Élite

•3•

Sakura los miro a todos, o al menos intento hacerlo ya que en esos momentos estaba tan nerviosa por el hecho de estar rodeada de hombres gigantes y amenazantes que no tenía cabeza para nada más que la sensación de peligro.

Por un momento se sintió realmente enfadada por cómo ese hombre la llamó "chica" y estuvo a punto de soltarle un insulto hasta que su instinto le dijo que se mantuviera calmada. Tenía que tener sentido común, aquel no era momento para plantar cara a un grupo de desconocidos que la superaban en número.

Por otro lado el tipo había dicho "nuestra chica", eso quería decir que posiblemente aquel era el equipo al que había sido asignada.. otra explicación no había.

—Eso significa que ustedes son mis chicos —respondió Sakura con la barbilla en alto.

El tipo más grande, el que antes había hablado, se le quedó mirando fijamente. En su rostro seguía esa expresión seria y desaprobadora, como si no le agradara lo que estaba viendo.

—Pues tú tampoco me agradas —pensó Sakura cruzándose de brazos sin quitarle la vista al sujeto.

—Pink —dijo de repente el hombre mientras chasqueaba los dedos como en señal de aprobación.

—¿Que?

—Creo que acaban de ponerte un alias —hablo otro tipo a su espalda— Pink.

¿Que? ¡Ni en sueños!

Sabía que los agentes de campo solían ponerse un sobre nombre o alias por los cuales eran llamados la mayor parte del tiempo, pero ella no quería ser Pink, ni chica, ni ningún alias que se les ocurriera a aquellos tipos.

Sakura quería un alias de chica dura, uno que cuando la gente lo escuchase le inspirase respeto.

—No quiero ser Pink —dijo— prefiero Asesina o algo así.

Ellos rieron al escucharla, todos ellos.

—Lo siento, pero no puedes elegir —volvió a decir el tipo más grande.

—Nadie me va a respetar llamándome Pink.

—De todas formas nadie lo hace —respondió él encogiéndose de hombros— Por eso nosotros nos vamos a encargar de tu entrenamiento.

No. No podía ser. Esos tipos iban a acabar con ella, iban a humillarla y la harían sufrir estaba segura. Maldita sea la hora que se separó del grupo de novatos, con lo feliz que estaba corriendo e intentando no vomitar..

—No, yo tengo que quedarme con mi grupo —dijo ella— ¡No estoy al nivel de ustedes, no puedo hacerlo!.

—Eso es obvio —dijo esta vez el más pequeño de todos ellos, lo cual era bastante gracioso porque media más de metro ochenta, tenía el cabello castaño y los ojos oscuros y como el resto era bastante musculoso— pero te vamos a entrenar mucho mejor y más rápido de lo que lo haría Gai, ya que él tiene que ocuparse de todos los novatos y nosotros nos encargaremos sólo de ti.

Eso solo significaba que ella era el único objetivo de las torturas.

—Estoy perdida.

—No tienes ni idea Pink —respondió de nuevo el más grande y le hizo una seña para que lo siguiera— Comencemos.

•••

Seis horas después, Sakura se encontraba agonizando en el suelo, mirando al cielo y pensando seriamente en fingir una enfermedad o romperse una pierna. Lo que sea antes que aquello.

No le gustaba estar sudorosa y sucia, y allí estaba llena de tierra y sudor, tampoco le gustaba está apunto de vomitar y ya había vomitado hoy dos veces delante de sus nuevos compañeros de equipo.

Para su desgracia ni vomitando le dieron tregua.

Por otro lado el de cabello castaño de antes, Kiba Inuzuka cuyo alias era Wolf, le había asegurado que eso le pasaba a todos la primera vez. Y el tipo grande, que era el jefe Kyūbi, le había gritado que se levantara y moviera el culo.

Lo odiaba, era un idiota.

Todos eran unos idiotas, pero Naruto Uzumaki era el idiota más grande de todos, y para su mala suerte era también su nuevo jefe. No había parado de mirarla con desaprobación, como si esperase que ella se rindiese y así poder deshacerse de ella.

—¡Ja, espera sentado! —y con esfuerzo intento levantarse del suelo.

—Bebe agua —le ordenó Kyūbi tendiéndole una botella.

—Te odio —le dijo Sakura mirándolo a los ojos— ¡Los odio a todos, son unos sádicos que disfrutan del dolor ajeno!

Wolf rio y se sentó en el suelo a su lado.

—Vamos, no seas así —le dijo alegremente— Te vamos a poner en forma, vas a poder correr, nadar y escalar muchos kilómetros...

—Yo no quiero correr —respondió ella— no quiero que me duela al respirar, ni toda esta tierra metida entre mis partes íntimas y ¡mira como me he quemado la piel! —exclamó mostrándole su hombro descubierto, el cual ya estaba bastante enrojecido por el sol.

El resto de chicos se sentaron también en el suelo a descansar. Ya que mientras ella entrenaba ellos lo hacían también y, durante las seis horas que había pasado con ellos, había podido aprenderse sus nombres y alias.

Kyūbi era Naruto Uzumaki, el jefe del equipo y el imbecil que la había nombrado Pink. Con su cabello rubio y ojos azules fríos como el hielo, Sakura tuvo que admitir que daba bastante miedo.

Wolf era el médico del equipo y por lo que había visto el más alegre de todos ellos, al menos de momento.

Shadow era un azabache con peinado de coleta, su nombre era Shikamaru Nara y por lo que ella había visto era el más analítico de todos.

También estaba Raikiri, que parecía ser el mayor de todos ellos ya que tenia aspecto de tener cerca de cuarenta años. Era muy grande, tenía el pelo plateado y una cicatriz surcándole el ojo izquierdo. Sakura recordaba vagamente su nombre pero estaba casi segura de que se había presentado como Kakashi.

Byakugan parecía tan amable como Wolf, pero decidió no confiarse demasiado en esas apariencia ya que era el francotirador del grupo, lo cual significaba que se le daba muy bien matar personas.

Bruce Lee, por el contrario era el más joven de todos y también quien daba más ánimos a seguir entrenando al resto. A veces era demasiado efusivo y por alguna razón su apariencia se le hizo bastante parecida a la de Gai.

Y por último estaba Sharingan, quien al parecer estaba aún más descontento con su presencia que él mismo Naruto. No le había dirigido la palabra, ni la había animado o dado un consejo, para él ella era totalmente invisible.

Una lástima no haber sido igual de invisible para el resto de ellos.

—Bienvenida a tu infierno personal Sakura..

Continuará.