PUNTO DE VISTA DE ANNA SIMON:
Subí decidida en el ascensor, la verdad es que estaba un poco nerviosa, nunca había tenido que afrontarme a algo así, no con ella. Pero bueno era lo que tocaba, era necesario para que esto no llegara a más. Cuando el ascensor llego a su destino continúe mí hasta mi objetivo. Llegue y fui a llamar a la puerta. Pero en ese momento me entro un flojera que me impidió hacerlo, me puse muy y nerviosa y en ese momento me acorde de una cosa que me dijo, así que ande un par de pasos a la izquierda y llame a la puerta de al lado. Enseguida abrieron.
Silvia:
- Anna! Que haces aquí?
Anna:
- Hola Silvia. Pues es un poco largo. Siéntate.
Silvia:
- Vale rubia.
Anna:
- No te ha contado nada Ana?
Silvia:
- Algo me ha contado pero por encima. Porque si no lo sabes también se peleo con Pablo.
Anna:
- Que dices?
Pablo:
- Si, se ve que Pablo intento convencer a Ana varias veces de que hablara contigo y al final terminaron discutiendo.
Anna:
- Joder ahora me siento peor.
Silvia:
- No te preocupes nena conociendo a estos dos enseguida lo arreglan.
Justo cuando Silvia dijo esto empezamos a oír unos gritos en la habitación de al lado. Bueno mejor dicho gemidos.
Silvia:
- Ves ya te lo decía yo.
Anna:
- Joder no se cortan ni un pelo jaja.
Silvia:
- A mí me lo vas a decir, este es mi concierto cada noche desde que empezó la edición jajaja. Yo siempre les aplaudo cuando acaban.
Anna:
- Jajajajaja. Aa pues ahora cuando acaben te acompaño en el aplauso.
Seguimos hablando y le explique bien la pelea y el plan que tenia y por el que había venido. Estaba de acuerdo en todo. En ese momento acabaron.
Anna y Silvia empezaron a aplaudir.
Anna:
- BRAVOOO!
Silvia:
- Otraaa, otra.... Jajajaja.
Espere un rato para ir a hablar con ella, no quería interrumpir.
PUNTO DE VISTA DE ANA MORGADE:
Ana:
- Ohhh... que bien Pablo como necesitaba esto.
Pablo:
- Ni que lo digas...
Ana:
- Voy a ir preparando las cosas para el ensayo que sino luego me da pereza.
Pablo:
- Hostia! Yo también que se me olvidaba.
Ana:
- Menuda cabeza jajaja.
Pablo:
- Menos mal que tengo aquí a mi princesa para hacerme los días más fáciles jaja.
Me cogió en volandas y yo empecé a besarle y así estuvimos un rato, disfrutando el uno del otro. Una cosa que nos encantaba, siempre teníamos un ratito especial al día. Se marchó a preparar sus cosas y yo empecé con las mías. No había pasado ni un minuto desde que salió por la puerta y ya estaba llamando. Fui a abrir.
Ana:
- Que se te ha olvid....
Anna:
- Hola...
Nos quedamos unos segundos mirándonos, con la cabeza agachada, a ambas nos daba vergüenza haber llegado a esta situación. Pero que la loca de mi amiga hubiera venido hasta Barcelona, a mi hotel a solucionar las cosas, me dejo aun más claro si cabe que le importaba mucho. Así que di yo el primer paso.
Después de unos segundos eternos extendí mis brazos y ella corrió a abrazarme. Nos fundimos en un fuerte abrazo, lo echábamos de menos, aunque ante las cámaras no los mostrábamos entre nosotras éramos muy cariñosas siempre estábamos abrazándonos y besuqueándonos y ya llevábamos unos días enfadadas.
Nos quedamos así unos minutos, en silencio, hasta que...
Anna:
- Ana lo siento mucho. Lo siento de verdad.
Anna se había puesto a llorar en cuanto entro en contacto conmigo.
Ana:
- No pasa nada rubia. No llores ya está todo bien ¿vale?
Anna:
- No Ana joder he sido una imbécil y te lo he hecho pasar mal.
Ana:
- Te estoy diciendo que no pasa nada. Me entiendes? Nada.
Nos sentamos en la cama y estuvimos hablando un par de horas y entonces me explico lo que le pasaba. Me dijo que desde que estaba con Pablo se sentía desplaza, que me echaba de menos.
Anna:
- Que no te estoy diciendo que lo estés haciendo mal Anita, solo que estaba acostumbrada a tenerte solo para mí y ahora me tengo que acostumbrar a esto. Supongo que es porque eres la única familia que tengo en Madrid.
Ana:
- Pero cielo yo nunca te voy a apartar de mi lado. Lo entiendes no? Eres una pieza fundamental en mi vida nena. Nunca te desplazaría. Pero tienes razón de que alomejor te he desatendido un poco nena. Lo siento. Siento mucho haberte hecho sentir así.
Anna:
- No tienes que pedir perdón Puchi, es por la novedad, es normal que no os queráis separar, y vengo yo aquí como una loca a echártelo en cara. Soy imbécil.
Ana:
- Que no nena de verdad. Que estas cosas tienes que decírmelas que yo soy imbécil y no me entero jajaja. Pero que te quede claro una cosa. Nunca te voy a desplazar de mi lado, nunca te vas a marchar de mi vida porque sabes que para mí la amistad es muy importante y que tengo muy poquitas amigas y TÚ eres una de ellas y eres la más importante de todas para mí. Tú y la loca con la que has estado aplaudiendo en la habitación de al lado. Sois lo más importante para mí en este tema y nunca me separare de vosotras. Te ha tocado la desgracia de tener que aguatarme toda la vida jajajaja. Porque esto ya es para toda la vida.
Anna:
- Jajajajajajaja. Que tonta eres.
Nos dimos un gran abrazo, después de haber arreglado todo fue un abrazo dulce y lleno de amor, vivo enamorada de mis amigas, tengo suerte de tener las mejores.
Después del abrazo juntamos las frentes y nos quedamos mirándonos a los ojos. Y nos dijimos...
Anna:
- Para toda la vida.
Ana:
- Enterita.
