Parte 106: Rápido y furioso

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El instituto de guerra es un lugar donde los campeones pueden establecerse internamente, en el caso de Veigar este se mudó temporalmente por causas personales.

Pero con él también tuvo que ir su prisionero Rammus, quien andaba tranquilamente por los pasillos.

"Según la nota de Veigar su habitación tiene que estar por aquí..."

"Hola Rammus"

"¿Mmm? Oh, vaya sorpresa"

Delante de él estaba Jax, el Maestro de Armas, un campeón que ocasionalmente luchó a su lado.

"¿Puliendo tus habilidades?"

"No exactamente... ¿sabes donde está la habitación de Veigar?"

"No, yo solo estoy aquí este fin de semana, tal vez alguien lo sepa en cafetería"

"Gracias, iré a preguntar"

El armadurillo se despidió con su mano y siguió andando tranquilamente hacia la cafetería. Allí había varios campeones, entre ellos el gólem de vapor Blitzcrank.

"HOLA RAMMUS, EL ARMADURILLO"

"Hola Blitzcrank, ¿todo bien?"

"SIGO DURMIENDO EN UN ARMARIO DE LA LIMPIEZA"

"Eso es bueno... oye, ¿sabes donde queda la habitación de Veigar?"

"ESTÁ EN EL PASILLO 3, PUERTA 65"

"Gracias, nos vemos más tarde si eso"

Nuestro héroe se dirigió hacia el pasillo, golpeándose accidentalmente con alguien.

"Oh, lo siento" - se disculpó en seguida - "¿Le he hecho..."

"Grgrr...."

"Daño..."

Cuando Rammus alzó la mirada, vio una especie de enorme centauro azul con armadura.

"¿Quien ha osado golpear a Hecarim?" - preguntó con voz amenazante

"Me llamo Rammus, siento haberle dado... fui un accidente"

"¿En serio fue un accidente?"

"Estoy casi completamente seguro"

"¡¿Casi?! ¡No voy a tolerar este insulto hacia mi!

"¿Insulto?" - parecía confundido con lo que estaba pasando - "¿Qué insulto?"

En un solo instante el espectro armado invocó una lanza delante suya, la cual agarró con firmeza mientras un aura azul le rodeaba.

"¿Para qué vas a usar eso?" - preguntó Rammus algo extrañado

"¡Para cortarte el cuello por tal insulto!"

"¿Insulto? Espera... ¿tengo cuello? Espera... ¿mi cuello?"

"¡Prepárate para morir ante mi!" - gritó levantando su lanza

"Espera, espera, espera...."

"¿Unas últimas palabras?"

"Emm... antes deberías mirar a la derecha" - dijo el armadurillo señalando hacia allí

"¿Cómo? ¿Derecha?" - Hecarim miró un momento hacia su lado derecho - "¿Por qué debería mirar hacia....."

Cuando el espectro regresó su mirada al frente Rammus ya estaba corriendo cual Bola de Poder.

"Nos vemos otro día... y lo siento"

"¡Vuelve aquí ahora mismo!"

El jinete de las sombras empezó a perseguirlo con su Carga Devastadora.

"¡Te arrancaré el alma y la destrozaré!"

"Gracias por el consejo"

Nuestro héroe logró girar hacia otro pasillo por la derecha, se paró un momento y esperó a que Hecarim pasara de largo por lo que quedaba de pasillo.

"Bueno, Blitzcrank dijo que era la habitación 66... no, 65"

"¡No puedes esconderte de mi!"

El armadurillo ando hasta la mitad del pasillo y entonces se paró.

"Mmm, noto como si el argumento me hiciera girarme justo ahora..."

"¡Te he encontrado!" - gritó con una voz distorsionada

Alrededor de Hecarim se veían lo que parecían ser varias almas amenazantes.

"Hola... a todos..." - saludó Rammus antes de convertirse en Bola de Poder

"Intenta huir y no descansaré hasta..."

"Adiós"

"¡No huyas cobarde!"

A pesar de tal insulto, siguió corriendo hasta que llegó al fondo del pasillo, se detuvo y entró en la habitación de la derecha.

"¡No huyas de...." - gritaba el centauro llegando al fondo - "¿Dónde se ha metido?"

"Arff... arf..."

Ahora mismo su presa se encontraba frente a Veigar, el oscuro hechicero.

"Has tardado mucho"

"Ya sabes... arf... lo tranquilo que soy..." - dijo sonriendo mientras se sentaba

Las Crónicas de VeigarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora