Las Crónicas de Veigar

Parte 233: Se llamaba Rammus

Fiora y Rammus habían vuelto a hacer equipo tras un inesperado encuentro en el Instituto de Guerra, nuevamente contra Jax.

Pero la pelea había terminado con el equipo de estos dos como vencedor y ambos ahora se encontraban en una de las salas comunes que el Instituto tenía.

"Ha sido entretenido, muy entretenido"

"Bueno... si tu lo dices..." - le respondió Fiora

"¿Tu no te diviertes?"

"Yo lucho para mantener mi honor y el de mi familia" - dijo ella con orgullo - "Así como una buena forma de entrenamiento"

"Eso significa..."

"Lo veo más como una obligación o propósito más que una afición"

"Cada cual tiene sus motivos, yo prefiero verlo como algo divertido"

"¿Nada más? ¿No hay otro motivo?"

"Yo llegué al Instituto de forma accidental, no sabía a donde ir y cuando me tropecé con este sitio lo encontré muy divertido, así que ¿por qué irme?"

"Tus motivaciones son extrañas" - le dijo la muchacha

"Yo mismo soy extraño, por eso a los lectores le caigo bien"

"¿Lectores? ¿Qué lectores? ¿Escribes algo?" - preguntó confundida

"Cosas de la cuarta pared, algún día te lo contaré"

"Algún día... osea... en otra ocasión"

"Entrenas mucho aquí, seguro que nos vemos" - dijo mientras se levantaba

"........"

"Dime, ¿realmente no te divierte batirte en duelo con Jax?"

"No... no creo... no sabría decirte..."

"Cada cual lo ve de una manera..." - dijo mientras alzaba la mano - "Yo me voy yendo ya, seguro que nos vemos en otra ocasión"

El armadurillo terminó de despedirse y se dirigió hacia la salida en forma de Bola de Poder.

"Cuarta pared... ¿que será eso?"

"Fiora" - le llamó una voz desde detrás suya

"No... otra vez..."

La voz pertenecía a Luxanna Crownguard, otra campeona. Fiora no soportaba a Lux, además ella era una Crownguard y estos tampoco le caían bien.

"Lux, te tengo dicho que no me hables, no quiero mantener contacto con una Crownguard"

"¿Eso no es un poco clasista?"

"Me da igual, tengo mis motivos para querer el distanciamiento"

"No te pongas así Fiora, solamente es un apellido" - le dijo sonriente mientras se sentaba a su lado

"Un apellido habla en nombre de numerosas personas, es una poderosa arma..."

"Podría ser"

A Lux no le importaba mucho lo que pensara Fiora de ella en lo más mínimo, simplemente pasaba tiempo con ella porque le agradaba.

"Veo que has estado hablando con Rammus"

"¿Le conoces?"

"Es bastante popular por aquí, y parece que hacéis buen equipo"

La maga de la luz estuvo en la partida anterior, aunque la espadachina no se percató de su presencia.

"Si, ¿pasa algo?" - le preguntó de forma distante

"Nada, es solo que es alguien algo extraño... peculiar"

"¿Extraño? ¿Rammus? ¿Por qué lo dices?"

"Bueno, siempre habla de forma muy calmada y tranquila, es un armadillo... y está lo de vivir en unas mazmorras..."

"¿Mazmorra?"

"¿No te lo ha comentado?"

"Espera ¿no vive en el instituto?"

"No, el vive en las mazmorras de Veigar, por lo visto le tiene preso o algo así" - le dijo tranquilamente

"¿Preso? ¿Y cómo es eso de que está preso? Ese estúpido yordle..."

"Bueno, en verdad él y Veigar son amigos, y para ser preso tiene bastante libertad, creo que realmente no le importa" - le explicó la maga

"........"

"Por eso digo que es algo extraño"

"Sí, parece extraño, pero... es parte de su encanto" - dijo la muchacha algo fría

Segundos después se dio cuenta de lo que había dicho y abrió un poco los ojos, mirando a la sonriente hechicera.

"¿Has dicho encanto?"

"No he dicho nada, Crownguard" - dijo levantándose y marchándose

"Nos vemos en otra ocasión"

"Espero no verte en la vida"

"Qué chica..."

Fiora siguió avanzando hasta que llegó a las escaleras de la entrada, una vez allí se paró y respiró profundamente, le dolía la cabeza.

Ella disfrutaba el tiempo que pasaba con él, era extraño, pero su forma de pensar no era la misma que la suya y aún así... le gustaba...