Narra Harry.
«Soy virgen» sus palabras fueron bendición para mis oídos. Al escuchar esa confesión de parte de Amélie, mi 'amigo' y yo brincamos de alegría. No es que quiera a Amélie para un polvo y nada más, es sólo que no me pasaba la idea de que fuera tocada por otro.
Harry: Genial- dije alegre mostrando mi sonrisa, ella me miro con enfado- ¿qué?- dije confuso.
Amélie: ¿Te alegra que sea virgen?- preguntó con rarez.
Harry: Claro, es un gran lujo - dije con mi grata sonrisa.
Amélie: ¿Lujo?-
Harry: Si, de que nadie haya entrado en ti- dije simple, su facción en su rostro se dio cambiada.
Amélie: Styles- dijo molesta.
Harry: Hey, es sólo la verdad, no me gusta la idea de que otro te toqué como lo tendría que hacer yo- dije sin medir las palabras, al diablo ya lo dije. Amélie quedó dura en su lugar.
Amélie: No puedes haber dicho eso... ¿Me quieres solo para una noche?- dijo sorprendida. «No diablos»
Harry: No como crees, no eres una chica de un sólo polvo- aclaré- tampoco te quiero sólo una noche... Sino varias- dije en tono perverso. Ella comenzó a ruborizarse, esto me gustaba.
Amélie: Styles, basta no hables así- dijo con vergüenza esquivando mi mirada.
Harry: ¿Qué? No quiero que otro entre en ti, sólo yo- dije simple, ella sintió morir.
Amélie: Basta no digas eso, somos amigos- dijo sería.
Harry: Hay amigos con derecho a rose- dije pícaro- ... Es mas excitante, peligroso- dije sensual.
Amélie: Basta- amenazo.
Harry: ¿Qué? Si yo se que tu quieres que éste dentro tuyo. No sabes lo que soy- dije riendo- ... Una vez dentro no querrás que salga ... Se como hundirme en ti con profundidad... Solo placer- dije con voz grave cerca de su oído dónde pude captar su lóbulo y aprovechar la situación, tome de él y Amélie dio un brinco al igual que mi amigo dentro de mis boxers.
Amélie: ¡Styles!- dijo levantando su tono de voz. Mientras se levantaba del sofá y se posaba delante mío.
Harry: No me llames así. Logras ponerme más duro- dije mientras hacía señas directo a mi bragueta del jean. Ella captó mi seña y dirigió su mirada hacía la misma dónde pude ver sus ojos expandirse.
Amélie: Diablos...- susurro por lo bajó mientras observaba mi bulto crecer.
Harry: ¿Te gusta lo que ves?- dije mientras robaba su atención.
Amélie: No, Styles eres un asqueroso- dijo nerviosa mientras iba directo hacia las escaleras.
Harry: No me llames así. Me pones más duro, recuérdame que te obligue a llamarme así cuando éste dentro de ti. Me correré mas rápido- dije desde abajo mientras reía, se pudo escuchar un portazo y un 'cállate imbécil' de parte de Amélie.
Esa chica era única, solo ella se ponía de esa forma al decir todas esas 'palabrotas' según ella. Tan sólo una chica de diecisiete años temiendo a decir la palabra sexo, era gracioso bueno en esta sociedad dónde vivimos hasta una pequeña de quince años o quizás menos a probado más pollas que Amélie en diecisiete años, es decir que a comparación, Amélie a diferencia de las otras era una santa. Era algo especial por lo cual llamaba mi atención, ninguna chica cuida tanto su virginidad como lo hace Amélie, es más creo que ya no le ven el sentido de hacer el amor es solo sexo, puro placer donde nisiquiera los amantes saben sus nombres, puro polvo sin amor. A eso soy el que menos puede hablar, de echo he tenido mas polvos que hacer el amor, creó que nunca senti esa pizca de deseo para hacer el amor con aquella persona especial, será porque jamás la encontré quizá creí encontrarla pero no era así, en la cama era solo sexo hasta llegue a compartir a mí supuesto 'amor' con quien creía mi amigo, gran puñal por la espalda pero ahora sonaba gracioso, solo fue una zorra más que me calentó la polla mientras yo creía que era la princesa de mi cuento cuando nisiquiera era un príncipe.
