Me gire despacio. Suspiré al ver a Patrick.
—Felicidades, estúpida— nos abrazamos.
—Gracias, idiota— le sonreí.
—Los chicos quieren saludarte— trague fuerte —Estan todos presentes, no puedes negarte y quedar mal— susurro en mí oído.
Maldije internamente y asentí con la cabeza. Demonios.
—Felicidades— mire a Dylan e hice una sonrisa falsa. Su rostro parecía más triste de lo normal, supongo porque pensó que lo presentaría como a mí familia.
—Gracias— me limité a responder.
—Les deseo lo mejor— hablo James.
—Gracias Bowers— respondí con frialdad.
Y así pasaron todos. Decían algo similar y yo les dedicaba una sonrisa falsa que parecía una mueca. Hasta que llegó el momento más difícil.
—Felicidades por su compromiso— sus ojos se estaban tornando rojos —Espero que sean felices.
Me dolía cada palabra que decía, y estaba segura que a él igual.
—Gracias Morgan— intenté sonreír. Pero no podía. Sentí mí mano ser apretada y me encontré con la mirada de Christopher. Él sabía que esto era muy difícil para mí.
Mire una última vez a Logan, él bajó la cabeza para ocultar las lágrimas y camino hasta sus amigos.
Me sentí miserable.
Soy una persona horrible.
Frente de él, que me dijo que me ama, anuncie mí compromiso. Debí haber pensado mejor las cosas.
—Pasemos al comedor, la cena está servida— la voz de la señora Tania me saco de mis pensamientos.
[...]
—¿Y cuando planean casarse?— nos pregunto la señora Adeline.
—Al terminar las clases, cuando regresemos a New York— respondí segura. Esto era algo de lo que ya habíamos hablado.
—¿Tienen pensado quienes serán las damas de honor?— pregunto entusiasmada mí cuñada.
—La hermana de Aylen, tu y nos queda un lugar libre— respondió sin mirar ya que se encontraba intentando hacer dormir a Kylan en sus brazos.
—¿Y quienes serán los hombres?— pregunto curiosa.
—Eso aún no lo decidimos— respondí incómoda, no quería hacer sentir mal a ninguno de mis amigos pero solo debía elegir a tres.
—Pensábamos en un amigo de ella y uno mío, el otro aún no sabemos— me ayudó Christopher —Su mejor amigo y el mío.
—¿No tienes algún hermano, Aylen?— me preguntó el señor Jeff.
Sonreí falsamente mientras era observada por todos. Sentí otro apretón en mí mano pero esta vez fue Félix.
—Yo creo que debería ser un amigo, digo, usar familiares es de la antigüedad— le agradecí mentalmente por salvarme de aquella situación.
—Pero es tradición— volvió a opinar —Además ella ya usará a su hermana.
—Porque soy su favorita y la más hermosa— presumió Megan.
Todos giramos a ver a Patrick que se retorcía mientras reía.
—Tu no eres su favorita, todos saben que ella me prefiere a mí— presumió con arrogancia.
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Nadie Se Mete Conmigo #2
Novela JuvenilDespués de un año de no saber nada de Stanford y de los chicos que habitan ahí, mi vida cambió completamente. Ya no más niña tonta. Ya no más nerd débil. Ya no más juguete de nadie. Ahora cambié, y con mis nuevos amigos nos convertimos en los reyes...