Utopía Envenenada

Capítulo 28

Amira se muerde el labio, e intenta hacer oidos sordos a lo que acaba de oir por parte de su estúpido crush.
Al finalizar la clase Hugo se acerca a mí.
-¿Sois mellizas? -dice señalando con la cabeza a Tatiana.
-Que va, no tengo ningún lazo de sangre con ella. -le explico. -Mucha gente ya nos lo ha dicho, que nos parecemos mucho.

Después de una larga mañana todo nuestro grupo queda para comer en el comedor de la Universidad, ya que hoy salimos mas o menos a la misma hora.
Me despido de Alana y me dirijo al comedor los únicos que están sentados en la mesa son Saúl y Douglas, al ver que ellos ya me han visto decido hacer como que voy al baño que está dentro del comedor, para no tenerme que sentar forzosamente con esos dos personajes de animal planet. Decido esperarme unos cinco minutos, y al no aguantar más el estar sin hacer nada, decido salir y probar suerte. Afortunadamente veo a Clara en la mesa marginada mientras que los otros dos se rien compinchadamente.
-¿Y Lissa? -oigo que le pregunta Saúl a Douglas mientras que me voy acercando a la mesa.
-Todavía no ha salido de su clase. -responde Douglas.
-No te preguntaba eso, me referia a qué tal te va con ella. -dice riéndose.
-Bien.-se encoge de hombros. -A veces es muy rarita -dice pensando- como todas las mujeres -recalca -pero muy bien, convenio con ella -dice en doble sentido y sacando una mirada pícara y compenetrada hacia Douglas.
Me siento al lado de Clara.
-Hola-saludo sonriendo.
-Hola-me responde de la misma manera. Me doy cuenta de que estaba pintando unos dibujos.
-¿Puedo ver? -digo señalando con la mirada sus bocetos. Ella asiente.
-Pintar me quita el estrés y me relaja. -me explica el significado de sus bocetos. Había pintado un pajarillo que parecía 3D por la realidad que mostraban sus dibujos.
-¡Qué bien pintas!-exclamo asombrada por lo que me gano alguna que otra mirada. -Tus pinturas parecen fotografías. -la digo impresionada.
-Clara, ¿nos los dejas ver? -pregunta Saúl metiéndose en la comunicación. Douglas y Saúl ponen una sonrisa compinchada por lo que no me fiaría. En cambio la ingenua de Clara se los da.
-Yo antes iba a una escuela de pintura, y me enseñaron a que había que cuidar las obras como oro en paño.-Devuelve el dibujo a Clara, cuando llega a sus manos se sorprende, manchas esparcidas por el boceto estropean el dibujo. Clara de la rabia tira un vaso de agua en su dirección, por lo que le cala los pantalones a Douglas y por ende a Saúl.
-¿Tu estás tonta o qué? -dice enfadado Douglas.
-Uy te has meado en los pantalones. -dice Esmeralda picándole mientras que se sienta en la silla.
Tatiana y Lissa llegan, Douglas con el ego roto en un acto ágil coge los dibujos de Clara que están encima de la mesa y los utiliza para limpiar el agua.
-Ala, eso para que la próxima vez tengamos más respeto.-le responde Douglas a Clara.
Clara de impotencia se levanta de la silla y se dirige hacia Douglas, él como gallo que es se levanta y empieza a andar para que Clara no le pille, haciendo que parezca que están jugando a un pilla-pilla.
-¿Por qué corres?-se burla Douglas provocando a Clara.
-No, porqué huyes tú.-dice Tatiana estando del lado de Clara.
Amira entra por la puerta despistada y se choca con Douglas dándose un cabezazo. Los dos se quejan y Clara le pilla y le da una patada en el primer sitio que encuentra para desahogarse,haciéndole que se diente en el suelo, Douglas lo único que protegía era su parte sensible.
Mientras que le sigue dando patadas a Douglas que se ve que no le duelen mucho, en un acto reflejo coge la pierna de Clara y la hace tirarse al suelo de culetazo, ella le pellizca como puede para liberar esa rabia que tiene acumulada.
