SOY ALEX

14. ALEXANDER

ALEXANDER

-¿Que?-. Está muy sorprendida. -P-pero-.

-Eh, dijimos que si decías "Pero" te besaría, y ya te he perdonado muchas-.

-Alex, es un coche-. Se acerca al coche con la boca abierta.

Cuando íbamos en coche se quedó totalmente embobada mirando un Fiat 500, incluso lo persiguió con la mirada.

-Lo sé-. Saco un sobre. En la tienda donde vendió el vestido dijo que necesitaba quinientos, solo consiguió doscientos, y se los ha dado a la señora D por que se siente culpable... Se merece disfrutar un poco mas.

-¿Y esto?-.

-El dinero para Pat-. No me ha dicho por que se lo tenía que dar a Pat, pero lo necesita y parece que mucho, así que...

-¿Qui-quinientos?-.

-Un poco más. Para la señora D, o no sé eso ya es cosa tuya-.

-No puedo aceptar todo esto Alex-.

-Si que puedes-. Sé que no es "mi amiga" por el dinero (lo pongo entre comillas por las veces que me ha dicho que no soy su amigo). Igual que se que Jenny, la chica de aquella familia tan importante si que le echó el ojo a mi cartera.

Alex sabe todo el dinero que tengo, sabe que puedo permitirme muchas cosas, y aún así prefiere vender su ropa para pagarle unas medicinas a su vecina.

-Alex... es demasiado-. Me devuelve el sobre y se aleja del coche.

-Escucha. Sin compromisos-. Frunce el ceño. No lo entiendo. -Solo quiero que disfrutes-.

-Alex... pero un coche... y encima el dinero, no puedo aceptarlo-.

-Sería una grosería-. Me hago el ofendido. -Lo hago por que quiero-. Le doy el sobre de nuevo.

-Y si lo acepto...-.

-Nada de compromisos-.

-Es que encima un Fiat 500, azul...-. Lo mira con la boca echa agua. He acertado.

-Si no lo aceptas tu, se lo daré al primero que pase-.

-Espera, quiero dejar las cosas claras-.

-Venga-. Le miro con interés. Veamos las "cosas claras" des de el punto de vista de Alexandra Derricks. Aunque le quedaría mejor el nombre de Alexandra Marin.

-No por esto voy a besarte-. Asiento fastidiado a lo que ella sonríe y yo también. -No por esto voy a ser tu novia-.

-Viniendo de ti es obvio-. Sonríe mas emocionada. Pero eso ya lo sabía, y no lo hago para comprarla ni nada así. Quiero que disfrute.

-Esto no te da ningún privilegio. Y-. Para mirando el coche. -Solo lo cojo prestado. El coche sigue siendo tuyo-.

-Si eso te hace feliz...-. El coche está a su nombre... -Trato echo-.

-¡Gracias!-. Me abraza con fuerza.

-Mereces esto y mas-.

-Muchísimas gracias. Retiro lo de la otra noche, eres un idiota con corazón-.

-Bueno al menos he recuperado mi corazón en tu frase-. Rio. -Toma-. Le doy las llaves del coche.

-Es increíble-. Mira el coche. -Me encantaría ir a dar una vuelta... Pero no me puedo ir-. Mira la casa de la señora D.

-Lo sé-. Le miro, está muy contenta. -Pero al menos me harás la cena ¿No?-.

-Sí, te lo mereces-.