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POV's Narrador

Jeongin sintió la mano del mayor apartar los cabellos que caían por su rostro. Los rayos del sol recién salían y el canto de los pájaros creaban un ambiente tranquilo, perfecto para los futuros padres. 

-¿Quieres desayunar?- La voz del mayor, algo ronca por recién despertarse, provocó que Yang sonriera

-Sí... Tengo mucha hambre...- Susurró en respuesta el menor antes de que el sonido de su estómago pidiendo alimentos resonara por el lugar

-Y se nota...- Rió Bang viendo al menor sonrojarse -Espera aquí, iré a preparar el desayuno, tu descansa

-Tomaré una ducha...- Avisó el menor sentándose en la cama -Bajaré en unos minutos- Jeongin sonrió y acarició la mejilla del mayor.

Bang rió antes de tomar al más joven de la cintura y acostarlo besando sus dulces labios, acarició su fina cintura y después de mirarse mutuamente por unos segundos se puso de pie saliendo de la habitación.

Jeongin se puso de pie y caminó hasta él baño, se desvistió y finalmente se adentró a la ducha. Comenzó a lavar su cuerpo sin prisa alguna, se enjabonó y después se quitó el jabón, lavó su cabello el cual comenzaba a crecer demasiado.

-Creo que debo cortarme el cabello pronto... Pareceré mujer si crece un poco más...- Se susurró Yang a sí mismo antes de terminar de sacar toda la espuma en su cuerpo.
Salió de la ducha y con una toalla secó todo su cuerpo, se puso una bata blanca y salió de la habitación de baño. Fue hasta el gran armario del mayor y tomó una de las camisas de Bang de color negra, después de ponérsela se puso uno de sus boxers y sin más bajó a la cocina, de donde provenía un delicioso olor.

-Cariño ¿Te gustan los huevos revueltos?- La voz del mayor se hizo presente, una sonrisa adornó el rostro de Jeongin quien fue hasta donde se encontraba su pareja y le rodeó con sus pequeños brazos por la cintura, dejando un beso en la nuca del mayor. 

-Me encantan...- Respondió antes de separarse del contrario y caminar hasta el desayunador que allí se encontraba, tomó asiento en una de las sillas altas y, del tazón que se encontraba frente a él, tomó unas cuantas uvas, comiéndolas lentamente.

-¿Te sientes bien? ¿Cómo está nuestro pequeño? ¿Ya comenzó a moverse?- La emoción del mayor le sacó una risa a Yang quien negó

-Chan, no tiene ni un mes, aún no se puede mover... Espera un poco más- Recordó Jeongin antes de ver al mayor acercarse a él y dejar un beso en su frente

-Lo siento... No sé nada sobre embarazos... Tendré que leer mucho, te prometo que mañana sabré todo y te cuidaré mucho- Prometió el más alto acariciando con suavidad el vientre de su menor

-No te apresures, ahora solo... Deberás de darme mucha comida, por favor y gracias- Comentó el más joven antes de poner una uva entre sus labios y tomar al contrario por la nuca, le acercó a su rostro y con cuidado posó la uva entre los labios del mayor.

-Cariño... Parece que el embarazo está alterando tus hormonas demasiado... ¿No crees?- Preguntó Bang con diversión después de comer la uva.

-No inventes- Susurró Jeongin y una vez más se escuchó su estómago rugir.  -C-Creo que tu hijo tiene mucha hambre...- Rió nervioso y comenzó a acariciar su vientre con lentitud

-Espera un momento...- Pidió el mayor y volvió a su trabajo, terminando el desayuno después de unos minutos.

El australiano sirvió la comida en dos platos los cuales dejó sobre el desayunador, después tomó dos vasos y los llenó de jugo de naranja, para finalmente sentarse junto al menor, quien ya había comenzado a comer

-Lo siento... Tengo mucha hambre... Oh, ¿Se puede repetir?- Bang abrió sus ojos a tope al escuchar al menor, lo miró antes de reír y dejar un beso en su frente

-Te haré más si quieres, pero termínate eso primero- Respondió el mayor antes de comenzar a comer sin prisa, viendo al menor quien parecía no haber comido en una semana.

Pasaron unos minutos y el mayor volteó a ver a Yang, su impresión fue tanta que un trozo de comida se atoró en su garganta y comenzó a toser. La mano de Jeongin fue rápido a su espalda dándole golpecitos, y cuando por fin se recuperó de aquello miró al más joven mientras reía.

-¿Sigues con hambre?

-La verdad es que sí...- Susurró Jeongin apenado

-Espera, terminaré con esto y te iré a preparar más comida ¿Bien?- Avisó el australiano y siguió comiendo, esta vez más rápido para así poder volver a prepararle el desayuno a su pequeño.

(...)

-Jeongin ¡No corras! ¡Por Dios! Leí que las personas embarazadas no pueden correr- Regañó Bang mirando a Jeongin correr por la enorme sala de estar de su mansión, bufó con molestia antes de ir hacia el menor y rodearlo con sus brazos. -Es suficiente, ve a sentarte y no te muevas- Ordenó el rubio

-¡Pero no quiero sentarme! ¡Estoy aburrido Daddy!- Chilló Jeongin antes de ver al mayor a los ojos y llevar sus manos a la nuca contraria -Juguemos un rato... ¿Si?

-No- Fue lo único que respondió el mayor antes de alzar al más joven y caminar hacia el sofá, sentándole allí. -No te quiero ver correr, obedece o me enojaré- Advirtió Bang antes de volver a sentarse en el sofá individual frente a Yang, siguiendo con sus lecturas de "Los principales cuidados a una persona embarazada".

-Chan...- El mayor suspiró con cansancio antes de levantar la vista hacia el menor. Su molestia pasó a ser preocupación al ver al más joven con sus ojos vidriosos mientras abrazaba sus piernas en posición fetal -L-Lo siento- Susurró Jeongin

-Cariño...- Chan se puso de pie y caminó hasta el menor, se sentó a su lado y le rodeó con sus brazos en un cálido abrazo -Perdóname tú a mí... Pero debes de entender que debes de tener cuidado, ahora tienes a nuestro pequeño ahí dentro y no puedes hacer lo mismo que antes por que puedes lastimarle... ¿Entiendes?- Yang con un puchero asintió y se abrazó al contrario, hundiendo su rostro en el cuello del mismo.


Stupid (ChanIn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora