—¿Por qué te hicieron esto?— pregunté mientras tocaba sus heridas.
—Un viejo desacuerdo, lo de siempre— hizo una mueca cuando toque su costilla —Perdió la moto, me amenazó, no se la devolví y así.
—¿Y Marcus y Joshua?— pregunté confundida.
—Al parecer ahora trabajan para él. Vendieron toda mí información y pusieron en peligro a mis padres— apretó la mandíbula —Los tuve que enviar a Francia.
Suspiré —Lo bueno es que ya están a salvo— él asistió —Ahora debes protegerte tú. Te llevaré dónde está mí familia, ahí podré curarte mejor.
Pero yo mentía. No iba a curarlo. Dejaría que otro lo hiciera. Yo tenía que hacer pagar a unos idiotas. Pero eso no se lo iba a decir porque seguramente no me dejaría. Christopher me había mandado mensaje diciéndome que a las 8 de la noche salía nuestro vuelo. Le pedí que tuviera preparada nuestra maleta. Con mucho cuidado lleve a Allen a la casa. Tratando de ir por caminos seguros. Al llegar los chicos estaban todos afuera. Cuando me vieron corrieron a ayudarme. Yo no me baje de la moto.
—¿Qué demonios le pasó?— pregunto Frederic.
—Amigo ¿Estás bien?— Tony lo sujeto de un brazo.
—Curenlo— ordene fría —Allen— él me miró —No digas nada.
—Bien— supongo que ya se dio cuenta de todo.
—Los veré en el aeropuerto— dije arrancando la moto a toda velocidad. Estaba demasiado enojada. Y eso me impedía conducir con precisión. Pero hoy mismo iba a dejar en claro que la niña pequeña que Allen cuidaba ahora se volvió una mujer fuerte que lo cuida y no deja que nadie toque a sus amigos.
[...]
—¿Vas a matarme?— pregunté con frialdad al sentir la punta de la pistola en mí nuca —No, no vas a hacerlo— él largo una carcajada sarcástica.
—¿Qué te hace pensar eso?
—Oh vamos Marcus, yo creí que eras más hombre— me burle —Pensé que eras de las personas que prefieren terminar con todo mano a mano y no utilizando un arma como un cobarde.
—No soy un cobarde— apretó más su agarre en mí brazo.
—Demuestralo, pelea conmigo— Joshua y el otro idiota que no conocía rieron —De todos modos los tres terminarán golpeados por mí.
[...]
Dylan Pov's
Me comía de lo nervios. Mí hermana aún no volvía y estaba empezando a desesperarme. El idiota de Allen se había negado a decir algo y luego se desmayó. Pasamos gran parte del tiempo curandolo y ahora que despertó sigue sin querer decirnos. Los tres amigos de Maddie al parecer son unidos con él y lograron sacar alguna información. Cómo quien son Marcus y Joshua. Quién lo golpeó. Pero después nada del paradero de Mad.
—Morgan cálmate— repitió Jones al ver a mí mejor amigo ir y venir de un lado al otro —Ella estará bien.
—¿Acaso la viste como estaba?— hablo furioso —Se notaba el coraje en sus ojos, no puede conducir de esa manera. ¿Y si algo malo le pasa?
Escuchamos una ronca voz —Ella sabe cuidarse sola— todos miramos a Allen —Y si te preocupa cómo maneja deberías saber que ella es profesional. Nunca vi a alguien conducir tan bien— una sonrisa de orgullo se le formó en los labios —Nunca perdió el control, en ninguna carrera, incluso la vez que compitió estando ebria ganó.
Mis ojos quisieron salirse de órbita —¡¿COMO QUE ESTUVO EN UNA CARRERA PELIGROSA Y CONDUCIO EBRIA?!
Él se encogió de hombros —Lo hizo una vez antes de ir a New York.
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Nadie Se Mete Conmigo #2
Novela JuvenilDespués de un año de no saber nada de Stanford y de los chicos que habitan ahí, mi vida cambió completamente. Ya no más niña tonta. Ya no más nerd débil. Ya no más juguete de nadie. Ahora cambié, y con mis nuevos amigos nos convertimos en los reyes...