- Buenos días.
- ¿Viste el partido ayer?
- Claro...
- No lo viste.
- Me dormí.
- Doble zeta, me desilusionas.
- Lo siento, pipita Higuain, ¿Marcaste alguno?
- Que va, fue Leo.
- Entonces no me siento tan culpable.
- Se me olvidó que eres del Real Madrid.
- Pues que no se te olvide tanto.
- ¡Pipita Higuain, vení!- escuché el que parecía Di María. Sabía que era él por los audios en el Whatsapp.
- Me reclaman.
- Pues corre.
- Pueden esperar.- sonreí a la pantalla y él hizo lo mismo.- ¿Qué hiciste ayer?
- Tuve fiesta.
- Deberías venirte acá y estar de fiesta conmigo.
- Lo haría encantada, pero quiero parar de viajar por un tiempo.
- Pues iremos nosotros allá.
- ¿Todos?
- Todos y si no quieren los llevo yo.
- Claro, claro.
- ¿Crees que no soy capaz?
- Lo creo, así que no lo hagas.- él rió.- ¿Cuándo vuelve a Europa?
- Un partido más y estoy allá con vos.
- Conmigo no, en Italia.
- Te llevaré de paso.
- Que ganas con que vaya a Italia.
- ¿Alguien más te lo dijo?
- Eh...no.- mentí.- Solo tú, pero que seas que no iré.
- Venga...
- No y no hay más que decir.
- Está bien, me voy a dormir ya que acá ya es tarde.
- Malditos cambios de hora.
- Chao.
- Chao.- me despedí con una sonrisa y terminé la llamada de Skype.
No sé por qué, pero siempre me salía mentir sobre si lo conocía de antes y de que hablo con Paulo. Me levanté de la cama para bajar a saludar a mis padres y a mi hermano, sentándome con él a desayunar.
- Me voy.
- ¿Con quién y a dónde?
- Con Lucía a su casa.
- Uno mañanero eh.
- No seas mal pensada.- reí y al terminar él me miraba serio.- Pero ojalá.
- ¡Roc!
- ¿Qué?
- Idiota.
Le sonreí y se fue de casa riendo. Recogí todo para ir al salón y sentarme a hablar con mis padres hasta la hora de la comida, donde salimos los tres a un restaurante para volver luego a casa.
Locos Madrileños.
Sarita- ¿Quién sale hoy?
Zoe- Quita, quita.
Zoe- Resacón.
Miguelin- Te lo mereces.
Miguelin- No vales para beber 😂
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Friends (Paulo Dybala)
Фанфик- ¿Te quieres casar conmigo? - Por supuesto que sí, Bruno. - ¡Genial!- sacó un aro de gominola de la bolsa y me lo puso en el dedo.- Seremos felices por siempre y juro amarte hasta el final. - ¿Lo prometes? - Sí. - Pues yo juro recordarte...