Capítulo 60

3.8K 273 19
                                    

—¿Irás a verme?— está era la quinta vez que me lo preguntaba en el día.

—Ya te dije que si, Kyle— rodé los ojos —Chris ya fue por nuestro hijo e iremos juntos.

—¿Me apoyaras a mí?— pregunto preocupado.

—Siempre lo hice— respondí obvia —¿Por qué no lo haría hoy?

—Tal vez porque es la final y me toca un partido difícil contra el equipo donde juega un viejo amigo tuyo que ahora parece que se reconciliaron y pienso que lo prefieres a él— bajo la cabeza y no pude evitar sentir ternura.

—Kyle— levanté su rostro con mis manos —Tanto Noah como tú son mis amigos, los voy a apoyar siempre y no quiero que pienses que prefiero a uno porque no es así. Yo no tengo favoritismo entre mis amigos y jamás pero jamás los dejaría de lado ni porque estuviera el amor de mí vida pidiéndome que lo hiciera— él me sonrió —Aunque dudo mucho que Eddie Resmayne sepa que existo como para pedirme eso.

—¿Y ese quién es?— abrí la boca indignada —Igual no creo que sea tan lindo cómo para sufrir por él.

—Haré de cuenta que no dijiste eso— lo mire mal —Vamos antes de que te mate.

El río —Siempre logras calmar mis nervios— beso mí frente —Te debo tanto— tomo mis manos —Hiciste mucho por mí, apoyaste mis sueños, me ayudaste a perseguirlos sin abandonar lo que más amo que son ustedes. Eres una buena persona Madison Aylen. No dejes que te hagan creer lo contrario.

—Ello no creen eso y no me perdonan del todo— bajé la cabeza —Ya es muy tarde para recuperar lo que teníamos.

—Las situaciones que te puso la vida las enfrentaste como te pareció mejor, a los demás quizás no les haya gustado pero fue lo que pudiste hacer y si ellos no te comprenden, no merecen tu amistad— mis lágrimas amenazaron con salir —Debes abrir tu corazón, perdonarlos y dejar que te perdonen.

—Gracias Kyle— lo abrace —Eres un buen amigo.

—Eres muy importante para mí— susurro en mí oído —Te dedicaré todas mis anotaciones.

—Tus amiguitas plásticas se enojaran mucho— bromee.

—Ellas no me interesan— sonrió —Yo solo tengo dos mujeres en mí vida, mí madre y tú. Siempre las pondré por arriba del resto.

—Menos mal, no tenía ganas de pelear con alguna zorra— rió con mí comentario —Tu solo eres MÍ amigo.

—Eres muy celosa— beso mí mejilla —Bien, es hora de ir a prepararme.

—Lo harás bien— toque su hombro —Eres el jugador más perfecto que he conocido.

—Seguro le dirás lo mismo a Noah— rodó los ojos.

—Claro que no, Noah es bueno pero siendo sincera creo que tú eres mejor— me encogí de hombros —Pero eso no quiere decir que siempre será así, quizás con un poco de entrenamiento vaya a superarte. Confío mucho en la convicción de mí amigo, hará lo que sea por ser el mejor así que no bajes los brazos.

—Hare que estés orgullosa de mí— sonrió para salir corriendo a los vestuarios.

Ya estoy orgullosa de ustedes y siempre lo estaré, pase lo que pase. Son lo mejor que me pasó.

[...]

—¿Qué haces aquí?— pregunto confundido.

—¿Acaso no puedo venir a desearte suerte?

—Pensé que solo lo harías con Kyle, él es tu amigo— note un poco de tristeza en su voz —Creí que lo elegirias.

—Tu también eres mí amigo Noah— tomé asiento a su lado —Tal como le dije a Kyle hace un rato, ambos son mis amigos y no tengo preferencia por uno u otro.

—Pero hoy deberás elegir a uno y apoyarlo— me miró fijamente.

—Yo los apoyo a los dos— respondí simple —Quisiera verlos feliz siempre.

—¿Aún sabiendo lo que te hice?

—No hicieron nada Noah— suspiré —Todos cometemos errores y debemos saber aceptarlos y perdonarlos. Quizás yo fui un poco egoísta con eso. Y ahora estamos de esta manera, divididos. Pero no todo fue tan malo— le sonreí —Gracias a lo que pasó pude conocer a gente maravillosa, personas realmente agradables que estoy feliz de tener a mí lado.

—¿Los quieres mucho?— asentí con la cabeza —¿Más que a nosotros?

Sonreí —No Noah, yo nunca podría decir que quiero a uno más que a otro. Todos tienen un poquito de mí amor y si lo mides, es del mismo tamaño— hice gestos con mí mano —Cada uno representa una parte importante de mí vida y no quisiera perderlos, no otra vez. Nunca digas que yo voy a querer más a mis nuevos compañeros de fraternidad, porque tanto a ustedes como ellos son importantes. Tarde un poco en darme cuenta de eso.

—Entiendo— sonrió —¿Crees que Kyle sea mejor?

—Creo que tiene lo que se debe tener para ganar— respondí tratando de medir mis palabras —Cordina bien sus movimientos, sabe trabajar en equipo, conoce a sus compañeros. Creo que puede ganar el partido. Es el mejor jugador que conozco.

—Gracias por ser sincera conmigo— hizo una mueca y reí.

—También creo que puedes representar una grave amenaza para él— me miró sorprendido —Según recuerdo jugabas más o menos bien, pero he escuchado que has mejorado. Pienso que sí te esfuerzas un poco más, trabajas duro y ayudas a tu equipo, puedas llegar a pelear por el puesto de mejor jugador. Se que puedes superarte.

—¿Crees en mí?

—Por supuesto y por eso le he advertido a Kyle que no se confíe demasiado— sonreí —Te conozco lo suficiente como para saber que no dejaras de competir.

—Nunca lo haré, prometo llegar a ser el mejor, así como Kyle— parecía entusiasmado.

—Será difícil derrotarlo pero todo puede pasar. Necesitas tener más unión con tu equipo, este es un juego en donde debes tener aliados— me puse de pie.

—Debería odiarte por decirme que otro es mejor que tú amigo— él también se levantó —Pero en vez de eso estoy agradecido, porque me has motivado a intentar superarme y me has hecho dar cuenta que siendo egoísta y mandón no llegaré a ningún lado.

—Pues, fue un placer haber servido de algo— me abrazo.

—Gracias, eres una buena amiga— susurro en mí oído —Perdón por todo.

—Ya no hay nada que perdonar— cerré los ojos disfrutando del momento.

El partido fue realmente entretenido. Ambos equipos parecían muy motivados por ganar. Hasta el final nadie se rindió y ¿Saben que fue lo mejor? Al cansarse de alargar el tiempo esperando un desempate dieron por terminado el torneo dejando el primer puesto compartido por ambos equipos.

Estaba feliz con ese resultado. Kyle estaría orgulloso de si mismo al no rendirse por lo que quiere y Noah lo vería como una estimulación para crecer en su carrera. Mis amigos estaban felices, no podía pedir nada más.

Nadie Se Mete Conmigo #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora