SOY ALEX

47. ALEXANDRA

-Quítale las manos de encima-. Murmura Alex cuando se da cuenta de que Josh tiene una mano encima de mi pierna. ¿Por que no me he ido?

Amenazas, amenazas y mas amenazas.

-Síentate-. Dice Josh sin quitar la mano.

Por qué a pesar de que hayamos roto, que Josh me amenace con matar a Alex, me sigue pareciendo algo terrible, algo en lo que prefiero sufrir yo, a que sufra él.

-Alexandra. Vámonos-. Alex se pone a mi lado.

Intento levantarme, pero Josh hinca sus dedos en mi pierna.

-Ahh-. Murmuro.

-¡No la toques!-. Alex se enfrenta a él.

Estamos solos en el gran salón.

Josh se levanta y también le planta cara.

-Aléjate de ella-. Dice Alex con desprecio.

Charlie se les acerca —parezco junto a esos dos ancianos, una mera espectadora—

-Vamos ha hacer negocios-. Acaba diciendo Charlie. Después, me mira a mí.

-No. No le metas a ella en tus jodidas mierdas-. Replica Alex.

-Muevete-. El tipo que me recogió en la biblioteca se pone a mi lado.

No sé que decir, esto es muy surrealista.

Niego levemente. Pero me ignora. Coge mi brazo y me obliga a ir con él.

Me lleva a una sala privada, con una mesa y asientos de terciopelo, lámparas de cristal y una tenue iluminación que le da a todo un tono más intimo.

A los pocos segundos aparece Alex, Charlie y Josh.

-Alexandra vámonos-. Alex coge mi mano.

-Sentaos-. Ordena su padre. Obedezco.

-¿Pero que haces?-. Dice Alex. Vuelvo a levantarme.

-Le he hecho una oferta a Charlie, Alexander-. Dice Josh. Su voz me pone tensa. Noto un increíble malestar e incomodidad en mi...

-Me importa una mierda lo que salga de tu boca, capullo-. Alex está muy enfadado, yo estoy muy asustada.

-Si le entregamos a Alexandra desaparecerá-. Acaba Charlie. -Dejará de amenazar a nuestra familia, hijo-. Alex me mira detenidamente.

-Desapareceré para siempre-. Añade Josh. -Te dejaré tranquilo, a ti y a tu familia-. Hace una pequeña pausa. -Pero le quiero a ella y si no... os mataré-.

Alex no habla. Solo me mira ¿Está pensando en aceptar?

-Bien-. Dice Charlie. -¿Hijo?-. Charlie pone su mano sobre el hombro de Alex. -Piénsalo bien. Solo es una chica más-. Dice con desprecio. Él cierra los ojos y suspira. Los abre y me abraza.

-Te quiero-. Murmura. -Siento que no haya funcionado-.

¿Que? ¿Me va a entregar?

-Dámela-. Josh se pone a mi lado.

-Lo siento Charlie-. Suspira. -Pero no pienso dejar que ella muera-.

-¿Estás loco?-. Se acerca a él y le habla nervioso. Creo que intenta que nadie más se entere. Pero creo que todos los escuchamos. -He hecho un trato, no seas incrédulo-.

-No-. Alex le aparta la mano a Charlie enfadado. -El incrédulo eres tú si realmente creías que iba a dejar morir a alguien como ella-.

-Oh vamos... la cuidaría-. Dice con todo divertido Josh.