I. The Calling ©

Capítulo 41.

41

OLA DE PENSAMIENTOS

—¿Qué sucedió?

Ivar se deja caer en el respaldo del sillón y observa el fuego de la chimenea. Sus joviales ojos ahora lucen más viejos de lo que el hombre aparenta.

—Cuando la Vala selló a Fenrir y lanzó el primer hechizo sobre Aren y Arie, pasaron años antes de que aquellos que maldijeron a Fenrir en un inicio lo hicieran con sus hijos. Es ahí, entonces, que la vieja Vala lanza el segundo hechizo, el que asegura a las reencarnaciones. Mientras, Asger y Kaysa crecieron, y los genes de los Cambiaformas empezaron a expandirse. Hasta que Aren y Arie fueron condenados como su padre, y todo cayó en manos de Asger y Kaysa. Y el curso del hechizo se volvió de 18 años... —Ivar se detiene y aclara la garganta antes de regresar sus ojos hacia mí—. Desde entonces, las almas regresan al mismo seno de sus linajes. Asger siempre renace en un niño de su propia sangre y Kaysa también. —El Primero me sonríe con nostalgia—. Gira la página —indica.

Obedezco y paso de página en el álbum de fotos. Allí se muestran dos árboles genealógicos con nombres, fechas y lugares que van desde Aren y Arie, pasando por Asger y Kaysa, y muchos, muchos otros más, hasta que el linaje de Kaysa se detiene en una línea en 1926. Mientras que en el de Asger, la última línea termina con el de Jera.

—Así que lograron mantener un registro de las reencarnaciones... —Ivar asiente—. Hasta que alteraron el hechizo de Kaysa.

—Después de eso fue difícil seguir con su registro. —Señala el final de la página—. He logrado recolectar un par de nombres a medida de que las reencarnaciones fueron apareciendo en diferentes partes del mundo.

—¿Por qué tiene un registro? Sé que la historia es importante, pero... ¿esto no debería estar en la biblioteca de Los Primeros?

—Porque siempre ha estado en mi familia y ha sido nuestro deber. De seguro Kodran también tiene uno.

Me lo quedo observando. ¿Está diciendo lo que creo?

—La familia de Jera desciende de Asger, ¿cierto? —Ivar asiente, divertido por mis divagaciones—. La familia que desciende de Kaysa...

—La estás mirando, niña —responde, confirmando mi teoría.

No puedo evitar abrir la boca del asombro.

—¿Es en serio?

Ivar se carcajea.

—Toda mi familia proviene de su linaje. Mi tía, la hermana menor de mi madre, fue una reencarnación... —El Primero sonríe con algo de tristeza en la mirada—. Y la última que tenía las memorias de Kaysa, fue mi propia hermana mayor. Se llamaba Seren.

Me quedo petrificada en mi lugar. Ivar de verdad había vivido muy cercanamente con las reencarnaciones pasadas, al menos, antes de que se perdieran por todo el mundo. Se me oprime el pecho; ahora comprendo un poco el aire de familiaridad que el Primero me da, por alguna razón, al estar relacionado tan estrechamente con Kaysa, lo siento también. No puedo explicar cómo, pero supongo que es parte de todo el misterio que rodea los hechizos y a las reencarnaciones.

Además, el propio Ivar me recuerda a mi difunto abuelo.

—Eso suena... muy bonito —murmuro—. Haber compartido con alguien que sabía tanto sobre su propio linaje y del mismo mundo también... —Dejo salir un suspiro—. Lo siento, quisiera poder hacerle justicia al recuerdo de su hermana.