Capítulo setenta y uno

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Frank, como bien había dicho su madre, se abrigó lo más que pudo y se llevó su paraguas.
No sabía cómo iba a hacer para que Cheec no se diese cuenta de que no había llegado a dormir, mas ahora lo único que le importaba era estar con su Gerard.
Llegó exhausto por correr desde su casa, y le extrañó que nadie atendiese la puerta, ya que había estado tocando un buen rato.
Su última opción fue usar la llave que se encontraba en un arbusto.
Abrió la puerta y el silencio fue lo único que se oyó. Subió las escaleras para ver si había alguien, y lo que encontró provocó que aumentaran los latidos de su corazón.

— Gee...– Susurró.

Su novio se encontraba parado en frente de su cama, con la parte inferior de su cuerpo cubierto precariamente por una toalla.

— Frank...– Se sonrojó, notando cómo este lo observaba descaradamente.— ¿Qué haces aquí?

Pasando la mirada lentamente desde sus pies hasta sus ojos, se permitió lamerse los labios.

— Vine a visitarte.

Frank observaba cómo las pequeñas gotas de agua caían por sus cabellos negros, bajando hacia su abdomen y perdiéndose en la toalla.

— ¡No me mires así, Frank!
— Es inevitable.– Rió, acercándose a su novio.— Eres tan hermoso...

Cuando lo tuvo suficientemente cerca, lo atrajo hacia sí y unió sus labios en un no muy delicado beso, expresando todas las sensaciones que lo hacía experimentar aquel ser.
Al separarse le mordió fuertemente el labio inferior a Gerard, provocando que este se queje.

— ¡Frank!– Lo regañó.— No seas tan bruto.
— Lo siento, bebé...

Frank se sentó en la cama y guió a Gerard para que se siente en su regazo, así estando demasiado cerca como para poder parar.
Gerard posó sus manos en las mejillas de su novio, y lo acarició dulcemente, para luego descender hasta la camiseta y sacársela.
Frank, con sus manos apretando los glúteos de Gerard cubiertos por la fina tela, hacía que este se moviese provocando una fricción que a los dos los estaba llevando a las nubes.

— Frank...– Ronroneó Gerard en su boca.

Frank pasó sus manos por el abdomen pálido de Gerard, bajándolas hasta agarrar la toalla y arrancarla de su cuerpo con brusquedad.
Gerard quedó expuesto, mas la situación y las emociones no lo dejaban pensar con claridad, no lo dejaban ni siquiera tener un poco de pudor.
Una luz y un sonido proveniente de la puerta de la habitación los sobresaltó.

— ¿Es esto lo que haces mientras tus padres no están, Gerard?– Preguntó Bob, sosteniendo una pequeña cámara.— Que mal, Gerard. Nunca pensé que fueses así...
— ¿Qué quieres, Bob?– Gerard todavía estaba agitado.
— Nada... Bueno, sí, quiero algo. Pero no viene al caso...
— ¿Qué quieres? Como verás, mi novio y yo estamos ocupados.– Habló Frank con hastío.
— Tranquilo, Frank. Me sorprende que tus padres no sepan que eres homosexual...
— ¿De dónde mierda sacaste eso?

Frank se levantó de la cama, importándole muy poco su marcada erección y dejando a Gerard tapado con una manta.
Se acercó peligrosamente al chico.

— Solo sé cosas...
— ¿De dónde mierda sacaste eso, hijo de puta?
— Sería una pena que alguien les mostrase esta foto a tus padres...– Levantó la cámara, sin inmutarse por el tono agresivo de Frank.— ¿Verdad, Frank?
— Hijo de puta.– Masculló, todavía sin creer que fuese capaz.
— ¿Qué crees que tu padre te haría, Frank? Tal vez te golpearía hasta casi matarte como pasó la última vez... O quizá te mate de una vez por todas.

El puño de Frank se estrelló contra la mejilla de Bob, haciendo que este trastabillase y cayese al suelo con un doloroso golpe.

— ¡Frank, no!– Gerard pareció reaccionar al ver a su novio enfurecido repartiendo golpes por todo el cuerpo de su primo.— ¡Frank!

Se levantó de su cama con la sábana enrollada a su cintura, para ir y separar a su novio del sangriento Bob.

— Tranquilo, Frank.– Susurró, apartándolo y haciendo que se siente en una silla.— No va a hacer nada...
— ¡Que yo me entere que haces algo, hijo de tu puta madre!– Gritó Frank viendo a Bob, que se arrastraba fuera.

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Creo que es el capítulo más largo hasta ahora.

¡Gracias por leer! 💕

De atar; FrerardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora