Destino

61 9 3
                                    

Y nos vimos, de entre tanta gente, tu y yo simplemente en este mundo nos encontramos, sin pensar en el destino, sin tan siquiera buscarnos.

Así entre a tu vida y también tú en la mía, almas de polos opuestos, vidas ajenas al tiempo de lo que cada uno ha sido, tan solo un laberinto entre la dicha y la suerte.

Y es que al tocarte, sentirte a mi lado, se siente que he llegado al fin de mi camino, y con sigilo, te adentro en mi mente, pues mi corazón fue tuyo mucho antes de yo verte.

La luz que me ilumina de tu tan sutil mirada, siento que acaricias con ternura a mi alma, cálida sonrisa que se lleva mi tristeza, tú me atas con cadenas bajo esta luz de luna.

Y desearía... desearía que fuera eterno, que junto a mi reinaras en mi mundo de ensueño, que tú a mi has venido para ya nunca marcharte, y que siempre has de quedarte justo aquí, al lado mío.

Una cruel broma pesada que nos ha hecho el destino, te puso en mi camino para yo así encontrarte, nunca me dijo antes que conmigo, tú no habrías de quedarte...





LaberintosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora