1.(Parte del prólogo)

4.6K 366 166
                                    

El de mechas azules vio con cierta tristeza como la azabache se marchaba corriendo detrás del auto del oji-esmeralda mientras gritaba su nombre...

Sonrió levemente y respiró hondo para luego volver a entrar hacía la pista de patinaje que hace varios minutos ya había abandonado...

Se supone que regresaría a casa en metro en compañía de la de coletas sin imaginar que ella decidiría ir tras el rubio...

Mientras entraba al lugar iba preguntándose...

"¿Por qué simplemente la había dejado ir?"

Se maldijo un poco...

Su madre desde que era niño le había inculcado a dejar la felicidad de los demás por encima de su propia felicidad...

Quizá era eso...

Quizá quería lo suficiente a la franco-china como para dejarla ir...

Quizá era demasiado cobarde como para decirle la verdad...

Pero todo quedaba en un "quizá"...

Caminaba metido en sus pensamientos que no notó que cierta rubia se encontraba sentada con las piernas cruzadas en una de las bancas...

《¡Cuidado!》

Escuchó cuando ya se encontraba en el suelo boca abajo...

Giró su cuerpo entero con ayuda de sus brazos y los ojos cerrados mientras tocaba su frente justo en el lugar del golpe que le había propinado la caída...

《Lo siento mucho, no vi que venías, ¿estas bien?》

Abrió los ojos con lentitud para encontrarse con una chica parada frente a él con la mano extendida, ella tenía unos grandes ojos zafiro y cabello rubio sujeto en una coleta con una mirada que mostraba preocupación...

La fama de aquella joven había incrementado rápidamente durante esos días en París especialmente porque se trataba de la nueva heroína Queen Bee...

Así que inmediatamente supo quien era, miró la mano de la chica y la tomó...

Ella jaló de él ayudándolo a levantarlo seguido de su mochila...

《No te preocupes... Estoy bien, no hay problema》

La oji-zafiro miró la frente del chico y lo hizo tomar asiento en las bancas...

《Espera aquí...》

Se fue y en cuestión de unos minutos regresó con una pomada en manos, la abrió y comenzó a untarla sobre la zona del golpe mientras el azabache soltaba un ligero chillido de molestia...

La Bourgeois lo miró mientras terminaba de poner la pomada para luego cerrarla, limpiarse las manos y sentarse al lado del Couffaine mientras ponía el recipiente en la banca de a lado junto a su bolsa...

—Perdón, en serio no vi que venías... -mencionó apenada por el golpe en la frente del chico que ahora se comenzaba a inflamar un poco-.

—Descuida, sólo fue un golpe, además... Probablemente mañana ya no lo tenga... Por cierto... Gracias por ponerme de aquel ungüento... -sonriendo un poco-.

—No fue nada...

—Así que tu eres Chloé Bourgeois... La nueva heroína de París, ¿eh?

—Algo así... Se hace lo que se puede...

Skating for you. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora