Capítulo 18

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NARRA DANIEL

Entre en la habitación del hotel y me encontré en la cama a Jesús encima de Sandra,pero sólo se estaban besando.

- Ups, perdón - dije.

- Joder Dani que susto me has dado, la de cosas que se me han pasado por la cabeza,de quien podía ser - dijo mi hermano.

- Lo siento.

- ¿Calum e Irene están abajo?

- Sí, están donde la mini discoteca esa,aquí en el hotel.

- Voy a ir a buscarlos, que se suban a dormir,ya que es muy tarde y mañana no se van a levantar

- Vale, pero no tardes - dijo Sandra algo preocupada.

- No te preocupes - la toco la barbilla y le guiñó el ojo. Se levantó de la cama,cerró la puerta y se fue.

Sí,mi hermano en realidad es muy sensible y se preocupa por los demás, es el típico chico que va acompañando a todos a sus casas y hasta que no a dejado a todos en su destino,no está tranquilo.

- ¿Dónde has estado Dani? - me dijo Sandra cuando Jesús se fue.

- Con Calum,Irene,Irailda y Paola pero Iraila y Paola se han ido hace un rato,así que he dejado un poco de intimidad a la parejita,aunque creo aquí también molesto, soy un incordio.

- No,¿pero porqué dices eso? - dijo Sandra en frente mía.

- Da igual me voy.

- ¿A dónde vas a ir ahora tú sólo?

- Iré a dar una vuelta, yo sólo, sí eso es a lo que quería decir que estoy,sólo.

- Daniel tu no estás sólo ¿por qué dices eso? A mí siempre me vas a tener para lo que quieras - me dijo y me abrazó.

- ¿Para lo que quiera?

- Para lo que quieras Daniel.

- Y si... Espera ven a la terraza por si acaso alguien nos escucha.

Lo bueno de esta terraza es que era súper amplia porque estábamos en un bajo.

- ¿Y si te diría que me gustas?

Ella me miró y bajo la mirada hacia el suelo,pero no dijo nada.

- Sandra,mírame,mírame. Antes decía que estaba solo porque Calum e Irene están juntos, tú y... y... y mi hermano estáis juntos - me costó decir lo último - y bueno yo estoy aguantando veros a ti y a Jesús todos lo días,cuando yo me estoy muriendo por dentro ¿me entiendes?

- Claro que te entiendo,pero es que,yo... no sabía que tú sentías eso por mí. ¿Por qué no se lo has dicho a tu hermano? A lo mejor él te podía ayudar.

- No,no,Sandra no le digas nada.

- Pero ¿porqué? A lo mejor los dos te podemos ayudar.

- Sandra,por favor,no le digas nada,por favor - le dije mirándola muy directamente a los ojos.

- Vale, tranquilo,no le diré nada,si es lo que quieres.

- Yo... Es que bueno Jesús y tu habéis estado tan unidos,que bueno,yo... Nunca he tenido el valor de decirte que te quiero - la dije.

En ese momento la tenía tan cerca... Que corriendo me lancé a darla un beso,pero ella se quitó. Aunque ella se quitó a mí ya me había dado tiempo besarla por poco tiempo,pero la besé. ¡Dios! Pero ¿qué acababa de hacer? No quería forzarla.

- Daniel lo,lo siento,pero estoy con Jesús,no puedo engañarle.

- Es que somos gemelos ¿qué tiene él que no tenga yo? - no lograba entender eso.

- Lo sé. Sé que sois gemelos y que sois iguales,tengo que ser sincera contigo pero... no quiero hacerte daño.

- Dilo Sandra, lo que tengas que decir,dilo.

- Pero...

- Dímelo,tengo que saberlo,no me harás daño,de verdad. El daño ya está echo al saber que no sientes lo mismo que yo.

- Dani... No me hagas sentir peor de lo que ya me siento.

- No era mi intención,pero por favor,necesito saberlo.

- Bueno pues... Sé que sois gemelos,sois iguales,pero no lo sé,vale,no lo sé,que tiene él que me enamora muchísimo. Y aunque seáis gemelos y os parezcáis un montón,siempre,siempre va a ver algo,aunque sea difícil de notar, va a ver algo en el físico que os diferencie y algo en vuestra personalidad que sea distinta,porque nadie puede ser igual,por mucho que se parezca,siempre hay algo que le haga ser especial y le haga ser distinto a los demás, y eso es lo que nos hace ser únicos a cada uno. No hay dos personas iguales - me dijo Sandra y me dio un abrazo muy,muy fuerte - lo siento,espero que lo entiendas - dijo agachando la cabeza.

- Si tienes razón. Y no tienes que disculparte por nada,son mis sentimientos los culpables.

- No... Dani,pero ¿qué dices? No digas eso.

- Lo siento por haberte besado,pero es que estabas tan cerca que, no he podido evitarlo.

- Joe Daniel me siento tan mal... - me dijo Sandra y me abrazó otra vez.

- ¿Tú? Tú no tienes que sentirte mal por nada,soy yo el imbécil que te he besado,tú no tienes la culpa - dije mientras seguíamos abrazados.

Sandra me soltó,me miro y me sonrió.

- Qué no te quiera como novio no significa que no te quiera un montón - me dijo Sandra. 

- Yo también te quiero un montón - le dije.

Me encanta eso de ella,es súper delicada con las personas no puede hacer daño a nadie porque sino se siente fatal.

- Oye ¿nos vamos cada uno a nuestra cama a dormir?  - le pregunté.

- Es que no quiero que vengan y nos noten raros.

- Yo no voy a estar rara contigo,no entiendo porque lo dices ¿y tú?

- No,no.

- ¿Entonces?

Yo miré hacia el suelo,la verdad que después de esto no tenía ganas de ver a Sandra con Jesús,por lo menos necesitaba un día como poco para poder verlos juntos.

- Dani ¿qué pasa?

- Yo me voy a acostar tu haz lo que quieras ¿vale? Es que no me apetece veros a los dos juntos ¿entiendes? Necesito algo de tiempo.

- Ah,claro,claro. Sí,yo también me voy a ir a dormir que es tarde.

- No le dirás nada a Jesús sobre el beso,¿verdad?

- No,no tranquilo,no diré nada.

- Gracias - le sonreí y apoyé mi mano en su mano.

Nos fuimos a dormir.Lo bueno es que las dos camas estaban juntas aunque cada uno dormíamos en una distinta,claro.Vale Dani,deja de pensar en eso.

NARRA SANDRA

Había pasado un buen rato desde que nos fuimos a dormir,bueno Dani estaba dormido,yo estaba en la cama sin poder dormir.Jesús todavía no había venido.

El destino - Jesús y Daniel (Gemeliers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora