Capítulo 41: El baile de máscaras (2/2)

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¡Hoy estamos de celebración! Antes de empezar con el capi quiero daros las gracias a todos los que estáis leyendo mi historia. Después de varios meses desde que la empecé, hemos llegado a las ¡10.000 lecturas! (10k) Y por eso, os doy a todos las gracias, especialmente a las personas que más me comentáis, que son  @idkilovebooks, @@samantha_benitez, @@lapotterhead500 y @@CinthyaIsabelVelezZ7. Gracias a todos y espero que os guste el capítulo, os lo dedico :)

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- ¿Hay alguien? – preguntó la grave voz del señor Filch – ¡Sé que hay alguien! Y no creo que le convenga jugar a esconderse.

El viejo Filch empezó a caminar por el pasillo hasta el libro que había estado hojeando Hermione hacía tan sólo unos instantes. Se detuvo a tocarlo y notó que el olor a moho salía de ese tomo. Estaba seguro de que alguien lo había abierto muy recientemente. Lo cogió y leyó el título: "Aguas mágicas"

- Así que le interesan las aguas mágicas – dijo mientras escudriñaba la oscuridad.

Hermione estaba aterrada. ¿Cómo se le había ocurrido colarse en la Sección Prohibida del tercer piso? Y además, sola.

«¡Soy imbécil!», pensó para sí. Estaban a punto de pillarla. Si se movía, Filch la atraparía enseguida. Estaba perdida y no sabía qué hacer.

- ¿Qué agua exactamente? – continuó preguntando el viejo Filch – Las aguas pantanosas son un buen remedio para curar enfermedades cutáneas, y también son uno de los ingredientes cruciales para crear monstruos prohibidos – continuó avanzando.

«¡Piensa, Hermione, piensa!», se decía a sí misma. «¡¿Qué puedo hacer?!».

Si pudiera convertirse en un animal, quizás un gato o un tejón, podría pasar desapercibida al lado de Filch sin que la viera. No, pero eso era imposible; Hermione no era un animago, y tampoco se sabía ningún hechizo de memoria de ese estilo.

Otra solución era echar a correr sin más, pero en cuanto lo hiciera, el anciano la perseguiría y ya se habría visto descubierta, aunque por otra parte, si no hacía nada de inmediato se iba a ver en problemas igualmente. ¡¡Era todo tan difícil!!

- ...esas sirven como potentes venenos. Aunque la más interesante es, sin duda, el agua de la vida, que convierte en inmortal al ser que bebe de ella. Tal vez sea esa la que andaba buscando. ¿Me equivoco? – Filch estaba tan sólo a unos pasos de Granger. Ella estaba paralizada y aún no tenía ningún plan de huida. Se le acababa el tiempo.

- ¿Cómo lo has sabido? – exclamó de repente una voz, pero no era la de Hermione, sino la de un joven, y venía de tres pasillos más a la derecha – ¿Cómo has sabido que buscaba el agua de la vida?

Filch enseguida volvió atrás y atravesó corriendo los tres pasillos que había de distancia entre él y la voz. Pero al llegar, no encontró nada.

- ¡Ja, ja, ja, ja! – se rio con su voz anciana y desagradable– Conque aún quieres jugar al escondite. Bien. Pues jugaremos.

- ¡Qué bien! – exclamó la voz en tono burlón. Ahora estaba más lejos.

- ¿Quién eres? – Filch continuaba corriendo – Vamos, muéstrate.

- Yo pregunté primero. ¿Cómo sabías que buscaba el agua de la vida?

El anciano conserje paró un segundo para oír mejor. Se estaba empezando a impacientar.

- Pues porque eres ya la segunda persona esta semana que intenta robar este libro. A no ser que la otra vez también fueras tú.

- ¿La segunda vez? No, no. Yo es la primera que vengo. ¿Para qué habría vuelto si ya hubiera venido a robarlo? Además – su tono era divertido – si mi intención es robarlo, ¿por qué sigue en el estante?

La Razón y el Corazón (Draco y Hermione) [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora