Trague fuerte. Esto sería muy difícil. Camine despacio hasta llegar frente de ellos. Dios dame coraje.
—Quiero pasar ¿Me dan permiso?
—¿Donde estabas?— ignoro mí pregunta —Te estuve llamando y no contestaste.
—Christopher en serio no tengo ganas de hablar— lo mire sería —Quiero darme una ducha y cenar para poder ir a descansar. Fue un día largo.
—Y será aún más largo si no me dices que hiciste— su semblante estaba serio —¿Estuviste bebiendo? Pensé que lo habías dejado.
Mierda. Este día me la pasé repitiendo esa palabra.
—Solo un poco.
—¿Solo un poco? Hueles a alcohol y se nota a kilómetros lo ebria que estás.
Y tenía razón. Arrastraba un poco las palabras y me sentía mareada. Pero aún así podía mantenerme en pie.
—No estoy ebria— lo contradije.
Los borrachos siempre decimos la verdad. Menos cuando nos preguntan si estamos ebrios. Siempre lo vamos a negar. Amamos el alcohol.
—¿Quién era el chico que estaba contigo?— pregunto Logan apretando la mandíbula.
La pregunta que rondaba mí cabeza era ¿Qué demonios hacen estos dos juntos?
Algo pasó y no te enteraste por andar de borracha.
Tú cállate.
—¿Y bien? ¿No vas a responderme?— me miro mal.
—Es un amigo, se llama Will— respondí normal.
Logan apretó más su mandíbula, si es que eso era posible, parecía que en cualquier momento se le rompería de tanta fuerza que ejercía —Y supongo que sigue viviendo en Los Ángeles.
Esperen ¿Que?
—¿Cómo sabes que vive ahí?— pregunté entre confundida y divertida. Alcohol deja de hacer eso. Apretó sus puños, se dio la vuelta y se fue adentro dejándome sorprendida.
Luego un vago recuerdo vino a mí mente.
<<Un chico hermoso, se llama William, es alto, rubio y con ojos azules, habla español y vive ahora en Los Ángeles.>>
Mierda destino. Tu sí que me odias. Las casualidades no existen, esto es una conspiración del universo.
Empecé a reírme como la loca desquiciada que era. Esto debe ser una jodida broma.
—Será mejor que te des una ducha y te recuperes, en un rato servirán la comida— hablo serio Christopher, había olvidado por completo su presencia. Se dio la vuelta pero lo detuve.
—¡Chris!— me miró aún con su rostro enojado.
—¿Qué?
—¿Crees que Logan siga enamorado de mí?— ladee la cabeza —Porque yo lo sigo queriendo.
Suspiró negando —Yo creo que estás borracha y que ese chico aún te ama pero eres demasiado idiota para notarlo— relajo sus facciones y sonrió —Pero descuida, mañana no recordarás lo que dijiste aunque me encargaré de recordarte que aceptaste tus sentimientos.
—¿Por qué harías eso?— lo mire mal —Eres un mal futuro esposo.
—Lo se— se acercó a mí —Pero soy un buen mejor amigo.
—¿Qué ganas siendo un buen mejor amigo si tu prometida te dice que ama a otro?— pregunté confundida. La verdad era que ya no controlaba mí boca, las palabras salían solas.
—Gano tu sinceridad y saber que al menos tú aún tienes la posibilidad de amar a alguien que tiene tu corazón y ser feliz— bajo la cabeza.
—Nunca me dijiste quién tiene tu corazón. Tampoco me la presentaste.
—Algún día te llevaré al cementerio para que la conozcas— en ese momento quise volver el tiempo atrás y evitar haber preguntado.
—Yo... yo lo siento, no sabía nada— bajé la cabeza —No debí preguntar.
—No te preocupes, tarde o temprano lo ibas a saber— sonrió triste —No se pueden ocultar los sentimientos para siempre.
Lo mire sorprendida —¿Aún la amas?
—Una vez leí que el primer amor durara para el resto de la vida, aunque sea solo en recuerdos— una lágrima se deslizó por su mejilla —Y creo que es verdad.
Me quedé pensando en sus palabras. No tenía idea de todo esto. Quizás sus consejos de que volviera con Logan y lo perdonara era un simple reflejo de lo que él hubiera querido hacer.
—Sabes, nunca se lo dije a nadie, excepto a Bastian— limpio su mejilla —Pero yo era una mierda de persona, en la preparatoria siempre fui un estúpido mujeriego que no valoraba nada hasta que conocí a Lucy. Ella era distinta a las demás. Era amable y cariñosa. Me hacía ver el mundo de otra manera, poco a poco me di cuenta que me había enamorado. Fue algo nuevo para mí. A los meses de que empezamos a ser novios le diagnosticaron cáncer en los pulmones. Fue duro para ambos. Yo no quería perderla. Ella me hizo prometer que ya no sería malo, que trataría bien a las personas y sería amable. Por eso soy como me conoces ahora, porque ella me lo pidió y siempre voy a cumplir su voluntad— yo también empecé a llorar —Me dijo que cada vez que yo ayudará a alguien ella estaría presente a mí lado sonriendo orgullosa de mí. Tú eres mí mejor amiga, como una hermanita. Se que eres distinta a mí, pero siento como si debiera ayudarte a cambiar, como Lucy lo hizo conmigo. Yo la ame mucho y aún lo hago. Estoy agradecido con el destino por haberla cruzado conmigo. Pero ella ya no está aquí, y la extraño.
—Quizas su tiempo en este mundo se haya acabado pero siempre vivirá en tu memoria.
—A veces creo que eres más tierna estando borracha— ambos reímos con lágrimas en los ojos —Logan no es tu primer amor, pero si el amor de tu vida, no lo dejes ir.
—Quizás yo haya cambiado de vida— trate de sonreír.
—Lo dudó mucho— acarició mí mejilla —Pero descuida, cuando te des cuenta que tu vida no cambio y que el amor no se puede ocultar yo te ayudaré a ser feliz.
—Gracias y perdón por darte tantos problemas— lo abrace.
—Me gustan los desafíos— rió y me cargo como a una princesa —Pero ahora mismo apestas así que te irás a bañar.
—Esta bien— sonreí.
—Cuando mañana despiertes no olvides lo que te dije— empezó a caminar conmigo en brazos.
—Prometo no hacerlo— levanté mí mano derecha —Te quiero Chris.
—Y yo a ti, pequeña borracha— dejó un beso en mí frente.
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Nadie Se Mete Conmigo #2
Novela JuvenilDespués de un año de no saber nada de Stanford y de los chicos que habitan ahí, mi vida cambió completamente. Ya no más niña tonta. Ya no más nerd débil. Ya no más juguete de nadie. Ahora cambié, y con mis nuevos amigos nos convertimos en los reyes...