Desperté por la arma del móvil, recordando todas las mañanas que hice lo mismo en Turin. Me levanté de la cama y arrastré mis pies hasta la cocina, haciendo mi desayuno mientras saludaba a mi padre.
Recogí todo una vez terminé y subí a ducharme y cambiarme. Bajé después con el maletín en mi mano, me despedí de mis padres y llamé a un taxi para ir hasta el bufete.
Allí saludé a Antonella y a Bastian con un gran abrazo de reencuentro, al parecer Antonella no se había ido a ningún país estos meses pero se irá a Reino Unido el próximo.
Estuve hablando con ellos, contándoles algunas novedades y como me fue en Italia hasta que tuvimos que volver al trabajo y volví a reencontrarme con mi despacho. Coloqué todo y empecé con el trabajo que tenía ya en la mesa, resolviendo fácilmente las defensas de unos casos pequeños. Entre tanto, mi móvil sonó.
- ¿Sí?
- Paulo y sus ganas de oír tu voz.
- ¿Qué tal en Turin? ¿Cómo están todos?
- Bien, estamos todos bien, ¿Y allá? ¿Cómo fue la vuelta?
- Buena, encontré a dos compañeros de lo que conocí.
- Cuando nos veamos te daré tu regalo.
- ¿Mi regalo?
- Sabía que yo no tendría, pero te hice un regalo de reyes.
- ¿En serio?
- Sí y te lo daré pronto, si no, no aguantaré.
- Impaciente.
- Sí.
- Bueno, sigo trabajando, llámame luego.
- Chao.
- Chao.
Dejé el móvil para seguir trabajando hasta el descanso para comer, donde salí encontrándome con Carla, a la que no vi cuando llegué. La saludé de la misma forma que a los de antes y salimos a comer, volviendo luego y yendo, yo, directamente al despacho.
- Señor Smith.
- Mira, la italiana.- sonreí terminando de pasar a u despacho y se levantó para darme un apretón de manos.- Buen trabajo el que hiciste.
- Gracias, tan solo hice una buena defensa y...
- Sí, pero los primeros casos lejos de tu país suelen costarles a todos. Pero tú, tú lo has terminado con un sobresaliente.
- Gracias, de verdad, no me costó concentrarme porque ya estuve dos años fuera de España así que sabía cómo era todo cuando dejabas tu país.
- Así me gusta, con experiencia.
- Vuelvo al trabajo, si no le importa.
- No, no...- le sonreí de nuevo y abrí la puerta.- Martina.
- ¿Sí, jefe?- me di la vuelta antes de salir y él me sonrió.
- Te aviso que te daré un gran caso en España y que tendrás unas vacaciones pequeñas después de ese caso.
- ¿Por qué esas vacaciones?
- Siempre lo hago, así vuelven con más energías. Pero siempre podrás recurrirlas.
- Gracias, señor Smith.
Salí de su despacho algo más feliz sabiendo ya que haría en esas vacaciones. Volví al despacho y terminé el trabajo cuando ya estaba oscuro el cielo, así que me despedí de mis compañeros y llamé a un taxi para volver cuanto antes a mi casa.
- Ya llegué.
Saludé a mi madre, que estaba sola en el salón, raramente. Me senté con ella a hablar mientras tomaba mi cena en una bandeja. Al terminar, volví a ponerme el abrigo antes de salir con Kiara a dar su paseo de noche.
Volví a casa viendo ahora a mi hermano en el sofá, dormido y sin una manta por encima. Le quité a Kiara la correa para que subiera las escaleras a la habitación de mi hermano, ya que era donde dormía porque era suya.
Busqué una manta que ponerle encima y apagué la televisión, subiendo a mi habitación para cambiarme antes de tumbarme en la cama y hablar con mis amigos.
Paulo Bruno
Te echo de menos.
Yo también.
Pero tengo buenas noticias.
¿Cuáles?
Que en el trabajo a lo mejor me dan vacaciones.
Después de un caso.
Y ya sabes que haré en las vacaciones...
😍
Volverá conmigo, ¿Verdad?
Claro.
¿Dónde mejor?
Sos la mejor.
La mejor de las mejores.
😂
Te quiero ❤️
Yo también te quiero ❤️
Y por eso me voy a dormir.
Para no tener voz de dormida mañana cuando hablé contigo.
Aunque tengas esa voz.
Seguís siendo perfecta.
Buenas noches.
😍
Buenas noches.
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Friends (Paulo Dybala)
Fanfic- ¿Te quieres casar conmigo? - Por supuesto que sí, Bruno. - ¡Genial!- sacó un aro de gominola de la bolsa y me lo puso en el dedo.- Seremos felices por siempre y juro amarte hasta el final. - ¿Lo prometes? - Sí. - Pues yo juro recordarte...