Parte 249: ¿Qué ha ocurrido?

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Todos los campeones estaban conmocionados y confundidos por lo que acababa de pasar, la Cicatriz de Cristal había explotado con los cuatro campeones dentro.

"¿Qué ha sido eso?" - preguntó Singed con los ojos abiertos

"El nexo se ha sobrecargado y explotado"

"El nexo no, Viktor, la Cicatriz entera" - puntuó Swain

En el lado contrario los héroes también se encontraban consternados y muy desconcertados por lo ocurrido.

"Leona ha..." - intentó decir Maestro Yi

"Gangplank también..."

"Viktor... tú... ¿tienes algo que ver?"

"Típico... algo sale mal y la principal amenaza soy yo"

"Os recuerdo que sois villanos al fin de al cabo" - puntuó el príncipe de Demacia

"Seremos villanos, pero no nos cargamos a nuestros aliados..."

"Tus palabras son manchadas por tus acciones pasadas..." - le acusó Azir

"En mis palabras no hay hipocresía alguna..." - le debatió el ascendido

Ambos bandos se encontraban en conflicto, al menos hasta que el presentador entró en escena y le prestaron atención.

"Noticias de ultima hora, parece ser que hay problemas informáticos, no podemos visualizar la cicatriz de cristal"

"¿Problemas informáticos?" - se extrañó Jayce

"Quizás se refieran a..."

En ese momento Viktor tuvo una visión de él y su equipo, casi todos estaban descompuestos, como si fueran muertos vivientes, acercándose hacia un individuo.

Del impacto el científico soltó su cetro y cayó de rodillas al suelo agarrándose la cabeza con dolor.

"¡Ahhhhhh!"

"Viktor ¿Qué pasa?" - le preguntó Zed

"Ordenador... tenemos que ir a la sala..."

"Singed y yo le acompañaremos" - dijo Veigar mientras le ayudaba a caminar hasta el pasillo

"¿Es seguro que se larguen así sin más?" - dudó el explorador

En ese momento las puertas que separaban el pasillo de la sala se cerraron de golpe.

Las baldosas de la sala empezaron a brillar con colores verdes, haciendo que los campeones fueran desapareciendo.

"¿Qué está pasando ahí adentro?"

"Singed... deprisa....." - solicitó Viktor

"Tenemos que arreglar esto..."

Mientras tanto el resto de campeones se encontraban dispersos. Ashe, Lucian, Jarvan IV y Swain fueron a parar al Abismo de los lamentos

"¿Cómo hemos llegado a Freljord?" - preguntó Ashe confundida

"Swain, cómo hayas..."

"¡Grgraaahhhh!"

"Jarvan, ¿qué era ese ruido?"

"Esa no es la mayor pregunta" - comentó Jericho - "La pregunta es ¿qué es esa cosa?"

Un enorme golem de piedra avanzaba hacia los campeones con intensiones claramente hostiles.

Por otro lado Teemo, Maestro Yi, Jayce, Thresh y Lissandra se encontraban en la Cámara Magmatica, en un pequeño cubículo y rodeados por lava.

"La lava se esta acercando" - dijo Teemo con miedo

"No hay extremos cercanos y las paredes están alejadas"

"Podría intentar usar mi Hielo Negro..."

"Incluso el hielo negro de Freljord tendría dificultades para no derretirse" - advirtió Jayce

"Aún así inténtalo, ¿qué sabrá un mortal de ese hielo?"

"No sabía que tuvieses tanto miedo al calor"

"Tenemos que regresar con Veigar lo antes posible, hay algo siguiéndoles"

"¿Tienes información que quieras compartir? Carcelero..."

Por último Xerath, Azir, Zed y Shen se encontraban atrapados en las arenas movedizas de Shurima.

"Qué ironía que vayas a morir por tus propias arenas" - rió el ser de energía

"Esta también será tu tumba"

"No... la mía no..."

"Vamos a ser tragados por arenas" - observó Shen - "A menos que..."

"¿En qué estás pensando?"

En el instituto Veigar, Singed y Viktor habían conseguido llegar a la sala del ordenador, el cual tenía una pantalla verde y soltaba chispas.

"El juego..." - dijo el científico con pocas fuerzas - "El juego..."

"¿El juego? ¿Es eso lo que ha pasado?"

"Espera, ¿de qué juego está..."

Veigar lanzó su Estallido Primordial contra la máquina, destruyendo también el cartucho.

"¿Era eso necesario?"

"Créeme que sí lo era"

"Bien, entonces ahora tenemos que salvar..."

Pero el químico fue fue interrumpido cuando un rayo de energía impactó contra su pecho.

"¡Singed! ¿Qué demonios..."

"Estúpidos... habéis hecho lo que quería..." - dijo el científico mientras reía

"Viktor.. tu voz..."

"¡Yo no soy Viktor! ¡Yo soy el Jefe Final!" 

Las Crónicas de VeigarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora