Intenté tranquilizarme un poco, pero no podía. Empecé a hiperventilar y comprendí que debía calmarme, no quería que se repitiera lo que paso hace un tiempo. Entre todo lo que había pasado y la falta de apoyo de Silvia me había venido abajo. Solo quedaba una solución. Cogí mi móvil.
Ana:
- Annaa...
Conseguí decir entre llantos y la respiración entrecortada.
Anna:
- Nena que pasa?
Ana:
- Anna joder...
Anna:
- Cielo tranquilízate por favor.
Ana:
- No puedo Anna, no puedo.
Anna:
- Cariño si puedes escúchame, no pasa nada ya estoy aquí contigo, al otro lado ya esta.
Ana:
- Uff... Vale.
Conseguí calmarme un poco mientras Anna hablaba conmigo, simplemente me tranquilizaba, sabia como hacerlo, sabía que decirme para conseguir que todo se calmara. Mi hiperventilación paró, pero las lágrimas no paraban de caer por mis mejillas.
Anna:
- Bueno ahora que estas más tranquila me puedes explicar que ha pasado?
Ana:
- Anna es Hugo...
Anna:
- Joder Hugo otra vez...
Ana:
- No por favor tú también no.
Anna:
- No, no cariño sabes que me puedes contar lo que sea. No te juzgo amor. Sabes que pase lo que pase voy a estar a tu lado.
Ana:
- Lo sé nena.
Anna:
- Por cierto, a quien te referías cuando me has dicho tú también?
Ana:
- A Silvia.
Le cuento todo lo que ha pasado, sin dejarme ningún detalle, la verdad es que Anna esta flipando. Antes de conocer a Pablo, Hugo ya había hecho alguna parecida y por supuesto Anna estaba al corriente de todas ellas, pero esta era muy fuerte por la situación en la que se había producido. Que hubiera tenido los cojones de venir hasta aquí y jugársela a que Pablo lo descubriera y le partiera la cara era muy fuerte. Y decirme todo eso sin que le temblara la voz, venía muy decidido a abrirme su corazón.
Anna:
- Bueno Puchi y que vas a hacer?
Ana:
- No lo sé, por eso te llamo, Anna que hago?
Anna:
- Cariño yo no te puedo decir que hacer. Eso es cosa tuya, bueno más que tuya de tu corazón. ¿Qué te dice él? Ahí está la clave. Piensa Ana, en todo este tiempo qué o quién te ha hecho feliz. Recuerda los últimos años y recuerda cuando has sido más feliz. Porque en cuanto recuerdes tú corazón sabrá la respuesta. Sabrás lo que quieres. Porque esa es la cuestión Ana ¿Qué quieres? ¿Qué quieres TÚ?
