Modesto: Cornelio, no te comprometas
Déborah: por si no me escucharon bien, estoy de su lado. Tengo algo que pueden usar en contra de Pedro del Monte
Cornelio: pues no le creo, porque usted nunca hace nada sin recibir algo a cambio. ¿Qué quiere?
Déborah: les juro que esta vez estoy del lado de la justicia
Cornelio: suéltelo, pues. ¿Qué tiene que decir?
Déborah: para todos los pobres que se encuentran aquí presentes, es conocido que el dinero mueve el mundo. Pedro les puede quitar al niño con un tronar de dedos
Chavita: mi hija Paloma se está encargando de eso
Déborah: ay, esa abogaducha de pueblo no sabe con quién se mete
Adela: señora, si nada más va a insultar ¿por qué no mejor se va ya rapidito? De veras ya me está cansando
Déborah: para poderle ganar a Pedro, tienen que tener algo muy fuerte en su contra. Algo con qué hundirlo y que no tenga salvación
Cornelio: ¿qué cosa sería esa?
Déborah: Pedro del Monte es un asesino, mató a Dante Alamillo
...
T/n: Sara ¿por qué? ¿Por qué nos mentiste a todos de esa manera? (triste)
Sara: yo no lo sabía, T/n, de verdad, yo no lo sabía
T/n: ¿viniste solo... por la herencia de mi papá?
Sara: no, claro que no
Trata de acercarse, pero T/n retrocede
Sara: mi mamá me mintió, me engañó para quedarme con algo que realmente no era mío
T/n: ¿por qué tendría que creerte?
Sara: ¿estás dudando de mí? (lágrimas)
T/n: es que no sé que pensar, lo que dijo Pedro fue...
Sara: fue mentira, todo lo que dijo fue mentira. Yo no soy ninguna ambiciosa, y me duele que pienses eso de mí
T/n: si Pedro no nos lo hubiera dicho ¿tú hubieras dicho la verdad o te ibas a quedar callada?
Sara: iba a decirles la verdad, porque no quiero más mentiras, no quiero que vivamos así. Tienes que creerme
T/n: ¿lo que dijiste de Pedro era cierto? ¿Él te amenazó?
Sara: sí, me amenazó con matar a nuestro hijo si no me iba de Santa Catalina
T/n: él lo niega
Sara: ¿y vas a creerle a él antes que a mí?
T/n: perdón, pero todo esto... me está confundiendo. No sé que pensar en realidad
Sara: créeme, por favor, te lo suplico (toma su mano) yo no lo sabía, además, yo nunca haría algo así
T/n: (se aleja) necesito respirar aire, estar aquí me asfixia
Y así, si nada más que decir, sale de la oficina. Sin duda estaba dolida, su cabeza estaba hecha un lío, no sabía si creerle a Sara o no. En realidad, no sabía que hacer. Quería estar con el amor de su vida, pero no quería seguir viviendo en una burbuja donde solamente habitaban mentiras, Quería vivir feliz, por primera vez... quería ser feliz
Mientras tanto, Sara estaba sentada en uno de los sillones llorando, no podía creer que no le hayan creído, y que Pedro la delatara de esa manera. Pensaba decirles la verdad, pero esa no había sido la forma correcta de hacerlo, y mucho menos creer en la palabra de alguien que ha cometido varios errores en el pasado. No podía creerlo
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LA HERENCIA, UN LEGADO DE AMOR
RomanceEsta historia será parecida a la novela, pero tendrá unos cambios. La historia muestra la vida de Don Severiano y a seis de sus hijos adoptivos quienes enfrentan la inesperada muerte de su padre, así como la llegada de una media hermana que ha sido...