Jamie...!

Capitulo 52

Ya medio día y estábamos cerrando la casa en donde estábamos. No sabía lo que había hecho Sergio con el cuerpo, pero en este minuto ya no me interesaba. 

-Te llamare cuando llegue a mi casa para ver como estas. Maneja con cuidado, ¿si? -dijo Sergio.

-Gracias tu igual, creo que me equivoque al pensar tan mal de ti. -dije.

-Bueno, deberías hacerlo, después de lo que hice hoy. -dijo. 

-Sinceramente no, después de todo seremos Enoks, ¿no?

-Bueno si. Ya vamonos. -dijo Sergio dándome un pequeño abrazo para  después dejarme subir a mi auto.

Cuando entre a mi auto, encendí el motor para salir por el camino de tierra,  puse música para tratar de relajarme un poco y después de un rato eterno por fin llegamos al cemento, encendí un cigarrillo para tratar de distraerme mientras le hice señas a Serio por si quería adelantarme que lo hiciera cosa que me hizo caso. 

En todo el camino pensé en lo que había pasado y si quería que nadie sospechara tendría que esforzarme en que nada de mis actos pareciera extraño, sabia que en algún minuto tendría que contar la verdad pero si quería acabar lo que había comenzado y más aun ahora que Sergio me había perdido que lo ayudara a terminar con todo esto. 

Cuando vi la hora ya eran las 14.30 de la tarde o sea me quedaba una hora mas para manejar y ya me estaba doliendo el trasero de tanto estar sentada. Vi queme acercaba a una gasolinera, así  que aprovecharía de echarle a mi auto, no quería quedarme con la pana de el tonto.

Por suerte estaba casi vacía lo cual agradecí ya que lo único que quería era llegar a casa. Y cuando por fin tome la carretera de nuevo, apreté el acelerador un poco mas profundo que antes para ahorrarme un poco mas de tiempo. 

Llegue por fin a casa y yodo estaba en mucho silencio para ser casi las 15.30 de la tarde, vi que Charlie estaba jugando en el patio y se me acerco moviéndome la colita con una pelota de tenis en el hocico, me quede jugando con Charlie mientras seguía fumando otro cigarrillos. No entraría a casa hasta escuchar señales de vida.

De la nada siento muchos vidrios  romperse desde la cocina y siento a mi madre gritar, esa era mi señal  para entrar. Cuando entre vi a Jamie, Claudio y Lucas correr de todos los adultos de esta casa. Vaya no sabía quien era el mas inmaduro en ese tumulto de gente corriendo, entre a la cocina ya que tenia mucha hambre y tome una bolsa de sangre, mientras abría la bolsa me apoye en el marco de la puerta para ver el espectáculo que me estaban regalando. 

En un minuto me sentí invisible y llegue a pensar que no me habían extrañado, pero mi madre de la nada se dio media vuelta y me vio, corrió a abrazarme.

-Te extrañamos. -me dijo mientras todos se acercaban.

-Se nota. -dije sarcástica.

-¿Porqué lo dices? -pregunto Claudio.

-Llevo parada acá mas o menos 15 minutos. -dije. 

Cuando todos terminaron de abrazarme, fui a mi auto a buscar las cosas que les había traído. Y aprovechar de ir a buscar mis cosas, les pedí a mis tres esclavos, o sea Jamie, Claudio y Lucas, que me ayudaran a entrar todo. Les pedí que se sentaran todos en la sala de estar ya que no iba a estar corriendo detrás de todos para entregarles las cosas. 

-Muchas gracias esclavos míos. -les dije a los chicos mientras terminaban de dejar las cosas.

-So, por favor. -dijo mamá.

-Pero míralos, podríamos ocuparlos para trabajo forzado. -dije mientras los chicos reían.

Les entregue un macetero con unas lindas flores a mamá y a Leticia, y a todos (incluyéndome) les pase unos llaveros para las llaves de los autos, de esas que cuando lo tienes encendido y se te pierden las llaves comienzas a silbar y suena. Ya que por una rara razón siempre terminan en lugares un poco extraños.

Después de eso subí a ver mi bolso para ver mi ropa que tenia limpia y cual tenia sucia, Jamie me acompaño para ayudarme. Después  de todo de verdad que estaba cansada y lo único que quería era dormir, pero nos llamaron para ir a almorzar y ahí quedaron todas mis ganas de dormir.

-¿Qué es lo que paso el fin de semana So? -pregunto papá mientras comenzábamos a almorzar.

-Bueno, llegamos el viernes y con Nina fuimos a dar unas vueltas, aprovechando de comprar algunas cosas, el Sábado fuimos a 2 reuniones bastante cortas, fuimos a hablar con unos tipos bien malotes después  de las reuniones, Nina se fue el Sábado en la noche por unos problemas de sus madre, otro compañero del equipo se fue hoy muy temprano. Converse con Sergio y parece que el no es el asesino al que buscamos, el dice que es otra persona y quiere que Nina y yo lo ayudemos. -dije evitando contar lo de Max.

-¿Y cómo podemos creer en eso que dice Sergio? -pregunto mamá.

-Eso lo tengo que averiguar, ¿no crees?-dije.

-¿Cómo se llama el otro chico que dices tu? -pregunto Hector.

-Lex. -dijo Jamie salvándome el pellejo, ya que no sabia que responder.

-¿Y tu como lo conoces? -pregunto Leticia a Jamie.

-Porque So me ha hablado de el. 

Seguimos conversando mientras terminábamos de almorzar, y mi paz se termino cuando Lucy mando un Whatsapp al grupo que teníamos entre todos para acordarnos de imprimir el trabajo individual para mañana de Lenguaje. 

-Chicos, ¿Hicieron el trabajo? -pregunte. 

-¿Qué trabajo? -preguntaron los 3 al mismo tiempo. 

-El que es para mañana de lenguaje, ese de la película en clases. Lucy acaba de mandar un mensaje. 

Nos quedamos mirando los tres antes de salir corriendo a nuestras habitaciones para ir a buscar las computadoras e ir a sentarnos a la sala de estar para poder ver la película de nuevo y hacer el trabajo.