Sara: ay, no, dime la verdad ¿tú y el señor Próspero...?
Déborah: ¿qué? ¿si somos algo más?
Sara: ¿no?
Déborah: sí, solo somos amantes
Sara tenía una cara más que de sorpresa, estaba en schok, no sabía como reaccionar
...
Rosa: que bochorno, esos Cruz dan pena ajena y de todas maneras no sirvió de nada porque de todas formas mi Jessiquita se fue
Próspero: Jessica ya tomó una decisión y no va a volver
Rosa: me canso que regresa
Próspero: (pensando)
Rosa: ¿qué tienes, Prospi? Seguro esos frijoles te cayeron mal. Ay, Dios mío (resuella) ¿y si tenían toloache o polvo de uñas, o eso que le pone esa gente?
Próspero: no, no, no, Rosa, es que yo quiero pedirte algo
Rosa: ay, hable, me tienes en ascuas
Próspero: (suspira) Rosa, mírame a los ojos
Rosa: (lo mira)
Próspero: por favor, pídele a Déborah que se vaya de esta casa, hazlo antes de que sea demasiado tarde
Rosa se asusta
...
Sara: no, no, no ¿cómo es posible, mamá? No lo puedo creer
Déborah: Próspero es un caballero, jamás diría una palabra
Sara: es que ese no es el problema, mamá, estás haciéndole daño a una familia ¿cómo te atreves?
Déborah: ¿por quién me tomas? Yo seré todo, menos una rompe hogares
Sara: ¡eres una rompe hogares! (grita susurrando) ¿qué no fue suficiente con el dolor que le causaste a doña Catalina? ¿no ves todo lo que te dicen? ¿no aprendiste nada?
Déborah no dice nada
Sara: ¿qué no...? A ver, no lo puedo creer ¿qué no Rosa es tu amiga?
Déborah: esa no es amiga de nadie, solo quiere casar a sus hijas con los del Monte, pero bueno, ya se le arruinó el plan con Julieta, porque tú fuiste la que le quitó a Juan
Sara: no, no, yo no hice eso, ya, por favor vete, vete ¿sabes qué? Pensaba hablar con Juan para que regresaras a la hacienda, pero no tienes límites
Déborah: Saris, es que yo no te lo quería decir, pero es que tú me haces enojar
Sara: es que ese siempre ha sido el problema contigo, tú no piensas en los demás, solamente piensas en ti y haces lo que te da placer en el momento, pero nunca te das cuenta de las consecuencias
Déborah: mi amor, me importas tú, Saris ¿tú crees que yo iba a dejar pasar la aventada de copa y todo lo que te gritó Rosa? Hago las cosas por algo
Sara: no, no, no quieras hacerme creer que eres amante de ese señor para vengarme, ya no soy totna, no voy a dejar que me manipules, ya, por favor, no más (suspira) no lo puedo creer, vete
La mujer la miraba sin intenciones de irse
Sara: vete
Déborah: (se va)
...
T/n se encontraba sentada en su cama recordando la pelea que tuvo con Sara
Recuerdo...
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LA HERENCIA, UN LEGADO DE AMOR
RomansaEsta historia será parecida a la novela, pero tendrá unos cambios. La historia muestra la vida de Don Severiano y a seis de sus hijos adoptivos quienes enfrentan la inesperada muerte de su padre, así como la llegada de una media hermana que ha sido...