Finalmente Lissa separa a Clara de Douglas, viendo que a su novio le divertía la situación a pesar de que le estaban dando pellizcos.
-¡Eres un imbécil! ¡Todo mi trabajo durante este año te lo has cargado! -dice llorando llena de furia mientras que Amira la abraza.
Clara parece una chica muy tímida y trabajadora, pero ahora mismo estaba descubriendo una nueva faceta suya.
En ese momento Ben y Sonia llegan al comedor y como si estuvieran sincronizados levantan una ceja ante la confusión de la situación. Todo el mundo estaba mirando el espectáculo que se había provocado, pero ningún encargado del comedor decía a nadie nada. Amira y Clara desaparecen para ir al baño.
Ben se pone en frente mío y Tatiana al lado mio en frente de Saúl. Finalmente entran Alina y Amelia junto con Amira y Clara; esta última viene más calmada pero seria.
A partir de ahí, nos vamos levantando de dos en dos para ir a por la comida, como Tatiana se levanta conmigo y Douglas con Lissa, a Ben le toca ir con Saúl. Cuando vemos que se levantan Tatiana me da un pellizco por debajo de la mesa haciendo que me sobresalte para ser testigo de la escena cómica que se produce en frente de nosotras, dos que se llevan mal, yendo juntitos en son de paz para ir a por comida. Tatiana y yo nos empezamos a reir entendiéndonos y los demás de la mesa nos empiezan a mirar.
-No te rias sino quieres sufrir las consecuencias-dice Saúl con una sonrisa ladeada hacia Tatiana.
Ben en vez de responderme me pone una cara de advertencia "como te rias te cuelgo". Lo que nos hace incrementar la risa aún más, siento los calores de tanta risa, y me empiezo a serenar. Cuando nos calmamos Tatiana empieza conversación.
-Alina, ayer vimos a tu novio.-la dice sonriendo.
-Ah, ¿si? -dice Alina frunciendo el ceño.- ¿Dónde?
-En su consulta. No sabía que trabajaba en en hospital de mi madre.-responde Tatiana.
-¿Y a qué fuisteis tan tarde? Él trabaja de noche. -dice Alina curiosa.
-Huelo a celos...-deja la palabra en el aire Esmeralda.
-Oye, ¿y no te molesta que tu novio vea tantos bajos a otras mujeres? -pregunta picándola Lissa a Alina.
-Es su trabajo. -dice Alina encogiéndose de hombros.
Saúl y Ben vienen a la mesa.
-Bueno, me estabas preguntando a mí. -dice Tatiana. -Fuimos a esas horas por la hermana de Saúl.
De repente recibo una minipatada y me quejo.
-Lo siento. -me dice Saúl, creo que es la primera vez que se disculpa conmigo. Luego veo de reojo que se la da a Tatiana, como símbolo de que no le ha gustado que dijera el motivo de la visita al ginecólogo.
-¿Qué la pasó?- preguntan a la vez curiosas Amelia y Alina.
-Nada importante. -dice Tatiana quitando importancia tras la señal de su novio. -Tu novio es muy majo. -dice cambiando de tema fracasademente.
Ante el silencio que se acaba de crear habla Esmeralda.
-¿Y como van los preparativos de la fiesta? -dice Esmeralda a Amelia y a Tatiana.
-Van yendo. -dice Amelia haciendo una sonrisa que se convierte en una mueca.
-¿Cómo que van yendo? Os recuerdo que es este fin de semana. -dice Esmeralda obvia.
-A ver, que van bien, pero no hay nadie que quiera hacer el bailes especial el sábado. -explica Tatiana. Según lo va diciendo se pone a reflexionar, como si para que se la encendiera la bombilla solo hiciese falta decirlo en voz alta. -¡Ya sé! -exclama. -¡Saúl! -le llama la atención a su novio quién está entretenido hablando con Douglas y no se percatan de la conversación.
-¡Saúl! - le llaman todas al ver que no se había enterado de que le estaban llamando. Él gira la cabeza como la muñeca del exorcista.
-¿Qué? -dice confundido a la vez que un poco molesto por haberle quitado de su supuesta entretenida conversación.
-Bailar. -dice en monosílabo Tatiana, a lo que le deja a Saúl con el ceño fruncido. -Este fin de semana. -sigue sin comprender.
-Que este fin de semana interpreteis la canción de este mes en la hermandad de Esmeralda. -aclara Amelia.
Ahora Douglas levanta una ceja.
-¿Qué? -dice sin terminar de creerse lo que ha oido.
-Que interpreteis la canción de este mes. -repite Tatiana.
Ellos se empiezan a reir como si les acabásemos de contar un chiste muy gracioso.
-No lo direis en serio. -dice Douglas riéndose.
-Nadie lo quiere hacer. -responde Esmeralda.
-¿Y creéis que nosotros sí? -responde Saúl mientras se sigue riendo.
-Claro que no, pero si quieres ganarte una cosa que ya sabes lo vais a hacer. -dice poniendo carita de angel Tatiana mientras que le chantajea. Douglas levanta otra vez la ceja.
-Ponernos a prueba. -dice con una sonrisa ladeada.
-Yo quiero verte, así que sí, yo te pongo a prueba. -dice entrando en la conversación Lissa y poniéndose de nuestra parte. Douglas se queda confuso ante las palabras de su novia.
Tatiana y yo nos miramos y a continuación a Amira, se mordía las uñas mientras que oía el panorama.
-Lissa yo si quieres bailo para tí pero no para otras. -dice Douglas intentando convencer a Lissa.
-Ah no no, no me enredes, que si no te quedas en régimen de lo que tú y yo sabemos. -dice Lissa insistiendo.
-Y de lo que nosotros deducimos. -termina diciendo Esmeralda lo que provoca risas en nosotras.
Clara ya no estaba tan apagada, me doy cuenta cuenta cuando pide pasarla el agua.
-Bueno, ¿y si los demás no quieren? -pregunta Saúl.
-Yo sé que sois muy persuasivos y que os las apañareis para que bailen, especialmente el perrito faldero ese que teneis como amigo. -responde Tatiana con una sonrisa ladeada.
-Y si no meteis a Ben. -dice Amelia dando una solución rápida.
-No, a mí me dejais tranquilito. -responde Ben siguiendo la "broma".
-¿Y cual sería la canción? -responde Douglas rindiéndose antes que Saúl, lo que este hace que le mire sorprendido por su rápida resignación.
-La de reggaeton lento de CNCO. -responde Tatiana sonriente.
-La tenéis que cantar y con baile incluido. -exige Amelia.
Ellos dos se miran.
-¿Preparado para ser mariquita? -le pregunta Saúl a Douglas de forma sarcástica.
-Preparado para tener mamitis. -responde Douglas a Saúl de la misma forma.
Todas empezamos a aplaudir por la aceptación del espectáculo, nos ganamos las miradas de los pocos que ya se encuentran en el comedor.
-¿Y vosotros vais a saber sacaros los pasos solos? -inquiere Esmeralda.
-Me da a mi que no. -responde Lissa por ellos.
-Pff. -suspira Tatiana.
-¿Y quién les puede enseñar bien para que estén preparados el sábado y que no nos cueste mucho? --se pregunta Amelia.
-¿No hay nadie de esta mesa que se vea capaz? -pregunta Tatiana probando suerte.
-Sonia, ¿tú no me dijistes que estuvistes en una escuela de baile por mucho tiempo? -pregunta Alina a la susodicha.
-Bueno, bueno, bueno. -se burla Douglas.
-Tu a callar. -le manda silencio Amelia.
-No me da la gana. -sentencia Douglas.
Ella le dedica una peineta, él responde mandando un beso al aire.
-Bueno, Sonia ¿nos harías ese favor? -pregunta Tatiana.