta la parte de atrás donde los invitados estaban esperando.

Empezamos a caminar hacia el altar. Saúl estaba esperando con un traje. Cuando llegamos al altar, mi padre le dio mi brazo a Saúl.

—"Cuídamela mucho".

—"Estará en buenas manos".

Tomamos asiento frente al padre que iba a casarnos.

—"Estamos reunidos hoy para unir a esta hermosa pareja que está aquí por voluntad propia".

—"Si alguno de los presentes conoce un impedimento para que esta boda no se realice, que hable ahora o calle para siempre".

Pero nadie dijo nada; esperaba que Connor saliera. No tuve noticias de él desde que salí del hotel.

—"Siendo así, podemos continuar". — Él mira a Saúl. —"Saúl Castillo, ¿aceptas por esposa a Ángela Crane?".

—"Sí, acepto".

Él se gira hacia mí. —"Ángela Crane, ¿aceptas por esposo a Saúl Castillo?".

Miré a Saúl, quien tenía una sonrisa esperando mi respuesta, giré mi cabeza y me encontré con la mirada de mi padre, diciéndome que sabía lo que tenía que hacer. Me giré nuevamente hacia el padre.

—"Sí, acepto".