Capítulo 2

3.8K 109 11
                                    

- Despierta, dormilona.

- Soy un oso, déjame ser un oso dormilón.

- Querrás decir osa.

- Eso.

- ¿Queso?

- ¿Qué?- me destapé la cara con la almohada mirando confundida a mi hermano.

- Nada, nada. Levanta, venga.

Resoplé mientras me levantaba de la cama sin ganas, arrasando mis pies hasta la cocina para desayunar. Después de eso, me fui al salón a estar con el ordenador mientras veía a mi hermano jugar a un partido del FIFA. Y así toda la mañana hasta la hora de la comida.

Los dos cocinamos y pusimos la mesa para que cuando mis padres llegaran de su último día de trabajo esté todo listo. Nos sentamos los cuatro en la mesa y terminamos de comer para irme a mi habitación con mi hermano.

- ¿Cuándo te vas a buscar piso?

- ¿Y tú?

- Lo hacía esta mañana con el ordenador mientras tú jugabas.

- Aquí estoy bien y papá y mamá están bien conmigo.

- Niño de mamá.

- Niña de papá.

- ¿A qué te echo de mi habitación?- él rió y volví mi mirada al móvil.- Te voy a mandar de una patada a Buenos Aires.

- Anda que...irse a Buenos Aires.

- ¿Algún problema? La ciudad es preciosa, la gente también y Argentina en general, así que a callar.

- La gente es preciosa eh.- miré a mi hermano seria, mientras que él se intentaba aguantar la risa.- Vale, perdona.

Seguimos los dos solos allí hasta que quedé con mis amigos y salí a la calle para ir a la Gran Vía, donde quedé con ellos. Me senté en un banco a esperar hasta que lo vi a lo lejos y me levanté para abrazarles.

- Cuéntanos, ¿Lo encontraste?

- Que pesados, ya os dije que a donde yo fui no fue donde lo conocí, además, era muy pequeña.

- Ahora se puede casar contigo.

- Claro, claro.

Reí por Miguel. Sí, ellos conocían sobre ese chico que yo le llamaba Bruno y que no me sabía ni su apellido, ni conocía a su familia ni donde vivía, ni siquiera si seguía vivo.

Fuimos de bar en bar hasta que se hizo muy tarde y volví a casa con Eric, despidiéndome de él en la puerta y entrando a la casa de mis padres en silencio. Aún así, la luz de la cocina se encendió, asustándome.

- Idiota.

- ¿Son horas de llegar?

- ¿Son horas de estar despierto?

- Touché.

- Anda, tira a tu habitación que aquí yo soy la mayor.

Subí las escaleras con mi hermano y cada uno se fue a su habitación para dormir hasta el día siguiente. Cuando desperté, eran las ocho de la mañana y la culpable fue Lucía, que me llamaba al móvil.

- ¿Qué pasa?

- Sara quiere hablar contigo.

- ¿Ahora?

- No, a las doce en nuestra casa.

- ¿Y para qué me llamas ahora?

- Porque luego se me olvida.

- Mi hermano y tú son tal para cual, los dos unos idiotas.

Escuché como reía y volví a dejar el móvil en la mesilla, volviendo a dormirme. Hasta que me desperté por mi misma a las once. Me levanté y bajé a la cocina a desayunar, después subí a despertar a base de cojines a mi hermano y acabé en el baño, duchándome.

Me vestí con una falda negra, un crop top blanco y unas Adidas, recogiendo mi pelo con una coleta y saliendo por fin del baño para recoger mis cosas antes de salir en dirección a la casa de Sara.

- Buenos días.- pasé a dentro y me encontré con todos allí.- ¿Y esto?

- Bienvenida a la reunión de viajes, doble zeta.

- ¿Reunión de viajes?

- Les entró envidia cuando me fui a Italia con tu hermano y claro, encima tú estabas en Argentina.- Lucía apareció y desapareció subiendo las escaleras.

- ¿Queréis hacer un viaje?

- Sí, todos juntos, un viaje de verano.

- Yo acabo de llegar, locos.

- Pues no haber colocado todo y haber dejado las maletas como están.

- Locos, que estáis locos. A ver, ¿A dónde queréis ir?

- Tenemos Berlín y Roma.

- Aunque en realidad iremos a otros sitios, no nos quedaremos en Roma o Berlín siempre.

- ¿No es mejor un sitio con playa?

- No seas aguafiestas.

- Vale, vale...

- Yo elijo Roma, ¡Vivan los romanos!

- Yo igual, ¡Viva la película Gladietor!

- Berlín me gusta.

- A mi no me gusta ninguno.

- Tú desempatas, doble zeta.

- Pues...vayamos a Roma, lo siento, Miguel.

- La vida es cruel.


Friends (Paulo Dybala)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora