Capitulo 48

51 3 0
                                    

A la mañana siguiente, fuimos a clases con toda normalidad. Riéndonos y aburriéndonos un poco en clases, cuando entramos a la última clase de la mañana a todo el equipo "de oro" se nos había olvidado imprimir los trabajos que teníamos que entregar para esa clase. Corrimos por casi todo el colegio casi atropellando a todo el colegio para poder llegar a la biblioteca e imprimir rápido y poder llegar casi a tiempo a clases. 

Cuando llegamos a la sala 104, el profesor ya estaba dentro con la puerta cerrada, así que decidimos poner cara de inocentes y tocar la Puerta. Cuando el profesor dijo "pase" abrimos la puerta y nos asomamos por esta para que nos viera el profesor.

-Última vez chicos, no quiero escusas para la próxima. ¿Qué les paso? -pregunto el profesor.

-Estábamos imprimiendo los trabajos y se nos paso la hora, lo sentimos. -explico Lucy. 

-Ok, al termino de la hora quiero todos los trabajos en mi mesa. -dijo antes de comenzar la clase.

Paso la clase de lo mas aburrida, hasta que por fin llego la hora de almuerzo, Sergio me pidió que si podíamos hablar por 5 minutos así que deje a los chicos avanzar para después seguirlos.

-¿Qué paso? -pregunte.

-Nada importante, solo quería saber como estas para el viaje. -dijo Sergio.

-Bien, estoy preparada. No me imaginaba que te preocuparas tanto por tus "trabajadores". -dije.

-Tengo que cuidar de mi apoyo. Recuerda que nadie debe saber de todo lo que sucederá. 

-Vaya, pensé que después de todo, ya confiabas en mi. 

-Y confió en ti, tenlo por seguro, solo te lo quería recordar. 

-Bueno, ¿Nina se ira conmigo? No la he visto hoy en los pasillos. -pregunte.

-Si, y si vino hoy, solo que ha estado corriendo de aquí para allá, quizá por eso no la has visto. Lo que si, cuando me la tope la note un poco extraña, ¿Sabes algo? -dijo Sergio. 

-No, no tengo idea  de lo que le ha pasado. Quizá sea por lo de su padre, recuerda que hoy se cumple un año de la muerte de el. -dije.

-Si, puede ser. Bueno, a la salida te esperare en tu auto para organizarnos bien, vamos a almorzar.

Al llegar a la mesa con los chicos me preguntaron que es lo que quería y les conté que era para un poco de organización. Lo que si no les conté lo de Nina, ellos no la conocían y tampoco era que les pudiese interesar. 

De la nada unos chicos comenzaron a pelearse frente a nuestra mesa, la pelea trataba sobre una chica y otras cosas mas a las cuales no preste atención, mientras ellos peleaban yo seguí con mi almuerzo, después de todo tenia mucha hambre. 

De un momento a otro uno de los chicos callo encima de nuestra mesa rompiéndola por la mitad, haciendo que mi botella de vidrio se quebrara y se le enterraran algunos pedazos en el cuerpo. Nunca había estado delante de algo así y lo peor es que no había terminado ni la mitad de mi almuerzo, o sea tenia una hambre de los mil infiernos. 

Me quede pegada mirando al chico, mirando como mucha sangre le salia de las heridas mientras trataba de ocultar mis colmillos, sin saber si salir corriendo o ayudarlo. No podía reaccionar ni por la hambre ni por el chico que tenia al frente desangrándose, sentía que mis amigos un poco histéricos se movían al rededor de mi pero no les preste atención. Sentí como los colmillos se me comenzaron a asomar debajo de mis labios, pero en ningún momento los abrí. Después de un rato ahí no aguante más y me le iba a lanzar cuando aparecieron unos enfermeros de una ambulancia, mientras Jamie me tomaba en sus hombros y salia corriendo hacia el estacionamiento de el colegio con los chicos siguiéndonos por detrás.

Llegamos a mi auto y por suerte lo deje un poco escondido, Jamie me dejo caer al suelo, ahí me tire encima de Jamie envolviendo mis piernas en su cintura mientras le mordía el cuello y le succionaba su sangre. Cuando me soltaron del cuello de mi novio y me estamparon en mi auto, cuando reaccione me di cuenta de lo que había hecho, arrepintiéndome de no haber podido controlarme. 

-Jamie... Yo... Yo lo sien... -estaba diciendocon los ojos un llorosos hasta que Jamie me corto.

-Chicos se pueden ir por favor, necesito hablar con So y mi hermano. -dijo Jamie, me miraron con preocupación pero se fueron sin poner problemas.

-Les voy a dar un poco de espacio para que hablen. -dijo Claudio cuando los chicos ya se habían alejado.

-Lo siento, no sabia lo que hacia no reaccione hasta que fue tarde. -dije mirando hacia mis pies.

-Estoy molesto contigo, pero no por lo que acabas de hace, si no por otra cosa, ¿Quieres saber por qué? -dijo acercándose a mi para levantarme la cara, a lo que yo asentí.

-Estoy molesto porque me mentiste en la mañana, me dijiste que si habías desayunado cosa que no fue así, por eso reaccionaste así, porque no te había pasado antes. 

-Lo siento, sabemos que no sabíamos que esto ocurriría. Deberías estar enojado conmigo porque te ataque. -dije.

-Mi cuello ya sano, espero que no vuelva a ocurrir esto. Te enseñare como controlarte, no quiero que tengas que pasar por esto de nuevo. -dijo.

-Pero a Lucas no le paso, ¿Por qué? -pregunte.

-Porque Lucas tiene un muy buen auto control y le hemos enseñado a que se controle, mientras tu ibas a lo de Sergio. 

-Ahh, que interesante. A todo esto, yo también debería estar enojada contigo. -dije.

-¿A Si? ¿Y por qué? -pregunto.

-Porque anoche me dejaste sola. -dije haciendo pucheros.

-Pero eso se puede arreglar hasta el domingo.-dijo acercándose un poco mas a mi para darme un beso.

-De hoy no te salvas. -le dije mientras Claudio se acercaba.

Cuando nos devolvimos al colegio, después de haberme tomado una bolsa de sangre dentro de una botella de bebida grande del Mc Donald's todos ya habían entrado a clases, Claudio se separo de nosotros para ir a Clases mientras que íbamos a la de nosotros.

Jamie...!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora