Vacaciones en Roma

Capítulo 61

N/A: Buenas, pues por agradecimiento a vuestro apoyo y por vuestros mensajes que siempre me sacan una sonrisa quisiera daros las gracias y recordaros que seguimos con fuerza. Gracias a todos, seguimos.

Los personajes no me pertenecen…
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POV KATE

Despierto a su lado y no me doy cuenta de lo que he echado esto de menos hasta este momento, solo nos damos cuenta de que queremos algo o a alguien cuando lo hemos perdido, al menos tengo la suerte de tenerlo aquí a mi lado.

Decido levantarme para hacerle el desayuno cuando me doy cuenta de que estamos en el hotel. Cojo el teléfono y decido pedirlo al servicio de habitaciones, siempre me gustaba salir a desayunar o a comer por la ciudad, pero hoy me apetecía desayunar solos, sin que nadie pudiera molestarnos.

Cuando acabo vuelvo a la cama y me tumbo detrás de él. Acaricia su pelo y bajo por su brazo hacia su espalda y lo noto removerse mientras refunfuña un poco sacándome una sonrisa.

-Tengo que irme-digo consiguiendo que se despierte de golpe casi golpeándose en el intento.

-¿Te vas?

-Tengo que trabajar en una hora. Desayuno y me voy.

-¿Por qué?

-Porque tengo que trabajar-digo sonriéndole-anda levántate y desayunamos juntos ¿sí?

-Solo si me das los buenos días como dios manda-dice poniéndome morritos y me acerco con una sonrisa para besarlo.

Lo veo sonreír allí tumbado mientras me levanto y tras estirarse un poco lo veo acercarse hacia la mesa donde ya estoy sentada yo. Está completamente desnudo y no puedo evitar mirarlo de arriba abajo.

-¿Te gusta lo que ves?-dice con una sonrisa haciéndome sonreír-a mí no, tienes demasiado ropa-dice poniendo cara de enfadado mientras se coloca el albornoz antes de sentarse a mi lado y besarme de nuevo.

-He pedido el desayuno no creo que tarde mucho.

-Por mi puede tardar todo lo que quiera.

-¿Quieres que me vaya sin comer nada?

-No, quiero que no te vayas-dice poniendo de nuevo esos morritos y no puedo evitar acercarme para besarlo justo cuando dan en la puerta.

-Ves a abrir ¿sí?

-¿Y si es una camarera sexy? ¿No tienes miedo?-dice con una sonrisa y le tiro un cojín que falla mi objetivo por poco.

Llega un minuto después con nuestro desayuno y se sienta con una amplia sonrisa a mi lado. Saca todo y desayunamos entre risas y besos, sin dejar de tocarnos y mimarnos en todo momento.

-¿Qué vas a hacer mientras trabajo?

-No sé, dar alguna vuelta.

-Bueno si no vas a hacer algo en especial…

-¿Qué vas a pedirme?