Capítulo 18

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- Entonces te vas.

- Me voy.

- ¿Y qué pasa con nosotros?

- Pues volveré cuando terminé el caso y estaremos todos juntos otra vez.

- Eso no se lo cree nadie.

- ¿Qué?

- No es por nada, Martina, pero lo mismo dijiste con Buenos Aires.

- ¿Así?

- Doy fe en lo que ha dicho Miguel.

- Es verdad, dijiste que cinco meses y al final estuviste dos años.

- Pero es distinto, allí me fui sin trabajo y aquí tengo que volver sí o sí.

- Eso también es verdad.- Sara miró a Miguel.

- Doy fe en lo que ha dicho doble zeta.- Eric miró a Miguel también, ya que el sevillano era el más afectado y estaba en frente de mí con los brazos cruzados y los demás rodeándonos.

- Siempre puedes pedir un traspaso allí.

- Golpe bajo.- dice ahora Zoe.

- Y no lo pediré, Migue, no os voy a dejar.

- Ya lo hiciste, dos años y sin venir mucho aquí.

- Y no o volveré hacer.

- Nunca se sabe, a lo mejor te encuentras por allí a un italiano.

- Oh el amore.- Sara hizo el típico gesto de las manos de los italianos.

- No lo haré ni aunque me pongan al chico más sexy en frnete de mí.

- Ya y yo voy y me lo creo.

- Migue, te prometo que no me marcharé para no volver.- toqué sus brazos y le sonreí.- ¿Abrazo?

- Está bien.- dijo después de un suspiro.

Sonreí aún más cuando me rodeó con sus brazos y después se unieron los demás para un abrazo grupal. Ellos lo tenían más fácil en su trabajo. Eric era camarero, Sara peluquera, Zoe profesora y Miguel era un simple obrero. Así que no se movían mucho de España a no ser que fueran vacaciones.

Me despedí de mis padres para salir con ellos a cenar, ya que recién acababa de llegar del trabajo a la noche y tenía pensado hacer ya algo de la maleta, pero ya lo haría mañana ya que no tenía que trabajar.

Fui con ellos a un restaurante y pedí lo de siempre entre risas con ellos. Y me hicieron prometer que haríamos un viaje a algún sitio de España cuando vuelva, ya que sería pronto Navidad cuando vuelva.

Volví a mi casa justo para dormirme sin hacer caso a los mensajes. A la mañana siguiente, Kiara me estaba lamiendo la mano, que sobre salía de la cama. Me desperté y levanté de la cama sin ganas y fui viendo los mensajes de ayer hasta la cocina.

Hice y comí mi desayuno y me fui a sentar en el sofá, acabando tumbada y sin parar de mirar el móvil. Lo dejé a un lado cuando llegó mi hermano y me puse a hablar con él sobre sus clases, ya que ayer no pude hablar con él de lo cansada que estaba.

Pipita Higuain

Ya está todo.

Pero si queda aún un día sin contar este.

Cuanto antes mejor.

Quiero que vengas ya ☹️

A ver que me haces.

😂

😏

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Paulo Bruno

¿Cuándo venías?

En dos días si contamos este.

Te quedabas con Higuain, ¿No?

Sí.

Te iré a ver.

Todos los días.

😂

Déjate de tonterías.

Y vete con Anto.

¿Por qué siempre acabas hablando de ella?

No sabía que contestar a eso, así que dejé ahí la conversación y me puse con el ordenador un rato, hablando por Skype con Bastian hasta la hora de comer.

Después, me subí a la habitación y hablando con los demás, quedé para esta tarde con ellos en el Retiro. Me aburría y bajé a jugar con mi hermano a la Play hasta la hora, donde me arreglé y salí hacia el parque.

- ¿Quién falta?

- Eric y Zoe.

- Los más tardones.

- Correcto.

Friends (Paulo Dybala)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora