El dragón que nos unió (Callum X Male Reader)

Capitulo 4 T1: Sedientos de sangre parte 1

Debido a que el viaje sería largo nos vimos obligados a dormir al aire libre o al menos los príncipes ya que Rayla quería hacer guardia y como obviamente no confío en los elfos, me mantuve despierto también para hacer guardia y que a la elfo no se le ocurra robar el huevo e irse dejándonos tirados.

Ahora mismo ambos Príncipes se encuentran durmiendo debajo de un árbol mientras la elfo y yo estábamos sentados sobre una rocas, separados por supuesto.

Rayla: Deberías dormir, el viaje será largo y yo puedo hacer guardia. Aún tienes algunas pocas horas antes del amanecer y yo puedo quedarme despierta sin ningún problema, soy una elfo de luna después de todo— ni siquiera le respondí. Estaba más concentrado en alguna posible amenaza en lugar de querer hablar con ella— Oye, ¿Me escuchaste?

___: Si te escuché. Deja de hablar, no tengo porque tener una conversación contigo— dije claramente frustrado mientras volteo a verla— No dormiré tranquilo sabiendo que hay una elfo que nos "cuida" así que ahórrate tus comentarios.

Rayla: ¿Que te pasa conmigo? No te he hecho nada— de acuerdo, eso sí me molestó.

___: ¿Nada? Venían a matarme a mi también, no creas que no me di cuenta de las cintas en tu muñeca y lo que estas significan— al escucharme rápidamente esconde sus brazos detrás de ella— ¿De verdad crees que por esconder tus brazos lo voy a olvidar?

Rayla: No...— dice antes de volver sus brazos al frente— ¿Cómo sabes lo que significan?

___: Papá me hablaba de ustedes, tanto de los elfos de estrellas, sol, cielo, mareas, tierra, pero en especial me hablaba de los elfos de luna. ¿Por qué? No lo sé, pero hablaba de ustedes con entusiasmo que hasta a mí me dieron ganas de conocer a uno— sonreí por unos segundos antes de cambiar abruptamente mi rostro a uno molesto y triste— Hasta que llegó el día donde finalmente los conocí y pude ver los sedientos de sangre que eran hasta asesinar a mi padre. Así que tengo mis razones para odiar a los de tu especie y a su vez mantener información de ustedes. Después de todo solo un idiota atacaría sin conocer a su enemigo.

Rayla: Que...¿Que fue lo que pasó esa noche?— parecía genuinamente dolida después de escucharme pero no me importa. No aceptaré la lastima de una elfo, menos de una de luna.

___: Primero respóndeme algunas cosas, elfo— aunque se molestó por no llamarla por su nombre, asintió de todas formas por lo que giré completamente mi cuerpo para verla bien— ¿Por qué hay dos cintas extras? Sé que una fue para el rey y por eso no la tienes y otra es para mí. ¿Entonces de quien son esas dos sobrantes?

Rayla: Una es para el principe Ezran— al escucharla rápidamente preparo mi arco en caso de verla intentar algo pero se apresuró en hablar— ¡Pe-pero ya no lo haré! Ahora solo quiero devolver el huevo, pero te prometo que no le haré daño a los príncipes.

___: De acuerdo— dije antes de dejar mi arco a un lado pero manteniendo la guardia alta— Te queda una cinta.

Rayla: La otra es...para tu hermano— apenas la escuché me levanté molesto y me acerqué a ella.

___: ¿Mi hermano? ¡Mi hermano solo tiene 4 años! ¡¿Por qué irían a matar a un simple niño que no les ha hecho nada a ninguno de ustedes?!— Rayla al escucharme pareció sorprendida pero no me dejaré engañar fácilmente— Siguen siendo igual de crueles que hace años.

Rayla: Y-yo no tenía idea.

___: Si claro, y yo soy descendiente de elfos— preferí sentarme junto a los príncipes para poder cuidarlos.

Rayla: Lo digo enserio— dice levantándose pero sin acercarse— Yo estaba asignada para matarte a ti, a Ezran al rey.

___: Y ya sabemos que se cumplió uno de esos asesinatos— digo refiriéndome al listón que le falta y al cual ella observa también— Al menos los otros listones siguen ahí. Pero te voy a aclarar una cosa, si veo que otro listón cae y tengo a Ezran vivo a mi lado. Te juro que voy a usar esto para matarte— digo a la vez que le muestro la piedra la cual brilla intensamente provocando que Rayla diera algunos pasos hacia atrás.