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Lo sobrante del día pasó y la noche transcurrió dando paso a la mañana siguiente...

En la cafetería del Colegio Françoise Dupont se encontraba un tercio de amigas conformado por un par de rubias y una azabache de puntas moradas, platicaban entre sí aunque una de ellas se encontraba "ausente" con su mano sosteniendo su rostro con una tonta sonrisa mientras suspirar...

‹Chloé... Bourgeois... ¿Chloé, estás bien?... ¡Chloé!›

La Bourgeois al escuchar como la Lavillant gritaba su nombre no pudo evitar soltar un grito ahogado de susto, llevando al instante su mano a su pecho, comenzando a respirar rápidamente para tratar de normalizarse...

Chloé-¡Por amor a las abejas, Rose!... Me asustaste
Rose-Lo lamento...
Chloé-¿Qué sucede?... ¿Por qué me gritas?
Rose-Es que desde hace unos segundos te estoy hablando y no me respondes...
Chloé-Lo siento... Estaba algo distraída...
Rose-Si me di cuenta... ¿En qué pensabas?
Juleka-Corrección... ¿En quién pensabas?

La de coleta no pudo evitar sonrojarse para luego inflar los cachetes y negro con la cabeza a la par que cruzaba sus brazos para luego decir con indiferencia...

≤En nadie y en nada estoy pensando, ¿okey?≥

El par de mejores amigas se vieron entre sí para luego la Couffaine hablar...

‹Vaya... Entonces que coincidencia tienen mi hermano y tú...›

La Bourgeois no pudo evitar abrir grandemente los ojos para luego preguntar con algo de pena...

Chloé-¿En serio?...
Juleka-Si
Chloé-¿Por qué dices eso?
Juleka-Bueno, pues ayer mi hermano había salido con Marinette, pero cuando regresó a la casa, fue algo... ¿Raro?
Chloé-¿A qué te refieres con "raro"? *haciendo comillas con los dedos*
Juleka-Bien, les contaré

-Un día pasado-

El de mechas azules llegaba con una gran sonrisa a su casa y sus mejillas estaban teñidas de un carmesí muy lindo, lo cual le daba un aspecto "raro" al Couffaine...

Lo primero que hizo al llegar fue soltar un gran suspiro, como aquellos de las caricaturas, si de esos que solo alguien enamorado puede hacer...

El de mirada azul cerceta no pudo evitar ir directo a la Sala y tomar asiento en un sillón mientras sacaba la libreta en la cual escribía sus canciones para entonces ponerse a escribir sin pausa alguna...

Realmente estaba inspirado.

Pronto su madre salió de su camarote en dirección a la cocina cuando se percató de la presencia de su hijo cosa que le sorprendió pues no había notado el momento en el cual él había llegado...

<Hasta que llegaste hijo... Cuando tu hermana me dijo que habías salido con la esta chica... Emmm... Marinette, pensé que tardarías si acaso una hora, pero por lo visto tardaste más... Pues ¿qué tal te fue?, ¿pasó algún incidente?>

Cuestionó la mayor sin recibir alguna respuesta por parte del guitarrista quien seguía escribiendo lo cual llamó la atención de la de cabellera gris quien se movió un poco para ver que hacia su hijo y al verlo simplemente negó con la cabeza para comenzar a hacer sus cosas o al menos hasta que la de mechas moradas entrara a la sala y se sorprendiera un poco al ver a su hermano ahí...

Juleka-¿Y tú?... ¿En qué momento llegaste?... ¿Luka?
Anarka-No lo interrumpas, está en proceso creativo
Juleka-¿En que momento llegó?
Anarka-No lo sé, cuando vine para acá, él ya estaba ahí
Juleka-¿Y no te dijo nada?
Anarka-Ni siquiera me hace caso...
Juleka-Okey... Esperemos a que termine para preguntarle

Dijo y comenzó a caminar hacia su madre para luego de un par de minutos observar como el chico se paraba rápidamente e iba a su camarote bajo la mirada confundida de las Couffaine...

Juleka-Como que está algo raro, ¿no?
Anarka-Si, más de lo normal
Juleka-¿Crees que le haya ido mal con Marinette?
Anarka-No, con la sonrisa que se carga no lo creo
Juleka-Oh no... ¿Crees que entre ellos haya pasado algo?

Cuestionó con un poco de temor a que su madre afirmara su respuesta, pero su sorpresa fue mucha al recibir una negativa de su parte...

Anarka-No, de eso estoy segura, a tu hermano le gusta la señorita Bourgeois, eso es más que notorio...
Juleka-Pero él salió con Marinette
Anarka-Quizá hubo un ataque de Akuma donde las víctimas sonreían estúpidamente y es probable que tu hermano haya sido víctima
Juleka-¿No se supone que Ladybug arregla todo?
Anarka-Pudo haber sido una excepción... Porque se que si esa sonrisa se debiera a una chica, definitivamente se debería a Chloé... No hay más opciones...
Juleka-¿Entonces piensas que él está así por Chloé?
Anarka-Así es, si no es porque quizá se encontró con alguien que admire mucho o consiguió un paquete de cuerdas nuevas para su guitarra, no encontraría más razones para verlo así...
Juleka-Puede ser...
Anarka-Si, bueno, ya que estas aquí... Ve a decirle a tu hermano que venga a comer, que de seguro solo desayunó en el colegio
Juleka-Claro

La bajista caminó hacia el camarote del de mechas azules y al llegar no pudo evitar sorprenderse al ver como su hermano se encontraba acostado en su cama mirando al techo mientras soltaba un gran suspiro y una sonrisa se colaba por su boca a lo que no pudo evitar tomar una foto antes de gritarle para atraer su atención...

-Fin del recuerdo-

La Couffaine terminó de contar su recuerdo antes de tomar su celular y enseñarles la foto a las dos rubias de las cuales una se sonrojó en sobremanera mientras la otra reía cómplice...

Rose-Definitivamente Luka esta loco por alguien
Juleka guardando su celular-Ni quien lo dude, ¿alguna idea de quien, Chloé?
Chloé-No tengo ni una remota idea... Yo me quedé que él quería a la pana-... Quiero decir, a Dupain Cheng y por la misma razón ayer tuvo una cita con ella
Juleka-Si, claro... Cuando la cita inicial iba a ser contigo mucho antes que Adrien comprometiera a Luka
Chloé-No era una cita
Juleka-Ah, ¿no?... ¿Entonces que era?
Chloé-Era... Era... Era una salida de amigos, eso era
Juleka-Ajá, ¿y luego?

La de mirada azul zafiro comenzó a pensar en que decir y que fuera convincente cuando de pronto sus pensamientos se vieron interrumpidos al sentir un par de toques en su hombro y girar el rostro para encontrarse con la pelirroja...

«Hola, Chloé... ¿Podemos hablar?, por favor...»

Skating for you. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora