Capítulo 22

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— Todo éste poder... —Observaba mi piel mientras le advertía — Lo utilizaré para acabar contigo de una vez —Continuaba flotando a la misma altura, sin moverme.

— ¡No mereces tener tanta fuerza! ¡Te lo prohíbo! —El peliazul explotó hecho furia. Rayos de luz recorrieron sus piernas para lanzarse en mi dirección, de la misma forma unas cuantas sombras puntiagudas se acercaban.

— ¿Los mismos trucos de siempre? —En el momento más preciso esquivé con todo lo que me amenazaba. Volé a gran velocidad hacía el sujeto y, al estar lo suficiente cerca, intenté freírlo con mis luces. Sólo que ésta vez eran distintas... De un color azul-morado, al llegar a la piel causaba ciertos daños, ¡Le quemé parte del rostro! Su lado derecho mantenía quemaduras leves.

—De inmediato escapó del alcance de mi linterna — ¿¡Qué mierda es eso!? ¡Arde como el infierno! —Con la palma de su mano derecha tanteó la parte de su rostro que estaba echada a perder — Maldición... En verdad no creí necesitar ponerme serio, pero, en tú caso tendré que salirme del lineamiento de nuestro jefe —En ese momento sus palabras quedaron en el aire, una luz le envolvió a su alrededor y desapareció.

—Un corte atravesó mi camisa y corto superficialmente mi estómago, caía de rodillas al suelo por el dolor — ¡Kenji, ten cuidado! —Tres rayos comenzaron a penetrar en mi piel, por lo que morena se equipó con una pistola común para dañar al rival, lo que fue un total fracaso; Las luces dejaron de dañarme, pero esquivó cada bala al desaparecer nuevamente.

— ¡Arriba! —Los canes de Pedro me rodearon esperando cualquier ataque. El susodicho se propuso a ayudarme en levantarme — Volvamos a intentarlo nuevamente, ¿De acuerdo? —Me puse de pie regresándole la sonrisa que él mantenía.

—Volví nuevamente a flotar, en ese momento una luz recorrió el lugar hasta llegar a mi frente, era bastante veloz — Aquí —Dije sin sentido alguno, expulsando de mis manos la misma iluminación. Era humano otra vez, gritaba sufriendo mientras ocultaba su rostro con sus palmas.

—Los canes de Pedro lo sostuvieron de sus cuatro extremidades, dejándolo expuesto, caso que aprovechó la Cazadora. Mientras se aproximaba con velocidad su mano derecha tomó vuelo desde detrás de su espalda, esperando a que la gigantesca hacha terminara de producirse a través de las luces multicolores. Al tener el arma alcanzó a darle un potente tajo en la panza, atravesando su dichosa "armadura" — Pagaras todo el daño —Susurró la chica. Con el cuerpo sangrando, A04 escapó vuelto oscuridad.

—Una silueta humana se produjo a unos pasos de nosotros, salía lentamente del suelo hasta tomar la forma del peliazul y su brilloso traje — Estoy perdiendo los estribos. Realmente no pensé que costaría tanto deshacerme de tres niños —Perdió su postura recta. Su rostro expresaba dolor, su mano derecha iba directo donde estaba la herida del hacha.

— Me quitaste a alguien muy importante... —Miré de reojo el cuerpo de la rubia, continuaba tirada en el suelo, aún no se movía — Desde luego ni idea de como me siento, ¿Verdad?. Ustedes no son personas, se han convertido en simples máquinas —En le momento que volteé a ver a mi amiga me vino a la mente nuestro primer encuentro, la impresión a primera vista.


~ Flashback ~

—Recuerdo varias cosas... Recuerdo que el día era bastante frío, el aire daba completamente en mi torso y enfriaba ambas de mis manos.

¿Cómo me sentía? Me hago la misma pregunta. Quiero pensar que estaba bastante triste, no podía creer lo sucedido en ese entonces, debería ser una pesadilla bastante mala, quería despertar.

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