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POV's Narrador

Una semana era el tiempo que había pasado desde que Jeongin se alejó de Chan, quien, hundido en el alcohol lamentaba haber sido tan estúpido como para no darse cuenta de que Jeongin no fue solo una noche para él.

Hyunjin trataba de todas las formas posibles ayudar a Chan para que dejase el alcohol, pero era casi imposible.

Jeongin por otro lado empezaba a entrar en una fuerte depresión, se culpaba por haber acabado con la relación que tenía con Chan, y lo peor de todo, haberse alejado de Seungmin, quien, si había caído en una fuerte depresión al entrar en razón.

El menor de todos caminaba por los solitarios pasillos del Instituto, las clases habían acabado hacía aproximadamente media hora, y por pedido del profesor se quedó a ayudarle con unos problemas matemáticos para el siguiente día.

Miró a lo lejos como el grupo de de amigos de Chan caminaba por la plaza, este no había asistido a sus clases por al menos una semana, soltó un pesado suspiro y siguió su camino a la salida.

-Yang...- El menor se detuvo en seco al escuchar su nombre, apretó los labios y se volteó mirando a Minho, quien estaba cruzado de brazos frente a él.

-Minho... ¿S-Sucede algo?- Preguntó sintiéndose un poco nervioso, ya no tenía al hombre que aparecía siempre que lo iban a lastimar.

-Atrapa- Frunció el ceño antes de ver como Lee le lanzaba una especie de caja -¿Adivina quién te lo envió? Más te vale no volver a herirlo- Habló antes de girarse y desaparecer de la vista de Yang, quien extrañado miro la caja, donde yacía una nota en la parte superior de esta.

"Jeongin, se lo que dije, estoy consciente de ello, pero este tiempo que estuve lejos de ti, sin sentir tu labios, sin poder tocar tu suave piel ni poder ver el hermoso brillo en tus ojos me di cuenta de que no fuiste una noche para mi, aprendí por las malas que es el amor una vez, pero esta vez estoy muy seguro... Te amo... Y sueno cursi lo sé, pero solo deseo verte una vez más a mi lado, sentirte y poder estar contigo... Por favor, perdóname. -Chan."

El menor se quedó estatico en su lugar sintiendo unas cuantas lagrimas acumularse en sus ojos, no sabía que creer.

Se apoyó en una de las paredes y soltó un suspiro mientras cerraba sus ojos.

-También te amo...- 

(...)

Seungmin se encontraba en el parque cercano a su casa, miraba fijamente a los niños que jugaban en los columpios, se veían tan felices, solo deseaba volver a tener 7 años y jugar en el viejo tobogán.

Soltó un fuerte suspiró mientras apretaba con fuerza el pequeño collar en sus manos, ese collar que compartía con sus amigos, si es que seguían siendo sus amigos. 

Jamás olvidaría aquel día en el que asistieron a la feria anual en su pequeño pueblo, como este llegaba solo una vez aprovechaban la oportunidad para ir juntos los tres y subirse a todas las atracciones posibles, pero esa vez decidieron parar a tomar un batido y él notó a un viejo hombre que vendía cadenas y pulseras de la amistad. Con una gran sonrisa les insistió a sus amigos que se compraran una para representar su amistad, juntos fueron y miraron todas y cada una de aquellas hermosas joyas, pero terminaron por escoger un corazón dividido en tres, que juntos formaban la frase "Juntos por siempre y para siempre" . Él era el más emocionado, extraño de su parte por que en aquellos tiempos era una persona tan seria y fría, que sorprendió a sus amigos. 

Extrañaba tanto el poder compartir momentos como esos con sus amigos, pero, lo había arruinado, él había arruinado su amistad, por qué sabía tan bien que Félix cuidaba a Jeongin como su más preciada joya, aunque no tenía tanta preferencia entre ambos, había conocido mucho antes a Jeongin.

Sintió una presencia a su lado que lo sacó de sus pensamientos, miró a Félix quien estaba a su izquierda con una gorra y un cubre bocas, dió una pequeña sonrisa y apoyó su cabeza en el hombro del mayor

-No puedes estar llorando así como así en un parque- Rodeó los hombros del menor con unos de sus brazos y suspiró

-Yo... Solo pensaba... En nuestra amistad- Miró a Félix con un pequeño puchero

-Tranquilo, todo va a mejorar, ahora déjame ponerte ese collar en su lugar- Dijo tomando la cadena en las manos de Kim y acomodándola de nuevo en su cuello

-¿Estás seguro?- Preguntó y el mayor asintió

-Completamente... Vamos a casa, hoy dormiré contigo si o si- Rió y dejo un suave beso en la frente de Seungmin, quien no evitó soltar unas cuantas lágrimas

-Gracias por no dejarme hyung- Su voz se quebró antes de abrazar al mayor y romper en llanto, mordiendo su labio con fuerza

-Oh no llores... Me harás llorar a mi también- Susurró Félix envolviendo al menor con sus brazos -Todo va a estar bien... Cree en tu hyung, siempre querré lo mejor para ti- Dijo y soltó al menor limpiando sus lágrimas.

(...)

Hyunjin se encontraba sentado en una de aquellas bancas, miraba a lo lejos como su menor era abrazado por el Australiano, soltó un suspiro y se levanto de ahí, caminando hacia su auto mientras estaba hundido en sus pensamientos.

Su cabeza era un desastre, pensaba en tanto a la vez. Chan estaba mal, su madre insistiendo en que debía mejorar... Y el pequeño chico que se encontraba a lo lejos junto al rubio. Subió al auto y cerró los ojos un segundo, tratando de olvidar todo aunque sea un momento. Debía de ir a casa de Chan para seguir intentando que dejara el alcohol a un lado, ya era una semana en la que solo pasaba tirado en su casa, encerrado en su habitación bebiendo como loco las tantas botellas que guardaba, y le preocupaba, no quería que esa adicción que se podía controlar empeorara con el tiempo.

Escuchó su celular sonar y contestó la llamada entrante de Minho

-¿Que sucede?

-Jeongin ya tiene la caja, ahora solo nos toca esperar, cuida a Chan, recuerda que su bipolaridad no ayuda mucho, y su ira menos

-Lo haré, no te preocupes

Stupid (ChanIn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora