4. ALEXANDER

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-Me obligó a irme-. Solloza. -¡Lo tuve que hacer para protegerte! ¡Pasé cosas horribles para que no murieras! ¡Solo me fui para que no murieras! ¡Ignorante, cabronazo de mierda!-.

-¿Que quieres decir con eso?-. Ahora mismo desearía no haber bebido nada. Me siento estúpido por haberlo hecho. Tengo la confesión de Alexandra Derricks. Me está diciendo lo que he esperado durante años, una respuesta por parte de la única chica que me ha importado de verdad. 

-¡Te lo estoy diciendo!-.

-Pero Ian... el dinero que me quitaste...-.

-Me obligó a quitarte el dinero. Me obligó ha hacer cosas que...-.

-No tenías que...-.

-¿Que no tenia que hacerlo? te apuntó con una jodida pistola mientras dormías-.

-¡Pero estabas embarazada!-.

-¿¡Creías que te iba a dejar morir!? ¡Prefería y sigo prefiriendo cualquier cosa antes de que mueras!-. No sé cómo tomarme todo esto. Se marchó porque Ian me estaba amenazando con una pistola. Se cambió por mi. -¿Crees que no te quería?-. Se sorbe la nariz. -Crees que es fácil volver y ver cómo quieres a la persona que...-.

-¿Que pasa?-. Mark se pone a su lado. Su amante. Ese que la tiene enamorada ahora.

-Lárgate tengo que hablar con ella-.

-Sube al coche, acabemos con esto cuanto antes-.

-¿Y luego no volviste por él?-. Miro a Alex.

-¿De que está hablando?-.

-Lo sabe-.

-Escúchame bien-. Mark se me acerca, no sé si es por el alcohol o porque sé que se está tirando a Alex y eso me cabrea más de lo necesario. -Como digas una sola palabra, como digas algo... te jodo la vida-.

-Mark por favor...-.

-No pienso dejar que este imbécil te vuelva ha hacer polvo de esa manera-.

-¿Yo le hago polvo?-. Me acerco a él. No me da ningún miedo. Está protegiendo a Alex y se está comportando como un perro rabioso porque sabe perfectamente que ella me quiere, pero no es de mi de quién le tiene que proteger. -Tú dejas que ese capullo le pegue esas palizas descomunales-. Su puño va directo a mi cara.

** ** ** **

-Alexander Marin-. Escucho como Nick entra a la habitación. -¿Todavía estás así?-.

-Hazme un favor y mete tu cabeza en el bater-.

-¿Y eso para que?-.

-Para que te calles-.

-¿Estás de coña? Martha viene hoy de su viaje de negocios, me dijiste que te tenia que llevar porque... ¿¡Pero que cojones te ha pasado!?-. Abro los ojos. Está mirándome con los ojos como platos.

-Que no grites. Joder-. Le doy con el cojín en la cara y me pongo cara abajo, pero noto un dolor intenso en el lado derecho de mi cara. -Mierda fue real-.

-¿El que fue real? Mierda tío ¿Donde estuviste anoche?-.

-Fui a un bar... la llamé por teléfono, vino a buscarme, ella y su novio-.

-¿Su prometido?-.

-No no. Su novio-.

-Mírame-. Coge mi cara bruscamente. -¿Te has metido algo?-.

-Para Nick-.

-Contéstame-.

-No. Mierda-. Me separo de él. -Ella no se marchó ¿Sabes?-.

SOY ALEXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora