Las Crónicas de Veigar

Parte 278: En la sombra

Tras la batalla entre Zed y Veigar, el hechicero quedó inconsciente tras deshacerse del libro oscuro que quería su oponente.

Ahora el ninja recordaba su pasado de nuevo. Algunos años después de que se adueñara del templo empezó a investigar cómo aumentar sus técnicas, hasta que cierto día...

"Maestro, ha llegado un hombre de metal" - le dijo la aprendiz Ji Hun

"¿Un hombre de metal? Explícate mejor"

"Es un humano, no hay duda, pero lleva una armadura... que es una con su cuerpo..."

"¿De dónde dice que viene?"

"Dice algo de... Zaun..."

"¿Zaun? ¿Se sabe dónde está localizado?"

"Creemos que más allá de Bilgewater..."

Era raro que extranjeros viniesen de un territorio tan lejano a no ser que fuesen Noxianos.

"¿Y qué quiere?"

"Dice tener una propuesta que hacerle, que puede interesarle..."

"Que pase, pero asegúrate de cubrirlo" - le dijo con voz fría

Pasados unos minutos un hombre entró en la sala, portando una capa, máscara y metal en sus extremidades.

"¿Quién pregunta por mi?"

"Buenas tardes, mi nombre es Viktor, el heraldo de las maquinas" - se presentó el hombre

"¿Heraldo de las máquinas?"

"Un apodo impuesto por la prensa..."

La Orden de las Sombras se había alejado de ciudades principales, por lo que poco conocía de este sujeto.

"La prensa no llega aquí..."

"Me imagino que la ciencia tampoco..."

"Conocemos el significado que oculta ese termino sin embargo... pero ¿qué quieres?"

"Al igual que tu busco cambiar el orden, por el contrario no soy un ninja, soy científico"

"¿Y qué te ha traído a mi templo?"

"¿Te consideras un villano?"

"Villano..."

El ninja de gris no se consideraba un villano como tal, más bien un salvador que no dudaba en derramar sangre.

"Yo tengo una meta... cambiar el mundo... por ello he sido llamado villano y criminal"

"........"

"Por perseguir mis objetivos me he visto siendo perseguido por el llamado Jayce, defensor de Piltover..."

"Jayce... no lo conocemos... Piltover tampoco..."

"Tranquilo, hay mucho que contar..."

Viktor le contó algunos de sus intentos por cambiar Runaterra y las veces en las que fue frustrado, ya fuera por su nemesis o sus aliados.

"¿Y dices que Shen también intervino?"

"En alguna ocasión, por eso estoy reuniendo un equipo que les haga frente... si nos ven como el mal... busco unos Emisarios del Mal"

"Buscas un punto de inflexión... una oposición..." - dijo con voz fría

"Tal y como yo lo veo es reinventar Runaterra, inclinar la balanza a nuestro favor"

"Inclinarla, no... no equilibrarla, eh..."

Zed se mantuvo pensativo algunas semanas, en las cuales tuvo encuentros con Shen.

Desde su punto de vista él no necesitaba a nadie para conseguir su objetivo... pero ellos podrían acelerar el proceso...

"Acepto su invitación" - dijo mientras le ofrecía la mano

"Bienvenido al equipo, Zed"

Junto con los Emisarios del Mal vivió aventuras, ya fueran luchas contra la llamada Liga de las Leyendas o intentando causar el caos en ciudades.

Con el tiempo ellos se convirtieron en camaradas y poco después podría llamarles en silencio amigos. Esto es lo que nos lleva hasta el presente, donde el ninja se encuentra frente al cuerpo inconsciente de Veigar.

"........"

"Sigo sin ser fuerte..."

"........"

"Lo siento... Veigar...."

Zed se desvaneció entre las sombras, tras regresar a su región fue directamente a un cementerio cercano. Una vez allí caminó hacia una tumba.

"Resiste... lo noto en mi... y debe ser purgado..."

¡Zed! ¡¿Qué es lo que has hecho?!

"Ayúdame... muéstrame de nuevo el terror que vi en tus ojos..."

Déjame ayudarte... Zed...

"Y terminaré lo que empecé... lo que me hiciste... padre...."

El Ninja permaneció allí por algunos minutos más, recordando la lección que le enseñó su padre por las malas, luego se desvaneció en sombras.