SONIDO 31

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El sonido de la hebilla del cinturón cae al piso, he sido despojado de la ropa, apenas tengo la camisa abierta en su totalidad, voy a bajar la pierna, pero Scott me detiene, por lo que, la dejo en ángulo, la acaricia, la besa, veo el techo de su cuarto, tiene una moldura a todo el rededor, se ve elegante, tiene pequeños desniveles la misma moldura... es blanca y en ningún momento se ve el corte, sin duda está bien fabricada... veo el color de la pared... no puedo, imposible concentrarme en algo más que no sean las caricias de Scott en mi pecho, en mis piernas, gimo cuando lame mi miembro, que poco a poco va ganando volumen.

Me tenso cuando un dedo toca mi entrada, siento humedad e invasión, juego con mis ojos, intentando no golpearlo, alejarlo, levantarme y largarme, es un mejor trabajo, toqué fondo, no pienso regresar a lo de antes, pero sentir placer no es algo que quisiera, no quiero que me guste, no deseo disfrutar, pero no lo lograré.

Su dedo entra profundo, gira, escarba, lubrica, sube más mi pierna, al igual a que me obliga a abrirlas, cierro los ojos y disfruto de sus besos, le entrego mi lengua para que pueda succionarla, tocarla, para que sus labios chupen mis labios, giro mi cara para intentar tener el control, pero me besa, jala mi labio inferior, lo lame y yo simplemente correspondo a lo que él pida.

Abro los ojos cuando se aleja de mí, se incorpora, toma el condón, lo abre, se lo pone y deja sus brazos a mis costados, me ha ampliado, me siento húmedo y la marca del condón es buena, acomodo la almohada a modo de poner mi cabeza cómoda, Scott me mira y yo abro las piernas y cierro los ojos.

Apunta y entra despacio, necesito incluso presionar mi nariz para ampliar mis fosas nasales e ir sacando poco a poco el aire que llevo reteniendo. Un balanceo rítmico va teniendo mi cuerpo, me gusta, no necesito apremiarlo, ni marcarle el movimiento que quiero o necesito, puesto que, estoy bien con ello.

Scott no deja de besar mi pecho, de chupar o jugar con mi pezón, abro un poco los ojos cuando acaricia mi cabello, cuando después de un tiempo empiezo a sudar, él está cuidando de mí, aun no queriendo va escuchando y observando un poco mis gestos, él sabe si aumenta o disminuye besos, caricias, embistes, solo que, al estar disfrutando cada vez más, siento que ya no puedo controlarme, que me será difícil seguir la única regla que hay para él.

No debo hacer ruido, ni uno solo, intento sacar el aire lo más despacio de mi boca, aspirar por la nariz, pero se me dificulta horrores.

Sujeto con fuerza la almohada, mis brazos los tengo en ángulo hacia arriba, los dedos me duelen de tanto que presiono la almohada.

Giro mi cara de un lado a otro, suave, despacio, mis ojos los retuerzo, los cierro y los abro, lentamente, me siento abrumado, sin duda mi serotonina y testosterona están en un nivel muy alto, tanto que no voy a lograr controlarlas.

Tengo las piernas en ángulo, las tengo muy abiertas, mi cuerpo se mueve a su ritmo, él lo marca, él lleva el control, toma mis caderas de forma fuerte y aumenta el ritmo, choca con mi próstata una y otra vez, fuerte, rápido, duro, tan duro que me es imposible el autocontrol.

- ¡AAAAAH SEÑOR!

La satisfacción está al máximo, suelto mi cuerpo por completo, siento mi semen por todo mi abdomen.

Regreso a la realidad de una forma muy dura. Un bofetón en mi mejilla me indica el gran error que he cometido.

Regreso mi cara al frente después de que me la haya volteado con la bofetada, lo miro, por completo asustado cuando sus manos envuelven mi cuello, presiona fuerte, sujeto sus manos con las mías, intentando alejarlo.

Solo que sigue penetrándome con la misma fuerza, en el mismo lugar, sigo sintiendo mi semen salir poco a poco de mi miembro, sigo sintiendo el placer que no abandona mi cuerpo.

Mis ojos se van cerrando, abro la boca, pero solo para jalar un poco de aire que, sin duda, no entra como quisiera.

Aspiro tanto aire como puedo repetidas veces, pero es muy corta la aspiración.

Cierro los ojos y hay un silencio total.

Cuando abro los ojos, Scott está limpiando el sudor de mi frente con un paño húmedo, tiene la bata puesta y cerrada, está sentado a un lado de mí, sobre la misma cama, toco mi cuello, él ve hacia donde llevo mis manos, un ligero dolor rodea mi cuello.

Sin ser grosero o agresivo, alejo su mano de mi frente, la aleja sin problema, me siento en la cama y veo una sábana sobre mí, sé que sigo desnudo, lo único que hago es empujar levemente mi pierna derecha para salir de la cama, Scott entiende el mensaje y se levanta de la cama, dándome el espacio suficiente para levantarme.

Tomo mi ropa y me la pongo, salgo de la habitación aun cerrándome la camisa y el pantalón, bajo las escaleras sin voltear atrás y salgo por igual de su casa.

Voy a mi casa y cuando llegan los mensajes He depositado el pago de esta noche. El extra es por si necesitas ir al médico, es cuando me meto a bañar, si he llorado en la ducha es por lo mal que me siento, porque he permitido que esto sucediera, porque sé que si lo había manejado es porque el alcohol estaba en mí, pero justo hoy lo permití y siento la rabia crecer, me odio por haberlo aceptado, pero sé que hay algo más. 

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Y por fin llegamos al inicio de la historia!!! Lo recuerdan? Recuerdan que fue así como empezamos???

Sé que pudieron muy bien llevar el hilo de la historia!!! Les va gustando??? Siguen en polémica?

EL SONIDO DE TU VOZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora