Stupid (ChanIn)

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POV's Narrador

Jeongin se apartó del cuerpo que estaba junto al suyo, miró confundido unos segundos a aquel hombre frente a él. ¿Ese era SU Chan?

Su boca comenzó a llenarse de saliva provocada por los pensamientos sucios que recorrían su mente, el hombre frente a él tenía una sonrisa burlona mientras miraba al menor.

-¿Jeongin? ¿Que tanto piensas amor mío? ¿Es que acaso no me extrañaste?- Preguntó el mayor y casi instantáneamente los ojos del coreano comenzaron a humedecerse.

Jeongin no evitó correr y saltar a los brazos del australiano mientras las lágrimas escapaban de sus ojos con rapidez, los fuertes brazos de Bang lograron tomarlo a tiempo y lo apretaron a su fuerte y firme cuerpo. Su nariz fue a la blanquecina piel del cuello de Yang, inhalando una vez más el dulce aroma que desprendía su pequeño amor.
Al separar un poco sus rostros, ambos se miraron entre si, antes de que los carnosos labios del mayor atraparan los de Yang, quien se apegó aún más a Bang.

-Te amo... Te amo, te amo, ¡Te amo!- Exclamó Yang mientras incontrolables lágrimas salían de sus ojos, sintió los brazos de Bang bajarle de encima suyo y miró al mayor a los ojos por unos segundos antes de sonreír como jamás lo hizo, sus pequeñas manos fueron a las mejillas del australiano, acarició la suave piel del rostro contrario y bajó finalmente sus manos al pecho del mayor, admirando la vestimenta tan perfecta que el contrario traía.
La camisa era blanca, manga larga y de botones, unos pantalones negros y zapatillas relucientes, los lentes oscuros de sol que le daban un toque sensual y lo que terminó de acabar con su cordura, fue aquel cabello que alguna vez fue castaño, y ahora era rubio.

-No me siento bien aquí- Susurró Yang abrazando al mayor

-Sé lo que deseeas pequeño- La mano de Bang tomó de forma posesiva la cintura de Jeongin, antes de levantar la mirada y llevarse una gran sorpresa. -¿Pero que ven mis ojos?- Se preguntó a sí mismo el mayor notando a dos parejas que esperaban en la salida del aeropuerto –Hyunjin junto a Seungmin, y Changbin junto a Félix– y que miraban fijamente a la pareja recién encontrada.

-Oh... Creo que primero debería de contarte todo lo que sucedió mientras no estabas- Rió Yang apegándose al mayor que dejó un beso sobre su cabeza.

-Quizás... Quizás no... Nosotros dos tenemos muchas cosas pendientes- Susurró Bang con una sonrisa juguetona.

-H-Hyung... No hable así en este lugar- Rogó el menor con sus mejillas coloradas.

-Entonces vamos a casa de una jodida vez- Jeongin rió y tomó la mano del australiano, caminando ambos hacia la salida del lugar.

-¡Chan! Hasta que te dignas a venir- La voz de Seo inundó los oídos de todos, se soltó del agarre de Lee y fue hasta el mayor de todos dándose ambos un abrazo.

-Lo sé, fue más de lo esperado, pero perdí a Park

-¿Park?- Jeongin estaba confundido, el cuerpo de Bang se tensó y ambos amigos miraron al menor de todos.

-No es nada pequeño, es un problema que tuve hace mucho- Respondió el mayor

-Oh... Mientras estés bien no hay problema- susurró el menor antes de volver a tomar la mano del mayor la cual había soltado minutos antes.

-Bien... Creo que deberíamos ir a casa- Propuso el australiano mirando a los demás.

-Minho dijo que dejó tu auto cerca, así que ten- Seo le pasó un par de llaves al mayor quien las tomó gustoso, su mirada se clavó en Jeongin quién jugaba con el borde de su camisa

-Nos vamos- Habló sin dudar Bang tomando a Jeongin de la cintura llevándoselo a su auto. Yang algo confundido siguió al mayor y subió al auto viendo como las otras dos parejas se iban a toda velocidad en sus respectivos autos. -Jeongin, después de llegar a casa... Te daré algo- Susurró el mayor besando la mano del menor quien sólo asintió colorado.

-E-Está bien hyung

-Parece que aún no aprendes- Susurró el mayor deslizando de forma juguetona su lengua por encima de sus labios.

La mano de Bang apareció por arte de magia sobre los finos pantalones de Yang quien no pudo evitar soltar un jadeo y, automáticamente, llevar sus manos a la del australiano.

-Chan... Aquí... Aquí no podemos hacer eso- Susurró Jeongin avergonzado

-Si me da la jodida gana de hacerlo aquí mismo puedo hacerlo... O ¿Debo recordarte la situación del hospital?- Preguntó Bang con una pícara sonrisa.

-N-No... E-Es... Solo que sería mejor en la casa- Contestó Yang con vergüenza notoria en su voz, Chan solo pudo sonreír y después encender el auto, comenzando a conducir sin prisa hacia casa.

Jeongin sentía como aún estaban sus mejillas coloradas, desvío su mirada a la ventana mientras una que otra vez sentía la mano de Bang avanzar lentamente por encima de su pierna.

Un suspiro escapó de sus labios antes de ver como el auto se detenía en una carretera solitaria.
Por alguna extraña razón le llegó un pensamiento a la cabeza.

"patada en las pelotas"

Sacudió su cabeza eliminando ese pensamiento de su mente, miró al mayor quien solo mordía su labio mientras miraba a un punto fijo.

-¿Chan? ¿Por qué nos detuvimos aquí?- Preguntó el menor con curiosidad.

-Desnúdate- Los ojos de Yang se abrieron a tope y miró al mayor con sorpresa

-C-Chan hyung... N-No podemos

-Te ordené... Que te desnudaras- Habló el rubio con voz firme.

Jeongin sólo tragó en seco y llevó sus manos temblorosas a su camisa, quitandola de donde estaba.
Después de esto quitó sus tennis y pantalones, dejando ver sus pequeñas bragas con detalles de sandía.

Ese fue el límite del australiano.

-Maldición- Susurró y en un parpadeo el mayor ya no poseía mas ropa que sus boxers.
Sus ojos estaban más oscuros y Jeongin solo miraba el bulto que crecía por debajo de aquella fina tela proveniente de la famosa empresa Calvin Klein.

"Ayúdenme" susurraba su voz interior.