Jamie...!

Capitulo 44.

Cuando fui a la reunión me aburrí un poco, pero yo estaba atenta ya que lo único que deseaba es que a alguien se le escapara algo sobre los verdaderos planes de Sergio, cosa que no sucedió y ahí me di cuenta que el grupo estaba bien entrenado. 

Al terminar la reunión me acerque a Sergio para invitarlo a la fiesta de cumpleaños de mañana (solo por tratar de hacer un buen movimiento) a lo que el me levanto las cejas.

-¿Mami y papi saben que iré? -pregunto apoyándose en una mesa que había detrás de el.

-Saben, pero no es que se interesen si vas o no. Es nuestra fiesta de cumpleaños, no les interesa quienes vallan mientras no haya tantos desastres. -dije.

-¿Se tendrá  que ir con regalo de cumpleaños? -Pregunto Max por detrás de mi.

-Tu no estas invitado Max y has caso cuando se te dice que no te acerques a menos que sea estrictamente necesario. Y no es necesaria tu presencia en esta conversación. -dijo Sergio a lo que Max le hizo caso y ser fue.

-Gracias Sergio. 

-Para eso estamos los compañeros de trabajo, aunque yo sea tu jefe. ¿A quien invitaras de aquí a parte de mi? -me pregunto.

-A Nina, es muy amable y amorosa,  a ustedes son los únicos que conozco, sin contar al orangután sin cerebro. -dije a lo que Sergio rió.

-¿No tienes problema si llevo a mi hermana? -pegunto.

-Mientras no se le ocurra quemar otro auto o la casa o cualquier otra cosa, ningún problema.

-Eso ya esta sanjado, ¿no ha hablado contigo? 

-No.

-Bueno, otro asunto por resolver.

Después de hablar con Nina para que fuese mañana y  me fui a casa, cuando llegue eran las 21.30 y entre a toda velocidad con un hambre feroz. Y a penas llegue preguntaron diferentes cosas para salir de dudas. 

-Por cierto, mañana vendra Sergio, Sara y Nina. -dije.

-¿La misma Sara hermana de Sergio? ¿Quien es nina? -pregunto Lucy.

-Si, la hermana de Sergio y Nina es una amiga que me hice haciendo la primera entrega cuando entre en todo esto. 

-¿Por que coño los invitaste? -pregunto Lucas un poco molesto.

-Primero no te vengas a enojar y segundo es solo un movimiento para tratar de llegar al fondo de todo esto un poco mas rápido.

-A pos si cierto. -dijo.

Terminamos de ver los últimos detalles para mañana mientras nos reíamos de cualquier tontera que se nos ocurría. Después nos fuimos a acostar y como no teníamos sueño comenzamos a comunicar por unos woki toki para pasar el rato. 

A la mañana siguiente estaban todos dormidos menos los adultos que estaban todos desayunando en al cocina.  Me senté junto a ellos todavía durmiendo sin poder procesar nada y sin reaccionar nada. Mi madre y mi padre me miraban fijamente y antes de que alguien pudiese decir algo reaccione abriendo los ojos como huevo frito, me levante de mi asiento y salí disparada de mi asiento subiendo las escaleras como loca.

Corrí por el pasillo hasta la habitación de mi hermano y abrí la puerta de un golpe saltando arriba de el como un conejo. 

-Feliz cumpleaños hermanito. -le grita.

Lucas quedo un rato sin reaccionar, recomponiéndose del susto que le di.

-¡¿Pero qué coño te ocurre sarnosa?! -me grito Lucas.

-Nada solo te quería desear un muy feliz cumpleaños al hermano mas hermoso del mundo.

-Tonta estúpida, ven acá para tu abrazo.

Después de que nos deseamos feliz cumpleaños nos quedamos acostados conversando, hasta que una manada de puercos saltaron arriba de nosotros dos.

-Diosito ayúdame, unos puercos nos atacan. -grite.

-Tonta, somos nosotros. -dijo Cami dándome un golpe en el brazo.

-Perdón puerquitos. -dije sobandome el brazo.

Nos cantaron el feliz cumpleaños y nos abrazaron, nos reímos un rato para después ir a comer el desayuno, después de todo ya eran las 10.35. 

Todos los adultos que habían en casa nos desearon lo mejor para este año, mientras nos entregaban nuestros regalos.

Al final todos los adultos me regalaron una radio nuevo para mi auto (ya que estuve mucho tiempo molestando con la bendita radio) y era justo la que yo quería una radio la cual tenia una pantalla por si quería poner una pelicula o ver diferentes archivos de lo que conectara a esta, tenia radio (obvio) y entradas para conectar el celular o un pendrive.

Lucas me regalo unas vans nuevas. Claudio me regalo un collar con tres hileras en el mismo, la hilera mas corta tenia un triangulo, la de al medio un circulo y la ultima un palito, que significaban las reliquias de Harry Potter. Cami y Simon me regalaron unas carcasas para mi celular bastante bonitas, una de Harry Potter, otra de un atrapa sueños y otra de color turquesa con unas piedras plateadas que sobresalían de esta. Jamie no me entrego nada, lo que supuse que mi regalo era el vestido con los tacones que me había entregado en otro día, en todo caso no estaba con el por su dinero ni por nada de eso. Agradecí a todos por los regalos obviamente.

Llegaron Lucia y Lucy mas temprano de lo que esperaba, cuando abrí mi regalo y lo abrí, era un llavero de una snitch dorada de Harry Potter y una polera de Hogwarts (Harry Potter). Hay que admitirlo, soy muy fanática de Harry potter.

Mientras avanzaba el día, nosotros avanzábamos en terminar los preparativos para esta noche. Mientras yo llegaba a donde estaban todos reunidos vi que faltaba Jamie, pero nadie sabía de el o por lo menos sabían mentir muy bien. 

Al paso de un rato tocaron la puerta, de todos modos iba a salir  a fumarme un cigarrillo cuando casi me caigo con una caja que había ahí, por estar mirando hacia arriba pensando que era una persona.

-¿Quien dejo esta caja acá? -grite hacia adentro.

-¿Qué caja? -preguntaron algunos.

-Nada, no se preocupen es mía. -dije mientras leía la tapa de esta.

Era una caja  muy monona con una gran rosa en la tapa, que decía: Para: Sofía Grey. Ábreme de inmediato. Intrigada deje los cigarrillos y el encendedor a un lado, mientras me sentaba en un escalón. Cuando destape la caja lo único que vi fue a un cachorro de dos meses aproximadamente  y de calle que saltaba hacia mis piernas, vi que tenia un collar y en teste tenia una carta, la abrí y comencé a leer.

"Por favor adoptarme, a mis dos hermanas y a mi nos encontraron tirados en la calle al lado de nuestra madre muerta, a mis hermanitas ya las adoptaron, pero a mi no. Por favor no vuelvas a tirarme a ese lugar, no sobreviviría sin ti.

¿Quieres ser mi mamá? Te daré todo el amor que tengo".

Deje la carta a un lado, para sonreír, tomar al perrito y ver que era una hembra. Comencé a pensar en algún nombre, mientras dejaba que la cachorra explorara el patio. Cuando encendí el cigarrillo apareció alguien por mi espalda y me abrazo.

-¡Jamie!¡Me asustaste! -dije, a lo que el río.

-¿Te gusto? -pregunto.

-¿Qué  me asustaras? Para nada. 

-Estoy hablando de la cachorra.

-Ahh, si, es muy bonita. -dije, quede mirando a la perrita, era una pequeña cosa negra, con calcetincitos blancos y con manchitas color café.

-Sabia que te gustaría.

-Gracias. -le dije dándole un beso.

-¿Pensaste en algún nombre?

-No se me ocurre nada.

-¿Que tal Charlie? -pregunto.

-Me gusta pero, ¿no es como Charlie, Charlie?

-Para nada. -dijo sonriendo.