Ya era el día de la gala, los chicos habían estado casi toda la noche juagando a la play así que no tuve mucho tiempo para ver a Pablo. Después de los ensayos fuimos a caracterizarnos y antes de empezar estuvimos un rato juntos, disfrutando de nosotros como hacíamos cada vez que nos veíamos. Apuramos el tiempo hasta que nos llamaron desesperados para que empezaran a maquillarnos. Esta semana yo iba del cantante de Tequila. Era un horror, no podía ir más fea, era una mezcla de mucha gente y cada vez que me retocaban estaba peor. Pero me miraba al espejo y no podía parar de reírme.
La gala transcurrió muy divertida como siempre, todo el mundo me decía que estaba feísima y la verdad es que lo estaba. Y eso hacía que fuera el blanco fácil de los chistes. Hicimos un descanso en la gala y estaba hablando con Edu y Silvia.
Edu:
- Madre mía Anita con lo buenorra que tu estas y hoy no te conozco jaja.
Silvia:
- Pero como te han escondido las peras cari?
Ana:
- Tía con un forro, casi no puedo respirar jaja.
Edu:
- No me extraña con todo lo que tienes que esconder jajaja.
Ana:
- Ehh! Pero bueno! Jajaja. Chicos voy al baño que no me aguanto.
Fui al baño corriendo, cuando salí fui a lavarme las manos y en ese momento entro Pablo.
Ana:
- Hombree! Mira quien tenemos aquí.
Me acerque a él, lo cogí de la cintura y empecé a besarle.
Ana:
- Ummm... aun nos quedan unos veinte minutos de descanso... yo creo que...
Continúe el beso que habíamos dejado a medias mientras fuimos avanzando hasta dentro del baño. Seguimos con el asunto, yo ya estaba cachonda perdida pero...
Ana:
- Pablo que pasa?
Pablo:
- Joder Ana que así vestida no sé... es muy extraño... no se levanta.
Ana:
- Ósea me quieres decir que si en un futuro me pongo fea... ya no me querrás, ya no te pondré cachondo ya no...
Pablo:
- Ana te estás adelantando, no es porque estés fea es porque vas vestida de hombre.
Ana:
- Si pero sigo siendo yo...
Pablo:
- Vista desde fuera no eres tú te lo aseguro.
Ana:
- Joder Pablo ahora me quedo con el calentón.
Pablo:
- Joder es que parece que me lo esté montando con un hombre y se me baja el calentón. Pero te prometo princesa que esta noche te lo compenso.
Empezó a besarme para consolarme...
Ana:
- Pues esta noche alomejor no quiero yo.