Ignórame (U.D.S.#2)

"Tienes razón."

Soundtrack ~ Together ~ Yall

"La vida se basa en aprender a sufrir, de tal manera que puedas llegar a ser feliz sufriendo." 

- J.F.Hoffman

Capítulo 35: "Tienes razón."

Las risas inundaron el lugar en el que me conservaba por horas. Desde niños de tres años hasta personas que están a punto de cumplir su mayoría de edad. Los ojos de todos en esa sala hablaban de cualquier cosa y se reían de ellos mismos.

Mi corazón desbordaba felicidad a cada latido que realizaba. Mis manos entrelazadas con las del chico a mi lado mientras sus inocentes caricias en el dorso de ésta me provocaba aún más alegría. Su alegría hacía la mía pues el alivio que sentía en este instante era inimaginable.

Al llegar aquí sentí real pánico de que él conociera a las personas que están delante de nosotros en este momento. Él se ha criado rodeado de dinero y amor por parte de su familia mientras las personas que vivían aquí habían sobrevivido con poca ropa en su armario y la sensación de no quererte querido por tus progenitores.

No sabía como podría haber sido la cena de la que ahora me emocionaba. Sin embargo, creo que nunca había tomado una decisión más valiosa. Thiago se ha ganado el cariño y la aceptación de todos los que están aquí.

Conversa hasta del tema más estúpido, se ríe de tonterías que consigue hacernos soltar intensas carcajadas a los demás. Su ímpetu por intentar adentrarse en la vida de los presentes sin pasar los límites. Su disposición a conocer a mi extensa familia.

— ¿La seguiste hasta las carreras? — La sorpresa inunda las palabras de Scott.

Thiago suelta la risa más divertida que puede, se encoge de hombros mientras comienza a remover el refresco que tiene en su mano libre. Los lleva a sus labios, mojándolos, mi mirada no se desplaza de ese punto. Mi boca se seca.

— Fue su cabello — Responde con una sonrisa.

Alzo una ceja en su dirección sin poder evitar terminar de formar las sonrisa en mis labios.

— ¿Me seguiste por mi pelo? — Sus ojos se posan en mi rostro provocando que su mirada electrice mi cuerpo con ese azul tan profundo que solo él posee.

— Fue una de las razones — taladra mi alma sin percatarse del remolino de emociones que siento en el interior de mi cuerpo.

Pasa su lengua por sus labios, mis ojos no pueden evitar dirigirse a ese punto en el que su sonrisa se empieza a hacer presente. Las caricias en mi mano se detienen, nuestra atención fija en otra parte de nuestros cuerpos.

— Los besos dejadlos para un hotel, chicos — su voz consigue sacarnos de nuestro momento.

Mi mirada molesta se desplaza hasta Scott que alza sus manos como si no fuera con él la situación. Ruedo mis ojos con diversión al contemplar que sigue siendo el mismo chico de siempre. Su voz haciéndose presente en los momentos más inoportunos.

— Ya te pasará a ti, Scott — mascullo en cuanto sus ojos giran con ironía.

— No pienso tener novias hasta los ochenta cuando esté viejo y sin poder moverme del sofá — se cruza de brazos como si lo que piensa fuera a ser verdad.

— Entonces será una enfermera lo que tendrás, no una novia — Scott abre su boca dramatizando la situación, agarra el cuello de su camiseta simulando una acción de dolor falsa. Río ante su poca originalidad para actuar.