Capítulo 31

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Sucesos por parte del Equipo "A"

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— Será la última vez que te vuelva a ver —El mexicano empuñó con fuerza la lanza de ramas. Se colocó delante de todos sus compañeros, estirando sus inmensas alas, del mismo material. De inmediato, se impulsó con su pierna derecha, avanzando levemente sobre el suelo.

— "Le va a dar en su madre" —Expresó el rubio, sacando sus ojos con una sonrisa. Acto seguido los otros dos varones voltearon a verle — ¿Qué? —Preguntó — Es algo que él me enseñó... Es como darle su merecido —Acarició su nuca sonrojado.

—Dos plantas puntiagudas seguían el movimiento de las manos de la mujer. En cuanto dirigió, con una mueca de molestia, ambos brazos hacia el chico de madera, la naturaleza respondió de igual forma — No es forma de dirigirse a una hermosa mujer, niñato.


No fue problema para él, cortó ambas vegetaciones en cuanto se acercaron, continuando con su viaje emprendido. Sin dudarlo, llegó hasta A05, clavando su arma en el estómago de la mencionada. En reacción de la herida, el chico fue expulsado de reversa con el poder de una enorme raíz.

Su cuerpo comenzaba a sangrar, no fue algo preocupante. Ella sabía con certeza que no tardaría más que un par de segundos en cerrar esa herida, y así fue, volvió a pertenecer a su estado inicial, como si nada hubiera sucedido. Su rostro era una simple sonrisa, manteniendo sus piernas cruzadas, su imagen lo era todo, o eso aparentaba.


— Necesitamos un plan para retener su curación —Sugirió Sergio. Estando los 4 reagrupados, otra vez — Supongamos que simplemente acelera el proceso de su sistema, ¿Si le llenamos de herida le será más complicado? En tal caso deberíamos atacar todos a la vez... —Su dedo índice y pulgar fueron a la barbilla, se encontraba pensativo.

— Eso, o ocasionamos una herida lo suficiente grave. Ya saben, pongamos a prueba si sus extremidades vuelven a unirse —Masaki planificó la segunda idea.

—El Minotauro soltó una carcajada — Eres un psicópata, humano. Pero, es algo que no puedo poner en duda. ¡El que traiga un brazo gana! —¿Y porqué no? Los brazos se movían al unísono que sus sirvientes, quizá podrían terminar con ella de esa forma.  


Los dos chicos alados se movieron al mismo tiempo por distintos lados, en zic zac, evitando las floras que se desplazaban, una por cada aliado que tenemos. Dos de las 4, fueron cortadas con las cuchillas que cargaban los raudos (El pelirrojo cargaba con dos cuchillas en su cinturón). Mientras que los de fuerza bruta se movían por tierra, defendiéndose de los presuntos ataques; A final de cuentas, decidieron apoyarse, inutilizando una de las floras y deshaciéndose con el hacha de la criatura mitológica. Para continuar con la segunda. 

La mujer de ojos verdes se intentó defender con más raíces creciendo detrás de ella, pero, unos imprevistos y musculosos canes de cuernos se encargaron de proteger a los demás. La armadura de madera se movía a la disposición de su creador, dejándole escupir y crear aliados.


Masaki llegó primerizo, asestando un golpe en el pecho de su rival, dejándole sin aire, rompiendo su postura, y aprovechando para, junto al Minotauro, tomarle de ambos brazos y dejarle expuesta. El dúo aéreo se puso en movimiento de inmediato, las dos pequeñas dagas del estadounidense se lanzaron por el cuello, al mismo tiempo que la gran lanza comenzaba a cortar uno de los brazos. A causa del inmenso dolor, el suelo de cemento que pisaban comenzó a romperse lentamente, unas plantas espinosas forzaron su salida. Comenzaron a rodear a mujer en forma de protección, separando a sus enemigos de ella.

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