ALEXANDER
Puso su mano en mis ojos para que no puediera ver. Llevamos unas horas en Nunca Jamás. Tan solo tenemos una cama, la tele, y la ducha.
-Alex ¿Qué haces?-. Pregunto un poco desconcertado.
-Mi enano no puede ver escenas de sexo-. Estiro mi mano y tapo sus ojos.
-Tu tampoco-. Río.
-Pero tú eres más pequeño que yo-.
-Un día-.
-Pero más pequeño-. Me pongo rápido encima de ella.
-Este pequeño te provoca unos orgasmos muy grandes-.
-Por qué tu pequeño es muy grande-. Empieza reír nerviosa. -Perdón-. Sigue riendo avergonzada.
-¿A caso no lo es? Nena-.
-No seas idiota, enano-. Me acerco a sus labios lentamente, no quiero cortar esa sonrisa que tanto me gusta. -Hagamos una apuesta barra trato-.
Me empuja un poco hacia atrás, quiere verme.
-Claro, siempre es un placer ganarte-.
-Veremos una película-. Sonríe. -Si consigues no sentir nada y no besarme en todo lo que dure la peli. Y. Una hora después, ganas tú-.
-¿Y qué gano?-.
-Que deje de llamarte enano-.
-Y si no-.
-Dejas de llamarme nena-.
-Elige película, nena-.
-¿Yo?-.
-Si-.
-Cincuenta Sombras de Grey-.
-¿Qué?-.
-Pon la peli-. Dice con una gran sonrisa.
-¿Pero cómo pretendes que vea cincuenta sombras de Grey y no tenga ganas de...? Bf-. Muevo mi cabeza para centrarme.
-Alex. Si la peli es un poco mala-. Se argumenta.
-Pero tú y yo sabemos que hay muchas escenas calientes... me pones los osos amorosos y tengo ganas de hacértelo fijo-.
-Eso es un poco raro-. Ríe.
-Puede pero no veré cincuenta sombras-.
-¿Qué pasa? No quieres ver esa peli conmigo-. Se acerca a mí coqueta. Adoro a Alex y a esto que hace: cuando tiene que ser dulce, es dulce, cuando tiene que ser una princesa, es una princesa, y cuando tiene que subir la temperatura, la sube pero bien. Y eso me gusta mucho.
-Alex...-.
-Enano-. Se pone encima de mi.
-Alex no me tientes-.
-Enano-.
-Tu inocencia correrá mucho peligro, nena-.
-E. Na. No-. La miro. Está disfrutando con esto. Sabe que no aguantaré con esa película.
-Tu lo has querido-.
Busco la película en el programa y la pongo.
La peli iba pasando... Iba pasando muy lentamente.
-Alex...-. Susurra.
-No. Ahora no me hables Alex-. Estaban en el ascensor.
-¿Por qué?-. Noto como esconde una risa.
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SOY ALEX
Teen FictionElla es Alex. Él es Alex. Ella tiene ocho ciudades a su espalda. Él siete. Pero no sólo tienen el nombre en común, si no, una ciudad del pasado donde los dos siguen buscando algo que les haga sentir lo mismo. Venganzas, asesinatos, familias comp...